El canto del IDOL

Soo Young

Hablamos durante muchas horas, los temas eran irrelevantes y hasta algunas anécdotas de mi trabajo salieron a flote. Podría llamarlo un pequeño desahogó porque a pesar de ser buenas y malas, ella me escuchó e intentó hacer todo lo posible para sacarme una sonrisa luego de cada vacío.

Bueno, al menos así lo sentí yo. 

Y con una conversación con tantos sentimientos de por medio ambos, nos agotamos y tengo noción de en qué momento me dormí junto a ella. Sin embargo,  hay algunas cosas que no puedo recordar y eso me extraña.

—¿Hyo-ri?

No tengo noción de haber ido a mi cama para dormir y mucho menos de haberme cubierto con una manta, que yo recuerde estábamos en el baño.

—¿Hyo-ri? —Llamo nuevamente, pero no obtengo ninguna respuesta.

Pensándolo más a fondo, la he llamado por su nombre.

"Es lindo tener un nombre al que responder" Esa fueron sus palabras luego de la historia del cangrejo.

Me río con solo recordar sus gestos mientras que me contaba su historia y en como expresaba su arrepentimiento al confundir el idioma.

"Es única" pienso con una sonrisa en mis labios.

—¿Estás despierta?

Volviendo a la narrativa, siento algo húmedo en la planta de mi pie una vez lo bajo de la cama. Por lo que basta con que dé una pequeña mirada para notar el rastro de agua que conduce al baño.

—No... Imposible.

Caminando hasta donde descansa, puedo verla completamente dormida con la cabeza apoyada en sus brazos. Tiene un poco enrojecido un antebrazo y también lo que alcanzo a divisar de su abdomen.

—Oh, Hyo-ri —No puedo imaginar el esfuerzo que tuvo que hacer —Te dejaré dormir un rato más.

Intentando ser lo más silencioso posible, me muevo con mucho sigilo para salir de mi dormitorio. Lo que estaría bien de no ser porque al acercarme a la ventana, veo a la manager frente de mi casa junto a una camioneta de la compañía.

—Aish.

Ciertamente ayer no fui a trabajar y olvidé por completo el hecho de encender mi celular.

Resumiendo todo: estoy en problemas.

 —¡Soo Young! 

Los gritos de Hye-Jin son lo suficientemente sonoros y para no hacerla enfadar, comienzo a vestirme a toda velocidad. La razón es que ella llega a dar mucho miedo cuando está molesta y nadie se salva de sus regaños y siendo mi representante me puede meter en problemas con la empresa.

—¿Soo Young?

Una suave voz se oye desde el eco del baño, es Hyo-ri. Al ir a ver como se encuentra, el sonido del claxon de la camioneta se hace notar.

—Tengo mucho que explicar, pero no tengo el tiempo —Digo apresurado —Debo de ir a trabajar, pero volveré para traerte algo de comer.

—No te preocupes por eso, ve tranquilo —Opina mientras observa la manera en que abrocho mis cordones.

—Volveré pronto.

—Suerte —Mientras se despide con su mano, me regala una sonrisa antes de que me pierda de vista debido a la velocidad a la que debo salir de casa.

Si puedo ser honesto, no es algo que pueda olvidar con tanta facilidad. Pues en lo que subo al vehículo y me encuentro de camino a la empresa con la manager regañando mi actuar, me siento en calma gracias a sus palabras y su sonrisa...

— Soo Young, te necesito más atento.

Pasadas pocas horas y ya en mi trabajo, todos estamos en la sala de baile practicando y coordinando cada movimiento para la coreografía de la canción a la que le sacaremos un video. No obstante, no todo me está saliendo bien y el coreógrafo llama mi atención para reprenderme por no haber girado al mismo tiempo que los demás.

—Lo siento mucho muchachos.

Haciendo una reverencia, pido disculpas e intento volver a la realidad de mi trabajo. Sabiendo que soy el líder de este grupo me debo esforzar el triple y también debo pensar en la forma en que me seré calificado a final del mes. 

Aquí no hay márgenes para errores habiendo tanto dinero de por medio, por lo tanto,  me concentro y me esfuerzo al máximo para que todo sea perfecto.

—Vamos Soo Young, muestra más soltura —Uno de mis compañeros bromea mientras que seguimos los pasos para la presentación que habrá dentro de poco. 

—Te debería decir lo mismo.

Si bien este un ambiente más relajado, no dejamos de esforzarnos para ser los mejores a la vez que nos divertimos y trabajamos en equipo para tener un buen trato entre todos.

Y con el correr de los minutos llega nuestro descanso, en el cual pido permiso para salir, pero Hye Jin me niega ese beneficio debido a mi ausencia de ayer. Me reclama mi falta de compromiso y de seriedad, dice que pareciera que no me importa mi trabajo como Idol. 

Entonces, me da dos opciones: Voy a casa y le avisa al jefe sobre mi comportamiento, o, puedo quedarme y comer junto a mis compañeros para mostrar que estoy comprometido con lo hago. Y, al estar entre la espada y la pared. Acepto la primera opción a regañadientes mientras que la imagen de Hyo-ri pasa por mi cabeza...

Durante toda la jornada y siendo que me la paso viendo el reloj pensando en que el tiempo jamás me había parecido algo tan eterno, mi preocupación aumenta. Pero al no querer que mi trabajo peligre, permanezco en mi lugar y me dedico a cumplir con mis obligaciones hasta que llega la  hora de salida.

—Muy bien, los llevaremos a casa para que vuelvan a salvo —Dice Hye Jin al poner su chaqueta en su antebrazo.

—¿Y si vamos a comer? 

Con tan solo escuchar la pregunta de mi amigo me siento frustrado. Tanto, que paso mi mano por mi rostro hasta alcanzar mi cabello.

—¿Soo Young? ¿Necesitas volver a casa antes? 

Las palabras de la manager son mi salvación, ya que basta con que diga "sí" para que ella me permita volver en una de las camionetas de la empresa. Por lo que pido disculpas antes de dejar el lugar e ir directamente al vehículo, en el cual saco mi celular para comenzar a pedir comida a domicilio...