Dulce Tormento

Aclaraciones

A los días todos regresaron al Reino Wesley, los equipos recibieron la recompensa y fueron recibidos con honores en el Reino. Como de costumbre les dieron unos días de descanso por su arduo trabajo. Con la recompensa el equipo decidió pasar sus días juntos en casa de Lee, la Capitana no se negó pero le parecía incómodo el estar tan cerca de Mila después de lo sucedido.

Nina los recibió con los brazos abiertos e Iris estaba feliz por tener a su hermano cerca. Debido a la ausencia de Hina, la casa estaba sola, tres hombres y dos mujeres bajo el mismo techo. Por suerte la casa era espaciosa, debido al puesto de Lee, durante el tiempo que vivió su madre, mejoró su hogar para hacerla feliz aunque a ella lo único que le importaba era tener a su pequeña cerca. La casa tenía dos habitaciones amplias, en una habitación estarían los chicos y en la otra las chicas, la incomodidad iba a ser mayor.

Esa noche todos compraron alcohol y jugaron unas partidas de poker para pasar el tiempo, hacia mucho que no se embriagaban que el alcohol fue punto débil de Hank y Colly. Ted no se excedía por la presencia de su hermana, Jock no acostumbraba beber pero estaba disfrutando la compañía. Lee salió a fumar un cigarrillo a la azotea y Jock le hizo compañía.

- Hace mucho que no estábamos juntos en un descanso.-Dice Jock exhalando el humo.

- Los chicos realmente están disfrutando de la compañía, esta casa no había tenido alegría desde hace tiempo.

- Tu madre estaría orgullosa de los lazos que formaste.

- Lo esta.-Mira al cielo estrellado deseando que su madre la viese.

- Te ves algo distraída últimamente ¿sucedió algo?

- Realmente nada se te escapa Jock, me conoces a la perfección.

- Crecí conociendo cada parte de ti, no tienes que ocultar tus emociones conmigo.-Jock mira al cielo esperando que Lee le contase.-Parece que llevas aguantando tanto, lo demostraste con el General, tu no acostumbras armar rumores de ese tamaño.

- Es cierto, me desquité con él por un error que cometí.

- ¿Error? Tan grave es la situación que te a hecho cambiar tanto. Hace un momento estabas tan distante con los chicos que todos se preocuparon.

- No te puedo mentir, esta vez estoy tan confundida que estoy llegando a sentir cosas que no creí capaz de experimentar.

- Tu noche con la Teniente Mila llegó muy lejos al parecer.-Lee se sorprendió tanto que casi se quema la ropa con él cigarrillo.

- ¿Tu lo sabias?

- Idiota, siempre estoy vigilando. Las observé esa noche, estaba buscándote y te encontré con Mila en el parque. Noté que casi la besas.-Lee se sonrojo al recordar lo que pasó después.-Parece que tuvieron algo en su habitación.

- No, no, te equivocas. Solo fue un beso, nada más.

- Parece que tu querías algo más.

- Claro que no, jamás lo haría, es una chica tan dulce que no seria capaz de lastimarla estando inconsciente.

- La verdad es que no me importa mucho que hagas en tu vida privada, pero no cometas la idiotez de enamorarte de una humana. Son de mundos muy diferentes, jamas detendras ese reloj de vida que cada humano lleva.

- Lo se, es por eso que no quiero estar más junto a ella. No quiero condenarla al estar conmigo. Una humana no puede estar con alguien como yo, debe casarse y formar una familia con alguien de su especie.-Lee tenía que resignarse, no podía detener su vida por un capricho que había sucedido en su encierro. Posiblemente ella debería regresar a su hogar y casarse con alguien que amara, un humano como ella. Alguien que en envejeceria a su lado y le daría la oportunidad se formar a su próxima generación.

Jock y Lee charlaron un poco más y después bajaron para saber el estado en que estaban los chicos, Colly estaba abrazando una de las fotos de Lee mientras lloraba, Hank estaba como chicle pegado a Ted y no lo soltaba. Lee rió al ver el aspecto de todos. Mila había tomado un par de vasos de cerveza y estaba sentada quedándose dormida. Los tres sanos ayudaron a ponerlos a dormir a todos. Lee limpió la sala y se fue a dormir.

En la habitación de las chicas había dos camas y un sillón, al ser los invitados de Lee ella prefirió dormir en él, pero Mila estaba molesta por alguna razón. Iris estaba ya dormida en una de las camas. Lee intentó acostar a Mila pero esta no quería.

- Mila por favor intenta dormir.

- No, no quiero.

- ¿Porqué estás tan molesta?

- Porque tu no me quieres, no quieres que sea parte de tu vida. Solo por ser humana.

- ¿Por ser humana? En donde escuchaste eso.

- En la azotea, tu lo dijiste.-Dice haciendo pucheros.

- Vamos Mila, no debiste escuchar esa platica. Mañana hablamos pero en este momento duerme.

- ¡No quiero!-El alcohol le afectó tanto que comenzó a llorar.-Tu, tu-hip no me abandones, no quiero que me olvides y termines casandote con alguien más.-Esas palabras tocaron el corazón de Lee, estaba ocasionando daño a alguien que quería, tenía que calmarla o posiblemente jamás pararía de llorar.

Mila siguió llorando y tallando sus ojos con las manos, Lee tomó ambas manos y le plantó un beso para calmarla. Mila miró los ojos de Lee, jamás había estado tan cerca de ellos, o por lo menos eso pensaba. Una mirada tan hermosa que solo la observaba a ella en ese momento, derramó sus últimas lágrimas dejándose llevar, Lee separó sus labios con una gran sonrisa.




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