CAPITULO 26 TEMPORADA 3.

Un año después la adolescente se encontraba en los casilleros junto a uno de sus compañeros. 

Hoy como cada día desde que decidido ponerle fin al amor que tenía por el novio de su hermano ponía su mejor sonrisa. 

Bruno no dejaba de hablar de sus problemas cuando de golpe centra su atención en la adolescente, eta al levantar el brazo hacia su casillero dejaba ver múltiples cortadas en su muñeca. El pelirrojo agarro con fuerza el brazo de la chica mientras esta dejaba cae los libros que tenía en una mano al suelo, Bruno la miro enojado mientras incrementaba su fuerza en la muñeca de la chica y la arrastraba en busca de su hermano. 

            -¿Que pasa Nelly, porque te trae así tu amigo? - 

Pregunto con una sonrisa mientras agarraba de la mano a Thiago, sonrisa que se elimino al ver los cortes que decoraban cruelmente su pálida piel. Rápidamente soltó la mano de su novio mientras sus ojos se llenaban de lágrimas. 

¿Por que hacia algo así? 

¿Que le motivaba a dañar su piel de esa forma tan cruel? 

¿si tuvo un problema porque no el contó nada? 

El siempre estuvo para ella en cada problema, siempre la ayudo. 

Y ahora, ahora no era así, el dolor o problemas que la consumían la habían llegado a lastimar su piel y cerrarse a contarle algo. 

El pelirrojo soltó a la adolescente haciendo que esta caiga al suelo consumida en lágrimas mientras le imploraba perdona su hermano, de golpe Thiago agarro la muñeca de la chica para llevársela de ahí. 

Esto no era algo de lo que los demás se deban enterar, este problema empezó con ellos dos terminaría con los dos. 

Al llegar a unas de las salas ya vacías Thiago entro junto a Nelly cerrando la puerta tras ellos. Al voltear el cuerpo hacia la adolescente jalo del brazo de ella aproximándola para así unir sus labios con los de ella agarrando de sorpresa a la adolescente. 

No era el momento o el lugar. 

Y siendo directos, la situación no estaba PARA NADA a su favor. 

Uno de ellos estaba de pareja con alguien. 

Nada de esto estaba bien. 

Pero dios santo, que bien se sentía lo que estaba prohibido... 

Y es que eso era esto. 

Un amor prohibido. 

La adolescente cedió a los minutos mientras que el chico de cabellos crespo posaba sus manos en el cabello de la chica besándola con delicadeza. 

El no buscaba más que eso. 

Solo quería disfrutar el dulce sabor que tenía lo prohibido, gozar de algo que no se les era permitido a ninguno de los dos mientras se veían ligados algo limites de el socialmente moral.

Pero en ese momento toda esa moralidad ya la habían mandado bien a la mierda, solo querían disfrutar ese arcoíris de emociones y sabores que tenía estar con el otro.

No quería más que un beso... Pero no solo era un beso como cualquiera, era uno en el que le expresaba todo lo que su yo interior se había aguantado ese año y algunos meses que llevaban sin hablarse, 

Que llevaban sin verse. 

Ese tiempo en el que no le dieron todo de sí al otro. 

No existía alguna otra intención tras ese beso, no tenía la intención de llegar a algo más, solo quería volver a sentir sus labios. 

De volver a sentir ese glorioso deleite que era besar a su chica, volver a estar en su propio olimpo. 

Y si chicos, como escucharon, su chica. 

Ella era de el y el de ella, siempre fue así y lo seguirá siendo, aunque jamás lleguen a estar juntos. Ahora solo eran ellos, ellos y nadie más, ya luego verían cuáles serian las repercusiones que esto tendrán y encontrarían alguna forma de sobrellevarlas.

Después de unos minutos eternos en los que ambos adolescentes se encontraban en la gloria se separaron quedando ahora en un abrazo. 

Un lleno de amor. 

Ambos sonrieron mientras se tomaban de la mano y salía del aula. 

la que era ahora el único testigo de ese placer culposo que yacía en ambos adolescentes. 

Ambos caminaron por los pasillos para llegar junto a los otros dos chicos (claro se soltaron de la mano un poco antes de llegar para no levantar sospechas) ambos con una gran sonrisa ando a entender que todo se había solucionado. 

Claro... Ahora no había ningún problema. 

Y es que ¿que problema tendrían esos dos después de haberse comido a besos en la sala de Geometría? 

Cada uno se fue con su acompañante simulando lo ocurrido en la sala para luego irse por su lado cada uno. 

Ambos con un nuevo secreto que los acompañaría hasta la muerte.