Capítulo 5

Las cuatro transformaciones del agua, son:...

Una notificación.

Blair miró su teléfono sobre la mesa y el maestro la hizo callar. Ella bajo el volumen de su aparato y volviendo a la pregunta del examen, intento concentrarse, más al parecer su teléfono tenía planes diferentes.

Repetidas veces zumbo sobre su mesa, saltando y llamando de nuevo la atención.

-Señorita Adams, le voy a pedir que apague su celular o me veré en la molesta necesidad de confiscarlo.

Blair asintió apenada e intento apagarlo, sin embargo su celular llevaba tantas notificaciones que en el intento de tocarlo, se le congelo la pantalla.

-Señorita Adams? - El maestro insistió.

-Si, ya se. Perdón. - Ella lo metió a la mochila, colocándole todos los libros y su suéter encima, con la esperanza de que no provocara más ruido.

El zumbido disminuyo, no lo suficiente como para que ella lo dejara de oír, pero si para que todos pudieran continuar con su examen en paz.

Pasados unos minutos después, dio por finalizado su estresante papel (sin prestar mucha atención a las respuestas, claro esta) y salió de ahí. Se coloco en el pasillo, sentada en una de las esquinas y volvió a buscar su aparato.

-Que demonios te pasa?- Le pregunto como si aquel rectángulo gris le pudiera responder.

Miró la pantalla trabarse y actualizar las ventanas emergentes. Cien...luego doscientas. Luego trescientas!

Blair intento leer antes de que se le pudiera congelar de nuevo la pantalla y casi se le cae el aparato de las manos. Solicitudes de amistad, mensajes y seguidores aumentando, habían por todas sus redes sociales. En instagram, Facebook, Twitter, etc.

Ella frunció el ceño, no era costumbre que ganara tantos seguidores en tan solo unas horas. Por lo que en pequeños lapsos en donde su teléfono dejaba de tener ataques epilépticos, entró en la primera aplicación que su dedo pudo teclear.

La mayoría de sus cuentas eran privadas por lo que incluido los mensajes, le saltaban como "Solicitud de mensaje" dando como opción Bloquear a la persona desconocida o seguirle la platica.

Había muchísimos mensajes, los cuales seguían creciendo conforme le llegaban las notificaciones. Sus datos iban a agotarse seguro por tanto ajetreo por lo que pensó en apagarlo, sin embargo si lo hacía, la cosa se pondría peor después.

El timbre sonó y ella se levantó con todas sus cosas metidas en la mochila hechas bola. Tomo su teléfono y más preocupada en el que en el camino, se dirigió a su siguiente clase.

Una vez llegó a su destino, visualizo a su rubia amiga ya sentada en la mesa.

-Eh, tengo una duda. Puedes ver los comentarios de la última publicación de mi supuesto noviazgo?

Palmer le miró con el ceño fruncido y al notar el zumbido volvió a extrañarse - Te llaman, creo...

-Mi teléfono tiene epilepsia, puedes hacer lo que te pedí?

La rubia asintió, entregándole su teléfono a Blair. Esta última se adentro en los comentarios del video en donde Cameron y ella golpeaban al chico y encontró lo que sospechaba.

- Maldición. - Blair se paso una mano por el cabello - Alguien pasó mis cuentas por los comentarios y ahora todos esperan que les conteste y los agregue.

-Te quejas por nuevos seguidores?

-No los conozco.

-Mmm ya. -Palmer no pudo evitar su cinismo - Pero si agragaste a desconocidos que pertenecen al mismo fandub que tú?

Blair la miro mal - Es distinto, con ellos por lo menos tengo algo en común! Estos solo quieren ver que tipo de persona soy.

-Como sabes?

Ella rodó los ojos -Por qué una persona normal no me mandaría un mensaje diciendo "Eres muy poco para Cameron, ya déjalo en paz "- Palmer torció el gesto - Y tengo más, incluidas amenazas.

-Mientras los ignores, yo creo que esta bien, no?

Blair dejo el teléfono sobre la mesa de trabajo y este se movía mientras vibraba - Claro. Voy a poder ignorar eso todo el día.

Palmer levantó los hombros y fue entonces que Blair la noto extraña. No parecía estar atenta exactamente a la conversación, se mantenía callada y eso de por sí ya era raro en cualquiera de las dos.

-Ya esta, mi teléfono va a esperar. - Blair se sentó a su lado - Qué pasa?

- De qué? - La rubia jugueteo con su teléfono, girandolo sobre la mesa vacía.

-Estas rara. Te paso algo.

-Nop...

Blair le tomó el brazo - Sabes lo mala que eres mintiendo?

Palmer hizo una mueca - Es que no paso nada en realidad. Solo estoy pensando...

-Sobre qué?

-Marco...

A Blair se le subió la sangre al cerebro. No podía creerlo, en definitiva tenía que estar delirando.
Palmer se encontraba pensando en Marco y la conocía lo suficientemente bien para saber exactamente la razon...

-Si te gusta.

-Blair no quiero un escándalo. -Palmer hizo que bajara la voz. - Sólo que... es diferente y lindo en realidad...

-No puede ser... - Blair la tomó de los hombros - Estas loca.

- Por esa razón no quería decírtelo...-La miro apenada - No se que pasa, me trata diferente, me ve diferente...

-No me digas que piensas en lo que creo que piensas...

- Quisiera no pensarlo, pero ya van tres ocasiones en donde casi nos besamos y yo... - Palmer se agito la melena - Agh...no lo se.

Blair no aclaro que tenia justo en ese momento la obligación de golpearla con lo que fuera, pues ella se encontraba en una situación parecida. Ambas cayendo en un pozo que tal vez no tenía fondo, jugando con fuego después de ya haberse quemado lo bastante (hablando más por Blair en realidad) y llamando a los cuatro vientos a aquellos problemas con forma de chico sexy.

-No se que suceda más adelante. - Añadió Palmer para después mirar que la siguiente maestra cruzaba la puerta - Solo se que me gusta y me aterra...

Blair pensaba lo mismo, aunque en realidad no era solo temor...si no un pánico irremediable.