El camino perfecto

15. El profesor sexy

Sam continuaba con su mirada fija en la pareja. Se habían sentado unas cuantas mesas lejos de nosotras, pero aun no salían de nuestro campo visual.

-Mmmm- comencé dudando- Tal vez es una amiga, o su hermana, o una prima- le dije a Sam. Intentaba convencerme mas a mi que a ella.

-¿Que se supone que vemos?-pregunto West confundido. Hice un pequeño gesto con mi cabeza hacia la mesa en cuestión. Sam aun tenia su mirada fija.

-Sam...-dije batiendo mi mano frente a su cara. Inmediatamente reacciono.

-¿Si? Oh... ¿Que?- pregunto intentando alejar la vista.- ¿Dijiste algo?-pregunto mirándome de nuevo.

- Tal vez es una amiga, o su hermana, o una prima- repetí.- No hagas conclusiones apresuradas- la calme poniendo una mano en su hombro.

-Si bueno...-comenzó. Podía ver la decepción en sus ojos- Puede hacer lo que quiera con su vida. Digo... no somos nada ¿sabes?- jugaba con sus manos en su regazo- Solo... solo me molesta que haya dicho que tenia una "emergencia- dijo haciendo comillas con sus dedos- Si no quería estar conmigo podía simplemente decírmelo. No es que me importe- finalizo cruzándose de brazos. Si no conociera a Sam tan bien como lo hacia, le creería. Pero la realidad es que se cuanto la han lastimado, y se que no quería salir con ningún chico. No habia querido salir con ningún chico, hasta que conoció a Alexis...

-Espera...-dijo West mirando a la mesa y luego a nosotras dos.- Ese es el chico con el que saliste hoy. Y te dijo que tenia una emergencia... Luego aparece aqui con esa chica- unió los puntos- ¿POR QUE DEMONIOS ESTA AQUÍ CON ESA CHICA?- medio grito-medio susurro levantándose de la mesa- Oh... Lo voy a matar. Niño rico creído de mierda- se quejo. Lo detuve.

-West. No.- dije calmandolo- No podemos deducir cosas, no sabemos quien es la chica.- dije a los dos.

-No parece solo su "hermana" o "prima"- dijo haciendo comillas e imitando mi voz. Fruncí el ceño.- Parece una cita. Parece malditamente como una cita- Si hubiese sido humanamente posible le saldría humo por la nariz. Parecía un toro furioso. O no, mejor, King Kong furioso..... Era una de las cosas que amaba de el, era muy sobreprotector, aunque a veces se pasara un poco.

-¡Calmense mierda!-exclame- Cierren sus benditas bocas de una buena vez. Hay que averiguar quien demonios es, y así saber si castramos al chico o no. Jesús- resople. La campanita de la puerta sonó de nuevo. La risa de una chica llamo mi atención y me di la vuelta. Chase hablaba con una chica rubia de cabello corto. Su melena ondulada y rubia oscilaba en sus hombros. Se agitaba un poco cuando reía. Ay mierda.

-¿Ella es la prima o hermana de Chase?-pregunto Sam en mi dirección arqueando una de sus cejas.

-Chase no tiene hermanas-dije- Y no se si tiene primas. Supongo que si. No saquen conclusiones apresuradas- me queje. Mirando fijamente a la mesa. West comenzo a reírse. ¿Que rayos?

-¿Por que rayos te ríes Chase?- le pregunte. Paro de reírse unos segundos. Sam y el me miraban fijamente con los ojos un poco abiertos por la sorpresa. Comenzaron a reírse de nuevo.- ¿Que? ¿De que se ríen?- exigi frustrada. Luego rebobine mis palabras en busca de algo. <<¿Por que rayos te ríes Chase?>> Chase. Oh, mierda.

-¿Me llamaste Chase?- pregunto riendo. Negue con la cabeza rápidamente.

-uh-uh- negué.- No. Nop. Yo dije...- dude. Rayos. ¿Que dije? ¿QUE DIJE?- dije... ¡Ay!- me queje haciendo un puchero.

-Dios Candace... ¿Que te esta haciendo ese chico?- dijo Sam. negó con la cabeza.

-Mira quien habla.- me queje.

-Yo...- se quedo callada en el momento en que las risas resonaron en la mesa de Chase. Me gire para ver a la chica rubia riendo junto a Chase, quien también reía. La camarera que nos había atendido llego con la cuenta.

-¿Quien paga?-pregunto... Chiara mirándonos. Sam y yo señalamos a West. El sonrió sacándonos el dedo del medio. La chica dudo.

-Yo-respondió West tomando la pequeña tarjeta. La firmo y siguió a Chiara hacia donde ella le indicaba, para pagar. Sam miro unos segundos hacia la mesa. Rode los ojos. Mi teléfono sonó en mi bolso.

-Oh...-dije metiendo la mano en la cartera y golpeando todo mientras buscaba mi teléfono celular- ¿Donde rayos esta el teléfono?-gruñí a la cartera. Al fin lo encontré, pero al sacarlo ya habían dejado de llamar. 15 mensajes de el mismo numero y otros 12 de Kate.

-Mierda-dijo Sam asomándose para ver en mi teléfono- Eres una chica muy solicitada- rió.

-No...-comencé leyendo los mensajes- Solo son Kate y Valerie. Llegamos tarde a las clases de salsa- dije levantándome.



#44729 en Novela romántica
#29503 en Otros
#4354 en Humor

En el texto hay: karma, drama, comedia humor

Editado: 29.10.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.