Arrastre mis pies fuera de la escuela. Saque mi celular para ver la hora cuando un brazo se pasó por mis hombros.
-¡Hey, Alyson! ¿Quieres que te llevemos? -Pregunto Eddie
-Yo. . Hmm. .
-Vamos, Alyson. Sera divertido -dijo Wendy -solo tú, Dylan, Eddie y yo.
No sé si debería estar nerviosa o súper asustada. ¿Quién es apto para manejar?
-¿Quién va a manejar? -Pregunte
-Presente -Eddie levanto su brazo
Wendy cruzo sus dedos: -por favor, por favor. .
Mire un momento mi celular y dude. "A veces, hay que correr los riesgos más estúpidos, Alyson".
Sé que en algún momento me arrepentiré de mi decisión.
-primero debo llamar a mi padre y decírselo.
-Está bien -dijo Eddie al mismo tiempo que Wendy gritaba: -¡sí!
Marque el número de papa y observe como Dylan subía a la parte trasera de una camioneta roja, seguido de Eddie como piloto y Wendy de copiloto.
Papa contesto a los dos timbrazos.
-¿Alyson?
-Hola, papi. Escucha, yo. . Hice unos amigos. .
-¡Fabuloso! -me interrumpió. Se oía increíblemente feliz
-Gracias. Ellos. . Son grandes chicos. Se estaban preguntando si dejarías que ellos me llevaran a casa.
Hubo un momento de silencio.
-¿ellos también tienen enfermedades? -Dudo
-Si -dije. Y antes de que volviera a hablar, añadí: -pero quien va a conducir está en perfectas condiciones para hacerlo.
-¿estas segura?
-Totalmente.
Dio un suspiro.
-De acuerdo, Alyson -no sonaba del todo satisfecho
-Gracias. Bueno, debo colgar. Nos veremos en un rato. Te quiero.
-También te quiero. Tu madre hizo tu comida favorita. Date prisa, hija.
Cuando colgué, camine a la camioneta y me subí al único lugar disponible: junto a Dylan. Él no me miraba. Apoyo la cabeza en la ventana y cerró los ojos.
Eddie comenzó a manejar. . Y no lo hacía mal. Me sentí segura de inmediato. Sobre todo ahora que estoy muy atada al cinturón de seguridad. Tal vez estoy subestimando a estos chicos. Deben ser mejor de lo que creo.
-Tranquila -murmuro Wendy, dándose la vuelta en su asiento -Eddie tiene todo bajo control. Yo no lo molesto y Dylan definitivamente tampoco lo hace -lo miro -él duerme todo el camino. . O al menos lo intenta. ¿No es así, Dylan?
-Dormiría si cerraras tu boca, Wendy
-Amigo, más respeto para mi chica -Eddie lo miro por el retrovisor -no querrás volver a tu casa caminando, ¿o sí?
Dylan no contesto. Wendy le saco la lengua y volvió a su posición normal.
En algún momento del viaje, Eddie estiro su brazo y entrelazo sus dedos con los de Wendy. Ellos no se miraron, solo se tomaron de la mano y eso me basto para darme cuenta que ellos están muy enamorados.
No sé porque, pero el verlos así hizo que quisiera dibujar su cariño.
Abrí mi bolsa y saque mi libreta de dibujo y un lápiz. Puse mi bolso en mis piernas como apoyo para la libreta y comencé a crear trazos delgados y débiles en una hoja limpia.
Como el auto no avanzaba muy rápido se me hacía bastante fácil crear líneas nuevas.
Dibuje, borre. Dibuje y volví a borrar. Hice pequeñas sombras oscuras y las estire con las yemas de mis dedos.
Luego de unos minutos, finalmente termine mi obra. La admire.
En el centro de la hoja, a puro lápiz, se encontraban dos manos estrechamente unidas. Un trabajo simple y hermoso. En la esquina de abajo de la hoja firme mi nombre.
Cuando levante la vista atrape a Dylan observando mi dibujo. ¿cuánto tiempo lleva viéndolo?
Cerré la libreta de golpe, la metí en mi bolsa y la abrace a mi pecho haciendo el patético esfuerzo de que nadie, ni siquiera él, pudiera ver cualquier línea que yo he creado.
