Hola, mi nombre es Jeanette, tengo 17 años y llevo una vida promedio: asisto al instituto, tengo una mejor amiga llamada Brigitte y su hermano Orson me agrada bastante aunque por momentos actúa extraño y parece estar enamorado de mí.
Mi madre se llama Alice y tiene una repostería cerca de mi casa, mi padre se llama Cristopher y es empresario, mi hermano menor se llama Nick y estudia en el mismo instituto que yo, con la diferencia de que él aún está en secundaria.
Soy la más inteligente de mi clase, tengo el mejor promedio y soy muy admirada por mis compañeros por eso, todos son muy agradables y no me molesta resolver sus dudas de vez en cuando. El único que no acepta que soy mejor que él es Noé, el típico chico popular por la cual todas las chicas -cabe aclarar que yo no- babean, su único talento es el deporte, pero hasta en eso le gano. Soy muy deportista, me encanta el atletismo, Brigitte dice que podría ganar en las olimpiadas si quisiera.
Mis padres trabajan todo el día, y es debido a eso que nunca nos falta nada en casa, pero no por eso voy a dejar que lo hagan todo. Tengo un trabajo con un sueldo estable en Burger King, y no me preocupa ni me avergüenza decirlo, porque al menos así no dependo tanto de mis padres y ellos pueden preocuparse solo por Nick, él decía que igual quería trabajar, pero mamá no lo dejó y por eso optó por abrir un canal en Youtube haciendo gameplays. Por el momento tiene más de dos millones de suscriptores y es reconocido en la calle.
Amo los perros, y por esa razón decidí adoptar uno. Es un San Bernardo, está algo grande y se llama Mateo. Mamá le tiene algo de miedo pero con el tiempo se ha ido acostumbrando a él e incluso puedo decir que ya le ha agarrado cariño.
Bueno, esa es mi vida.
O al menos así recordaba que era, no sé en qué momento todo cambió y se volvió diferente... Es como si hubiera despertado en un universo al que no pertenezco. Ni sé qué sucedió y no le encuentro explicación, pero si de algo estoy segura, es que yo no pertenezco aquí.