A nuestro final

Descanso sin paz

Rita despertó de una mala noche de sueño, gruñendo por la dureza del suelo que improvisaba como cama.

 

“Señora” saludó un soldado al verla levantarse y pasar junto a él.

“dos noches y las camas siguen igual de horribles ¿cómo va el progreso a los barracones?”

“el progreso ha sido satisfactorio y deberia completarse y asegurarse la coneccion al atardecer”

“bien, iré a ver qué nos tiene planeado jack para estos días, informame de cualquier novedad”

“Si señora”

 

Rita prosiguió su camino, pasando entre estrechos pasillos cavados con prisas que unian las diferentes zonas del fuerte, varios soldados se encontraban estacionados cada tanto para observar la muralla de escombros causados por el deslizamiento, estos soldados estaban constantemente atentos a los posibles avances de los no muertos y a la condicion de los wyvernos volando, tras caminar durante unos cuantos minutos Rita llegó a un hueco que conectaba con una pared, al cruzarlo llegó a una bóveda que contenia muchos estantes de armas, estos estaban vacios en su mayoria, pero aun se podia ver algun que otro arma, sobre todo espadas estaban presentes, mientras cruzaba hacia la salida de esta habitacion rita notó una espada peculiarmente larga, de un unico filo y con una ligera curvatura, estaba posicionada en una vitrina y era notorio que su uso era más decorativo que militar, lo cual despertó sus dudas respecto a la presencia de esta extraña arma en este lugar creado especificamente para la resistencia contra seres no muertos e incapaces de sangrar.

Rita prosiguió su camino al salir del la boveda, hasta que encontró un soldado estacionado frente a una puerta, este la saludó y luego permitió su entrada al cuarto

al entrar al cuarto, Rita notó una mesa grande con modelos de lodo y arcilla sobre esta, muchos papeles tirados sobre el suelo y un hombre dormido sobre una silla al lado de la mesa, cerca a una ventana cubierta de sabanas.

 

“Eh jack, a despertar que ya es de día” dijo Rita arrojando un pedazo de arcilla sobre él hombre.

“Carajo rita, ¿no puedes ser más considerada? llevo sin dormir ya tres días”

“¿crees que los no muertos seran considerados contigo solo por un poco de sueño faltante?”

“¿cuantos wyvernos quedan?” preguntó Jack, casi como ignorando la pregunta que se le había hecho.

“El informe de hace 1 campanada mencionaba que aun quedan 150 wyvernos en el cielo, han muerto 20 y suponemos que fueron 60 heridos que retrocedieron, por fortuna llegaron unos 40 más de las cercanias por lo que aun siguen atacando todo lo que vean en el suelo”

“entonces tendremos otros dos o tres días más, creo que me merezco un poco de sueño ¿no?”

“pero ¿cómo puedes estar tan seguro de ello?”

“los wyvernos son extremadamente vengativos cuando se trata de sus crias, no tanto como para sacrificarse todos en el proceso pero si lucharan contra aquel o aquello que destruya sus huevos hasta que sus vidas corran peligro, por eso las ordenes eran tan especificas”

 

En efecto, las ordenes que había dado Jack era retroceder hasta el fuerte y esconderse todos bajo tierra tan pronto como se ocacionara el deslizamiento de tierra, muchos creian que iban a morir con el derrumbe, pero sus dudas fueron despejadas cuando vieron los wyvernos caer en picada y atacar a los no muertos que habian a su paso.

 

“¿entonces nos quedaremos bajo tierra hasta que los wyvernos limpien la zona por nosotros? ¿por qué no haber hecho eso desde el principio?”

“¿qué? ¿estàs tonta o la falta de sol te está haciendo daño?”

“la falta de sol me está haciendo daño, me pareció oir que me insultaste pero no creo que cometieras un error como ese despues de lo de alberto” 

“Perdon, mi error , creo que es a mi a quien hace daño la falta de sueño”

“y bien ¿por qué no usamos los wyvernos desde el principio?”

“porque los wyvernos no van a durar”

“¿qué?”

“los wyvernos son tan fuertes como para partir a un devorador en dos como si fuese un carnicero cortando a un pollo cualquiera, eso lo saben todos, pero enfrenta a un carnicero a mil pollos y eventualmente el cansancio y el desgaste lo venceran… eso mismo pasará con los wyvernos, hay suficientes no muertos como para que los wyvernos se vean derrotados en un par de días, pero ese par de días son todo lo que nosotros necesitamos para reponernos y resistir una ultima vez”

“¿ultima vez?”

“si… o recibimos los refuerzos a lo maximo en un día desde que empezemos a luchar o moriremos todos enfrentando las miles de filas de no muertos”

“no crei que tu de todos los presentes pudiera dar un pronostico tan pesimista”

“estoy siendo lo más optimista posible, de no haberme reventado planeando una estrategia habriamos muerto todos para el amanecer del segundo día de lucha”

“eres la voz de la esperanza jack”

“definitivamente… aunque hablando de esperanza ¿cómo le va a nuestro rayo de sol?”

“¿Lanuel? está bien, lleva todo el día reuniendo cartas de todos los soldados para mandarselas a sus familias, resultó que tenia un perro escondido en el barracon y que lo usará para mandar las cartas tan pronto como los wyvernos retrocedan”

“¿escondió un perro en el barracon? ¿cómo? los ladridos, la comida o las heces debieron haberse notado desde el primer día”

“eso mismo me pregunto yo, pero al parecer es muy buena en lograr lo que quiere”

“¿y lo viste?”

“si, es un perro bastante grande, un poco más y podria cabalgarlo un niño, me pregunto cómo pudo esconderlo… en fin,, estoy segura que correria más rápido de lo que un wyverno puede volar… pero prefiero su idea de soltarlo cuando los wyvernos se retiren”

“la verdad que si, es una idea muy buena y mientras el perro este aqui motivará a las tropas”

“es un buen perro, pero necesitamos más que eso para motivarlos”



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En el texto hay: zombis, dioses, guerra

Editado: 11.08.2024

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