Dylan me miro a los ojos durante tanto tiempo que creí que se había trabado en un ataque.
Iba a preguntarle si se encontraba bien, cuando parpadeo y giro su cabeza para mirar por la ventana.
"Está bien. . "
Hice lo mismo.
***
Tan pronto como el auto se estaciono fuera de mi casa, mama salió corriendo por la puerta principal. Llevaba un delantal y el cabello recogido en una coleta alta.
Mientras que mi madre tiene el cabello café y ojos verdes, yo lo tengo rojizo y con ojos cafés. Sigo sin entender porque la gente dice. .
-¿es tu madre? -pregunto Wendy -es igualita a ti
. . Eso.
Me baje del auto y les di una sonrisa.
-muchas gracias, chicos
-podemos traerte todos los días. Claro, si tú quieres
-También llevarte -murmuro Eddie
Mi madre los miro. Yo la mire a ella. Ella se encogió de hombros con una sonrisa.
-De acuerdo -dije
-muy bien -Wendy se despidió con la mano -nos veremos luego
El auto avanzo hasta desaparecer de mi vista.
Entre a mi casa con mi madre pisándome los talones.
-Lindos chicos -dijo ella
-Si -suspire y me senté en un sillón
-¿ese era Dylan? -Se sentó junto a mí
-Si. Va en mi salón
-me alegro. Tal vez ustedes se unan más.
-Hmm.
Ella chasqueo la lengua.
-¿Y cómo es la escuela?
-Linda. Me gusta.
-¿Te tratan bien?
-Sí.
-¿Tuviste algún problema?
-Nop.
-¿Hay chicos lindos? -sonrió con picardía
-¡mama! -gemí -sabes que no me gusta hablar de chicos
-Lo siento. Es solo. . Es tu edad. Haz crecido y de repente ya no puedo hablar de osos ni muñecas. Siempre serás mi bebe, Alyson. Pero empiezan a gustarte otras cosas -toco mi rodilla
-Lo sé, mama. Pero así es cómo funciona la vida
-lo entiendo -dio un suspiro de derrota
-Pero ¡oye! -Sonreí -siempre podemos hablar de dibujos
***
Estaba en mi laptop cuando me llego una solicitud de Wendy Fleming. La imagen de perfil era el rostro de ella y Eddie sonriéndole a la cámara.
Tan pronto como la acepte, Wendy comenzó a hablar conmigo.
Wendy: ¿puedo verlo?
Alyson: ¿qué? ¿Cómo me encontraste?
Wendy: solo puse tu nombre y apellido. ¿Entonces puedo verlo?
Alyson: ¿qué cosa?
Wendy: el dibujo. No te hagas. Dylan dijo que dibujaste nuestras manos juntas. Déjame verlo :(
Alyson: no hice tal cosa.
A excepción de mis padres y Jamie, nadie nunca ha visto mis dibujos. No me gusta que la gente los vea.
Wendy: ¡mientes!
Alyson: por supuesto que no.
Wendy: júralo por mi perro.
Alyson: lo juro
Wendy: acabas de matar a mi perro. ¿Cómo pudiste?
Alyson: perdón. Pero puedes comprarte otro
Wendy: descuida. No existe tal perro. . Pero ¡hey! Significa que si hiciste el dibujo.
Alyson: no voy a mostrártelo, Wendy
Wendy: ¿y a Eddie?
Alyson: tampoco.
Wendy: bien. Me conformo con las buenas palabras de Dylan.
Alyson: ¿qué buenas palabras?
Wendy: dijo que era un grandioso dibujo. Que jamás había conocido a una persona con tanto talento.
¿De verdad dijo eso?
Alyson: son solo manos, Wendy
Wendy: no son solo manos Alyson. Son las manos de dos personas enamoras. Y todos saben que las manos de enamorados son únicas. Lo sabrías si estuvieras enamorada.
Alyson: bueno, Wendy. Eso es lo más lindo que alguna vez he escuchado.
Wendy: o leído
Alyson: tal vez, algún día, cuando yo este enamorada, puede que te enseñe ese dibujo.
Wendy: no debe faltar mucho, Alyson.