El alfa del norte

Familia completa

Familia completa.

Darío a cierta distancia ve el entrenamiento de los nuevos integrantes incluyendo a Emilia que ya lleva varios costalazos, desvía la mirada donde están los más avanzados en ese grupo se encuentra Jonathan, por alguna extraña razón Darío no deja de vigilar a esos dos.

_- Su celular suena sin ver a tiende la llamada- _ ¡Elián! Si, si ajá, si me imagine que estas con Alf.

_Haz los arreglos, llegamos pasado mañana justo para navidad, prepara a Emilia.

_Claro que sí. Elián ¿cómo que ella es lupa? ¿cómo paso?

_Llegando hablamos, te adelanto que fue mi ex tío Ulises.

_¿Mi general?

_El mismo. Llegando allá hablamos, por favor prepara a la niña.

_Si señor- finaliza la llamada- _ A mí no me engañan Emilia y Jonathan ya se unieron. ¡Rayos! ¿qué le voy a decir a mi hermano? No cuide bien de su hija.

Emilia sale disparada por los aires por vigésima vez esa última caída la hacen quedarse en su lugar quejándose de dolor, se está revolcado del dolor cuando siente como es levantada de un jalón, siente que las piernas no la soportan, pero es sostenida por Darío.

_Se que no eres débil así que sostente bien y camina conmigo debemos hablar en privado sin tu sombra llamada Jonathan – la jala del cuello-

_¡Oye! ¡Suélteme!

_No hasta que me digas la verdad.

_¿Qué verdad? - forcejeando con él-

_¡La verdad! ¿Eres o no eres mujer de Jonathan?

_Eso quiero, pero él no quiere.

_¿He?

_Ya suélteme. Él me dijo que hasta que nos casemos en su lugar me regalo ropa de él para que me calme.

_¿Por qué te debe calmar su aroma?

_¡Tío! No le voy a decir.

_Elián llega en dos días o me dices a mi o le dices a él.

_ ¡Jum! Le dije a Jonathan que me dan cosquillas en mis partes íntimas y solo se me quitan cuando pienso en él así que me da de su ropa, abrazo la ropa de Jon-Jon y mis manos se vuelven las de él y eso me calma ¡ya! ¿contento?

_- Cierra los ojos avergonzado- _ No quería tantos detalles.

_Pues usted que no me deja en paz. Jon-Jon no me ha hecho nada cuando mucho nos besamos y nos acariciamos, pero de ahí a tener sexo aun no, aunque de ganas no me quejo.

_Cállate Emilia y ve a bañarte. Y dile a tu sombra que venga necesito hablar con él.

El color rojo no se va del rostro de Darío de las palabras de Emilia, niega intentando olvidar las palabras, pero las palabras se vuelven imágenes cuando ve como Jonathan carga en brazos a Emilia y el beso que ella le planta en los labios.

_O les doy permiso a estos dos o lo van a hacer sin permiso y va a ser peor. Ella va a entrar en celo y ninguna cadena va a controlar a Jonathan – suspira derrotado- _¡Ultimadamente es bronca de Elián! Que él la cuidé, yo ya cumplí.

_ Emilia me dijo que necesitas hablar conmigo.

_Si – lo ve de arriba a abajo- _ Vas a explicar a Elián como, donde y cuando te marco Emilia. Secundina si está viva y es lupa, no se detalles de su cambio.

_Creo que es una buena noticia, la pareja del rey vive.

_No sabemos cómo va a reaccionar tu novia así que tal vez necesitemos de tú ayuda.

_Claro que sí cuanta con eso.

_Jonathan dime como te marco, cuando y donde.

_Cuando desaparecimos, la verdad si nos fuimos para tener relaciones ella lo pidió y lo también lo quería (y lo sigo queriendo) así que nos fuimos de la ciudad.

_Le vas a decir lo mismo a mi hermano.

_Le dije que tenía que ser íntimo y privado y eso fue, me dijo cosas de su madre y de ella que no te voy a decir, le dije de mi familia, y antes de que empieces si, la vi desnuda y ella a mí y no, no la toque, no pude.

_¿Por qué?

_Porque ella quiere un vestido de blanco en su boda y le di mi palabra de que así será. No quise que Elián o tú la juzgaran así que le hice la marca en la cadera donde nadie más que yo pueda ver la cicatriz.

_Ella se apegó tanto a ti que me han confundido. Agradezco que seas sensato y prudente. - palmea la espalda del americano- _ En dos días llega mi hermano y su mujer. Te agendaré una reunión con tu suegra.

_Si señor.

Dos días después las todas las hijas de Elián se van de comprar navideñas incluyendo Emilia, antes de que ellas regresaran llegan Elián y Secundina, son recibidas por Ciro y Darío, en la estancia Jonathan esperando su turno, la mexicana de un metro con setenta y cinco se para frente a Jonathan, este retira la texana negra.

_Jonathan Evans – extienda la mano-

_Secundina García Anguamea, tengo entendido que eres la pareja de mi hija.

_Si señora. - le ofrece el brazo- _ Cuando lo crea prudente quiero hablar con usted de mi relación con su hija.

_Jonathan mi hija aun no es suficientemente madura, te pido que no abuses de su inmadurez e inexperiencia, cuida de ella, debo confiar en ti ya que si todo marcha bien no voy a perder a una hija voy a ganar un hijo.

_Le doy mi palabra de cuidar bien a esa niña.

_Muy bien. Hablaremos después debo hablar con los tres hermanos, sobre todo con Darío.

Los tres Licaón se encierran en el despacho de Darío mal entran cuando la menor de los hermanos abofetea a Secundina, Elián se interponen cosa que no le importa al menor.

_No pienso pedir perdón por golpear a mi reina, es más me la debes, lloré mucho por tu muerte y Emilia aun llora por ti, mereces eso y más.

_Cuida tu lengua Darío.

_Elián, Darío tiene razón, casi te perdemos por culpa de ella y Emilia no deja de llorar. Un gusto soy Ciro – la saluda con recelo- _ No sé si darte la bienvenida a la familia.

_Me merezco las cachetadas, pero no pienso dejar a Elián nunca, entendí que es mi mundo. - abraza al menor- _ Perdóname amigo mío, no lo vuelvo a hacer.

_Más te vale. Las chicas fueron de compras, esperemos a que lleguen.

_Me gustaría hablar con el novio de mi hija.

_Bien hablemos con él.

_Necesito hablar con él a solas, no es por quitarte merito o autoridad Elián es que necesito hablar con él sin la presión del suegro. ¿Dónde puedo hablar con él sin que ustedes escuchen?




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