ROMINA
La primera semana de clases estuvo increíble, estuve de fiesta y todo fue relajante; eso es lo que diría alguien con la realidad alterada, porque mi primera semana de clases estuvo de todo, menos tranquila. En primer lugar me humille tres veces y una fue antes de clase, luego me volví a humillar cuando dije una grosería durante una clase mientras el profesor explicaba algo, el salón estaba en silencio y a mi se me ocurre hablar porque me golpe mi codo en la mesa. Aparte ya tengo tareas, proyectos y cero ganas de hacerlos.
Hoy es viernes de ver series asiáticas en la noche, porque por supuesto, me encantan, podría estar todo el día, todos los días encerrada yo sola, con comida y kdramas y seria feliz, al diablo con la escuela, hoy no pienso pensar en eso, solo seremos mi laptop y yo.
—¡Romina! —maldita sea —Romi, mi vida, adivina qué.
Natalia entra en nuestra habitación con una felicidad digna de alguien que se gano la lotería, trae consigo una bolsa negra muy grande.
—¿Qué pasa? —le señalo la bolsa —por favor dime que no es un cadáver lo que esta ahí dentro.
Nat se sienta en mi cama, su sonrisa me recuerda al gato de Alicia en el país de las maravillas, no se lo pienso decir, ella ama que le digan eso. Con esa mirada y sonrisa, temo que si trae un cadáver.
—Una chica de una facultad estaba tirando cosas que su ex novio le regalo y entonces le pedí algunos y me los regalo, aunque lloro cuando me los estaba metiendo en la bolsa, pero ese no es el punto —explica —si no que entre esas cosas estaba esto.
De la bolsa sacó un libro, pero no cualquier libro, es una edición especial de Harry Potter y El Prisionero De Azkaban, dios pero esta increíble.
—Pero ¿quién tira algo así? Es precioso.
—Lo se, te lo puedes quedar si tanto te gusta, ves que vale la pena tener a una amiga tan asombrosa como yo —se señala con orgullo.
—Yo más bien diría que estas loca, pero igual funciona.
—Tal vez estoy loca, pero conseguí el chisme, al parecer su novio la engaño y fue con la prima ¿puedes creerlo? —esto si es un buen servicio.
—Espera, ¿con la prima de él o de ella?
—De ella, al parecer los encontró besándose en el cine, que escándalo —comienza a sacar más cosas de la bolsa —en fin, gracias mal hombre por regalarle cosas tan buenas que ahora son mías.
Natalia Andrews es una increíble y loca chica que sin duda es la mejor amiga que alguna vez puedas tener, es extremadamente divertida, si algún día necesitas esconder un cadáver, ella te ayudara o puede que ella sea quien este escondiendo el cadáver, pero sea cual sea la situación ella estará ahí para ti y por supuesto te conseguirá regalos porque ese es su lenguaje del amor.
En su bolsa trae varios peluches y algunos accesorios, pero lo que más le intereso fue una chaqueta y una gorra de Ferrari, ya que ella es fan de la Formula 1, también vi que tomo una tarjeta con la foto de Charles Leclerc, piloto de Ferrari —guapísimo — jamás le digan que es fan por moda si no la has visto gritarle a la televisión cuando hay carreras.
—Por cierto, hoy vi a ese chico guapo que conocimos por tu incidente en la cafetería —se ríe, sabe perfectamente que eso paso por culpa de ellos.
—¿Hablas de Logan?
—No, de Ethan, pero no me habías dicho que ese chico te parecía guapo—me mira, se que esta esperando una respuesta para burlarse de mi, la conozco perfectamente.
—Lo es, no estoy ciega, pero no es mi tipo —no miento, realmente es guapo, demasiado, pero no es alguien con el cual saldría, no lo conozco muy bien, pero he escuchado sobre él.
—Me alegra saber que no estas ciega, amor mío, pero yo no te pregunte si era o no tu tipo.
—Pero te conozco, sabía que harías un comentario sobre eso, no lo niegues.
Me sonríe divertida.
—Bueno querida Romi, lo que tu digas, ahora quítate de ahí y déjame ver un drama contigo —ella resopló y se tiro en la cama.
Ambas nos acomodamos y vimos la serie coreana de Doom at Your Service por quinta vez, hasta que nos quedamos dormidas.
***
Los sábados suelen ser mi día de hacer tareas para tener libre el domingo, por eso mismo después de desayunar un sándwich de jamón, un licuado de fresa y una porción de uvas, vine directo a la biblioteca de la universidad. No necesito libros para hacer la tarea, pero si un lugar donde pueda concentrarme y no tenga donde acostarme a dormir —que si lo tiene, pero lo ignoro—, me gusta venir sola para no tener distracciones; una vez vine con Cole, Natalia y otra chica llamada Laura y terminamos jugando al UNO, la bibliotecaria nos tuvo que callar porque Nat y Cole por poco y se terminan peleando en el piso.
La siguiente hora me la pase tratando de hacer los trabajos que me dejaron en funciones cerebrales básicas y sistema de clasificación de síndromes, realmente no es tan difícil, pero tantas lecturas me revuelven.
Entre más tiempo paso leyendo frente a mi laptop, más siento como mis ojos arden del cansancio y mi cabeza comienza a doler, trato de relajarme, pero el dolor no se va, siempre cargo con varias pastillas y cosas por el estilo en mi mochila, por lo que rebusqué y saque de mi bolso una pastillas para el dolor de cabeza y la tragué con ayuda del agua de mi botella.
Después de estar un par de horas trabajando, al fin termino mis deberes, reviso mi celular y veo que como siempre, Cole me ha mandado un mensaje:
Colesterol
Rom, hoy tengo entrenamiento en la mañana, agotador, lo se, pero luego iremos a comer algo, así que estas invitada, y si, también vendrá Natalia. Apúrate, nos veremos a la 1 en el estacionamiento del campo.
Yo♡
Siempre que salgo contigo pasa algo malo, no quiero.
Colesterol
No seas paranoica, no siempre te pasara algo malo, Romina, no caigas en el caminó del mal.
Yo♡
El caminó del mal eres tu.