Los días pasaron volando.
Días en los que tanto Thiago como Nelly no dejaban de pensar en el otro.
No dejaban de pensar en lo mucho que dolía todo esto
En porque no pudieron haberse conocido antes de todo esto.
El hermano mayor de la castaña agarro su bolso para luego dirigirse a ambos jóvenes.
A Nelly la despidió con un beso en la cabeza y un fuerte abrazo.
Y Thiago con un beso y un te amo.
Este solo desvió la mirada mientras veía como su novio cruzaba la entrada del colegio y se subía al bus desapareciendo de la vista de ambos. Nelly sujeto con una de sus manos su bolso dispuesta a volver a su sala siendo interrumpida por el agarre de su amigo, quien la llevo casi rastras hacia la bodega del colegio. La castaña al estar ya en la bodega miro preocupada al chico el cual dejaba ver un gesto de desesperación y… ¿miedo?.
-Nelly, perdón, perdón por no haberte conocido antes, por salir con tu hermano… Por todo, pero pro favor, deja de pasarme de largo. No sabes cómo me duele que la chica que me trae vuelto loco se porte haci- dijo para luego agarrar el delicado rostro de la chica y secar las lágrimas que resbalaban por sus mejillas.
Los dos al verse a los ojos se rompían mutuamente el corazón.
Uno lloraba por el dolor que sentía a su corazón.
La otra por desesperación y confusión… Eran demasiadas emociones arremolinadas las que ambos jóvenes guardaban bajo llave, candado y cadenas en lo más profundo de su corazón… Ambos se miraron a los ojos mientras el más alto se acercaba a ella hasta finalmente unir labios con los de ella.
Uno se sentía en la gloria misma al besarla.
Pero ella… Ella sentía culpa.
¿Que era esto?.
¿No era que él era con quien sentiría esos fuegos artificiales y todas esas bobadas cursis?.
¿Por qué no sentía lo mismo que sintió esa vez que beso a Jordi?.
¿Por qué no sentía que… Que él fuese su media naranja?.
Bastaron unos minutos para que la castaña empuje al chico mientras los ojos de ella se llenaban de lágrimas si despegar su mirada del chico para luego salir de ahí corriendo mientras ambos rompían en lágrimas.
Quizá lo de ellos jamás fue amor…
Solo eran dos corazones rotos que se llamaba entre sí para intentar curarse, aunque sea un poco
Intentando sellar todas esas grietas que la vid les había dejado.
Intentando sanar ese dolor sin siquiera escuchar el verdadero llamado de sus corazones.
Corazones que anhelaban un camino diferente al que ellos habían emprendido.
El adolescente quedo con la mirada fija en la puerta mientras sus ojos desprendían lágrimas incontrolablemente.
Cristalinos vidrios rotos eran desprendidos de sus ojos.
Cristales cargados de dolor, cristales que le tajaban el corazón como si se lo estuvieran abriendo lentamente con una navaja oxidada.
¿Que era esta sensación tan horrenda que se apoderaba de todo su ser?
¿será así como ella se sintió cando se entero que era el novio de su hermano?
¿Por qué no había rechazado?
¿será que verdaderamente ya no lo amaba?
¿y si era porque ya había conseguido a alguien más que le dé lo que él no pudo darle?
Su cuerpo cedió ante todo quedando desplomado en el suelo mientras no dejaba de llorar, no entendía por qué lo hizo. Tenía novio, uno que lo amaba mucho, y se le ocurrió besar a la hermana de este.
Era un maldito desgraciado.
¿Tan poco hombre era como para hacerle eso a su novio?
¿y que consiguió con eso?
Lastimarse aún más a sí mismo.
Lastimar a la chica que tanto cariño le tenía
Engañar a su novio y hacerlo sentir la peor basura del mundo.
Lloraba por el dolor, por el arrepentimiento, por la culpa que sentía por todo lo que estaba haciendo
Y a todo esto, ¿por qué rayos lo hacía?
Fácil… Por idiota.
Se enamoro de alguien con quien no estaba destinado a ser y de paso engaño a quien le entregó todo su corazón.
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Al haber acabado las clases la castaña volvió en completo silencio y sola a su casa.
De tanto llorar se encontraba con los ojos completamente irritados, la nariz colorada y un dejo de mucho dolor.
¿Qué era ella para él?
¿acaso era solo un maldito juego?
!! Claro¡¡, ahora que no está el novio agárrate con la hermanita menor ¿no?
No dejaba de dolerle esto… Quizá tenía razón
Era que ella no estaba destinada a estar con él, quizá alguien más sea su par o le toque quedarse sola como y había dicho un inicio de todo esto… Abrió la puerta de su casa y entro mientras aguantaba las lágrimas que amenazan volver a desprenderse preocupando nuevamente a sus padres.
Esta vez ellos ya sabían que era lo que ocurría, por suerte su hermano se tomo el tiempo de explicárselo todo.
Pobre niña.
Era fácil imaginarse el dolor que ahora cruzaba, aunque jamás llegasen a entender todo ese dolor
Nunca llegarían a divisar el tamaño de esto sin haberlo vivido ellos mismos.
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Tras cerrar la puerta la adolescente se desplomo en el suelo dejando salir todas esas lágrimas que se llevaba aguantando.
¿Qué era ahora todo esto?