¿cómo, soy tan rico?

Capítulo 69 - Futuro

“Muy bien, Sr. Crawford. ¡Nos encargaremos de hacer los arreglos para llevarlo a su casa en un coche ahora mismo!”.

 

La gerente femenina rápidamente habló de manera respetuosa. Poco tiempo después, apareció un BMW Serie 7 que valía al menos ciento cincuenta mil dólares, y espero por Gerald afuera.

 

Víctor y el resto de ellos estaban estupefactos en ese momento. Al principio habían pensado que Gerald ya se había gastado los treinta mil dólares que había ganado en la lotería.

 

Inesperadamente, Gerald no ganó solo treinta mil dólares.

 

Había ganado mucho más que eso. Al mismo tiempo, todo el mundo podía darse cuenta que Gerald no le importaban mucho los setenta y cinco mil dólares en lo absoluto.

 

En otras palabras, las ganancias de Gerald fueron probablemente mucho más de lo que cualquier persona común podría imaginar.

 

“Mila, ¿quieres volver conmigo?”.

 

Tan pronto como Gerald se subió al auto, bajó la ventanilla del coche antes de sonreírle a Mila.

 

Para ser honesto, Gerald siempre había tenido un buen presentimiento acerca de Mila, quien no solo era extremadamente hermosa sino también de muy buen corazón.

 

Podría ser un poco inexacto decir que era muy bondadosa. Sin embargo, por lo menos, Mila no era como Xavia y Whitney, que solo amaban a los ricos y eran muy groseras y rudas con los pobres.

 

“¡Está bien!”, Mila sonrió antes de entrar al coche.

 

El rostro de Whitney se puso pálido de inmediato. El BMW Serie 7 era un coche totalmente importado.

 

También tenía mucha curiosidad y quería sentarse en el coche de lujo totalmente importado que valía ciento cincuenta mil dólares.

 

Sin embargo, Gerald ya le había dado instrucciones al conductor para que ni siquiera le diera una sola mirada en su dirección. En ese momento, el rostro de Víctor ya estaba verde de envidia y odio. Mientras tanto, Gerald y Mila regresaron a la universidad.

 

“Gerald, ¿puedes decirme cuánto dinero ganaste en la lotería?”.

 

Como Gerald y Mila estaban sentados en la parte trasera del auto, Mila no pudo evitar preguntarle a Gerald con mucha curiosidad.

 

“Para ser honesto, hay un ligero malentendido aquí. No gané dinero en la lotería. ¡Simplemente inventé esa razón!”. Aunque Gerald no quería revelarle todo a Mila, tampoco quería mentirle.

 

“Entonces, ¿qué está pasando aquí exactamente?”.

 

Mila sintió que Gerald se estaba volviendo cada vez más misterioso entre más tiempo pasaba.

 

“¡Te contaré más sobre esto en el futuro! Solo espera a que llegue el momento. Después de todo, no seremos amigos por solo dos o tres días, ¿verdad?”.

 

“¡Por supuesto que no!”, Mila también se dio cuenta de que Gerald no estaba tan interesado en revelar sus secretos.

 

Esto también era algo bueno. Después de todo, si Gerald le revelaba todo de inmediato, ya no quedaría ningún sentido de misterio. Era mucho mejor así.

 

Gerald ordenó al conductor que llevara a Mila de regreso al dormitorio de las chicas. Después de eso, salió del coche antes de decirle al conductor que regresara.

 

Luego, comenzó a caminar de regreso a su dormitorio solo.

 

“¡Gerald!”.

 

De repente, una chica saltó frente a Gerald y este se sorprendió por su repentina aparición.

 

Cuando Gerald levantó la cabeza para mirar la figura frente a ella, se dio cuenta de que era Quinn.

 

“¿Cómo volviste tan pronto?”.

 

Gerald estaba bastante sorprendido. En su opinión, Quinn no era diferente de Whitney en lo absoluto. Ambas eran igualmente despreciables y odiaban a los más pobres, y solo se enamoraban de los chicos ricos y adinerados.

 

Aparte de estos factores, Gerald también había escuchado muchas historias sobre Quinn en el pasado.

 

Era una chica muy hermosa con grandes pechos, piernas largas y delgadas y una cara muy hermosa. Ella era el tipo de chica que se veía muy sexy y atractiva.




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