Capítulo XXVII

No era consciente de cuantos días llevaba bebiendo, después de la discusión con mi hermano y mi mejor amigo, había caído en cuenta de la estupidez que había cometido, hace una semana no sabía nada de mi mujer, de mi hermano o de mis amigos, me había encerrado en mi propia burbuja de dolor y de miseria, cada que recordaba como Cassandra salía corriendo de casa, con su mirada se llena de miedo, de dolor y de asco, sentía la necesidad de golpearme hasta la muerte.

Me enfermaba la idea del Connor impulsivo que no sabía lo que decía, me enfermaba saber que había pensado en deshacerme de mi bebe después de luchar tanto porque Cassandra aceptara ser madre; quería matarme y en el proceso revivirme para que mi hermano y mi mujer lo hicieran; me sentí asqueado conmigo mismo.

Había dejado de asistir al hospital, de encargarme de Nightmare y de cualquier actividad que tuviera, me concentraba en entrenar y beber como un soberano idiota, porque era un cobarde que no podía buscarla y rogarle por su perdón, porque consideraba que lo que había hecho no merecía compasión alguna.

-Levántate- dijo la voz de mi mejor amigo desde la puerta, Tyler estaba parado en el umbral observando el lugar con asco- ¿Qué porquería estas bebiendo ahora? - me pregunto acercándose divertido; lo observe sorprendido, él era quien más deseos de matarme tenía- ¿Qué me miras idiota? - dijo divertido arrebatándome la botella de las manos.

- ¿Qué carajo haces acá? - le pregunté, estaba en la antigua casa de mis padres en la habitación de la mansión de Zuruprum, papá me había permitido hospedarme acá; no podía soportar la mirada de reproche de mi hermano y el fuerte olor de mi mujer; era embriagante y asfixiante estar en el lugar en el que habíamos concebido a la criatura que yo pensé en matar.

-Venimos a hacerte compañía- dijo mi mejor amigo mirando hacia la puerta, esta se abrió y Dexter entro acompañado de Travis, los observe sorprendido sin poder inmutar palabra- ¿trajeron la comida y las bebidas? - pregunto mi mejor amigo, ellos asintieron sentándose en mi cama.

- ¿Qué hacen todos acá? - les pregunte, mi hermano golpeo mi hombro a manera de saludo y supe que ya no estaba ni de cerca enojado, pude sentir su tristeza mas no su rabia o rencor- ¿estoy muerto? - pregunte tocando mi rostro y todos soltaron una carcajada divertidos- ya enserio ¿Qué mierda están haciendo acá?, no estoy de ánimos para juegos estúpidos.

-Venimos a hacerte compañía y que dejes de lamentarte como un idiota- dijo Tyler observándome fijamente – lo jodiste todo, es cierto- dijo mi mejor amigo comiendo de su paquete de frituras- fuiste un completo cabron con mi hermana cuando también tenías responsabilidad- admitió - no mataste a nadie Connor solo te asustaste- dijo- ya padeciste indiferencia, dolor y estoy completamente seguro que estas arrepentido.

-Como no tienes idea- dije tratando de no llorar ante sus palabras- lo jodi todo y ahora ella no quiere ni verme- dije tratando de controlar el ardor que sentía mi pecho; mi hermano se acercó y paso sus brazos por mi cuerpo permitiéndome llorar y sacar todo el dolor que estaba reprimiendo.

-Ambos fuimos unos idiotas, tú por abrir la boca de más y yo por quedarme acallado- dijo él consolándome- te abandone, te culpe y me dedique a embriagarme peor de lo que tu estas ahora- me confeso apartándose- estamos a tiempo de buscarla y corregir nuestro error, somos los Black, jamás nos rendimos y no dejaremos a nuestra familia sola- me aseguro mi hermano.

-Por ahora creo que sería maravilloso que la dejaran tomar su espacio- dijo Dexter y ambos lo observamos- ella esta dolida y no creo que los escuche, la situación no es la mejor- nos aseguró- deberías afeitarte, dejar de beber y dejar de parecer un perro apaleado- dijo él con seriedad- esperaba la reacción que tuviste de Travis, no de ti Connor- dijo el que alguna vez fue mi mejor amigo aparte de Tyler -ahora admite que la cagaste y busca a tu mujer cuando las cosas se hayan tranquilizado.

-Levántate de esa cama hermano- dijo Tyler, asentí divertido y un poco más tranquilo, como ellos me lo habían ordenado, tome una ducha, arregle un poco mi desordenado cabello y afeite mi prominente barbar, dejando mi rostro completamente afeitado; Travis y yo teníamos estilos completamente diferentes, a mí me gustaba estar sin señales de barba y él procuraba siempre tenerla de forma incipiente, no tan notoria.

Arreglé mi cuerpo con el uniforme de cacería que ahora todos debían portar y algunas armas, no estábamos exentos de algún ataque, salí de mi baño encontrándome con mi hermano, mi mejor amigo y Dexter jugando con la consola de juegos que había traído del mundo humano; ellos reían y mi hermano trataba de sonreír sin importar el hecho de sentir como su lobo se revolcaba de tristeza.

-Connor tu móvil está sonando- dijo Travis sacándome de mi ensoñación, le sonreí agradecido y me acerque hasta el neceser, el aire se detuvo en mis pulmones al ver algunas llamadas perdidas de Cassandra- ¿Qué pasa hermano? - me pregunto, alce mi mirada y le mostré el móvil- puta madre - dijo abriendo sus ojos de par en par.

-Revisa tu móvil- le dije, él saco de su bolsillo el aparato y me mostro, algunas llamadas perdidas de nuestra mujer, el nerviosismo se instaló en mi sistema, en este momento ella debía estar pensando lo peor.