Prologo

En la vida hay cosas que no entendemos, al igual que en el mundo, creemos que los monstruos de los cuentos son eso, la imaginación de un autor, siempre les tratamos de buscar explicación, si no la tiene es un truco, y si no la encontramos no existe, o  no pasa, y sin embargo, aunque no todos vivimos algo que no entendemos y no le encontramos una respuesta lógica hay algunos que sí, pero los humanos estamos tan ensimismados en nosotros que siempre buscamos tener el control de todo, ya que si está controlado nos pertenece y por lo tanto no puede dañarnos, la verdad detrás de esta acción es que le tememos a lo desconocido nos aferramos tanto a nuestra rutinaria vida que tememos que algo interfiera en nuestro vano intento de ser normales en esta sociedad donde, si no lo somos buscan destruirnos, nos aferramos a lo aprendido desde pequeños, de que no hay monstruos bajo la cama o en el closet,  de que no existen los fantasmas. Amor, esa palabra tan sencilla pero en realidad tan compleja, ya que los humanos podemos amar a muchas personas de diferentes maneras, y a veces incluso cometemos locuras por ese peculiar sentimiento que puede despertar en nosotros todas y cada una de las emociones, pero diez veces más fuertes, y hasta las podemos sentir todas juntas, creando un torbellino de emociones en nuestra mente y haciéndonos perder el juicio, creando confusión y obligándonos a actuar de manera alocada, y equivocarnos, o incluso nos dan ese poco de valentía que requeríamos para enfrentar una situación, y aunque nos equivoquemos la vida en si se trata de aprender; cada equivocación conlleva una lección, y a veces aunque estemos preparados para ciertas situaciones que nos alcanzarán, en sí, nunca estaremos preparados hasta que las vivimos, porque tenemos una idea fija, porque nadie nos cría sabiendo lo que nos va a pasar, y nos enseñan que la ficción se queda en donde está, que no sobrepasa los límites de la televisión o los libros, y aunque yo me creía preparada, aunque me había jurado silenciosamente que no me tomarían de sorpresa si las cosas no eran como yo imaginaba, eso pasó, y las emociones me embargaron incluso antes de poder descubrir por qué…
¿Por qué no podía dejar de pensar en él? 
¿Por qué existía esa atracción tan fuerte hacia su persona que me volvía literalmente boba?
¿Por qué mi mente y mi cuerpo reaccionaban a su presencia? y es que, es imposible que alguien te atraiga a tal punto de desearlo cerca solo por un segundo y ser feliz, el amor a primera vista no existe, es algo que se construye con el tiempo, con los actos, es un sentimiento que debe ir madurando, no algo que solo aparece por arte de magia, es algo que deseamos que pase, que en cierta forma manejamos si nos conocemos al saber que queremos o buscamos en una persona, entonces lo que existe a primera vista es la atracción.
¿Por qué mi mente gritaba incoherencias al decir que lo quería? 
¿Por qué mi corazón se agitaba latiendo a mil por hora cuando estaba cerca? 
¿Por qué mi cuerpo inconscientemente subía su temperatura a tal punto que ni siquiera el más crudo invierno podía hacerme sentir frío?
¿Por qué me embargaba ese fuego que me recorría, ese calor incontrolable incluso cuando no tenía consciencia de su cercanía?