—¿Por... por qué me llamaste 'Ángel'?— pregunta titubeando, nervioso.
—¿No es obvio? Eres una buena persona, no crees en la justicia, solo piensas en hacer el bien sobre todas las cosas, incluso sobre tu propia felicidad, te preocupa más el futuro de los bullys que el tuyo mismo... Eh... ¿Sigo?—
—No, no, creo que ya entendí.—
—Bueno, comencemos.— dice Crow frotando las palmas de sus manos, entusiasmado.
—No sé qué se supone que debo hacer.—
—Piensa en algo, lo que sea.—
—¿Algo como qué?—
—Mmmm no tiene que ser algo bueno, esto es como la magia... puedes... mover objetos, recuerda.—
Azira está nervioso, ni siquiera sabe si él realmente tiene esa habilidad o son coincidencias, o si a lo mejor simplemente acepto verse con Crow porque le parece una persona muy interesante, de pronto no sabe qué está haciendo en ese lugar ni qué se supone que debe intentar.
Trata de concentrarse en una botella de plástico vacía que estaba en el suelo a varios metros de ellos.
—No puedo hacerlo.— le dice frustrado mirando a Crow.
—Si puedes.— le responde el otro que poco a poco se va recostando más en la banca con incomodidad.
—¿Cómo estás tan seguro?—
—Mira.—dice Crow señalando la botella que estaba flotando a pocos centímetros del suelo girando lentamente en su eje.
—¿Qué? ¿Pero... cómo? ¿Cómo lo detengo?—
—Piensa en detenerlo.—
—¡No puedo hacerlo!— dice Azira intentando concentrarse para detenerla antes de que alguien pudiera percatarse de qué está una botella girando rápidamente en medio del parque.
Crow extiende la mano levantando ligeramente los dedos y la botella se detiene.
—¿Cómo lo haces?—
—Créeme, ni yo lo entiendo del todo.—
—¡¿Entonces como se supone que vas a enseñarme?!—
—Lo intentaré, ya te lo dije.—
Azira siente mucha curiosidad, pero también miedo, después de todo, crecer en un mundo en el que claramente los conceptos de magia son usados en la fantasía y películas son usados como forma de entretenimiento no estaba ayudando, conocer algo así de desconocido, y además de eso, no poder controlarlo, le hace sentir demasiada frustración.
—Será mejor que vaya a casa.— dice Azira poniéndose de pie.
—¡Oye! No te vayas.—
Azira lo observa con miedo.
—Esto no es normal, Crow, todo esto me asusta mucho, no deberías tener esa hab... esa cosa de magia, no puede ser real.—
—Estás en negación, por eso no funciona, por eso no puedes controlarlo.—
—Es que no tiene ningún sentido, este es el mundo real, esas cosas no existen, o no deberían...—
—Azira... escucha...—
—Mejor me iré a casa.—
Azira comienza a caminar alejándose y un Crow muy confundido suelta un quejido para ir tras él, siguiéndolo.
—¿Qué estás haciendo?— pregunta el rubio enfadado deteniéndose en seco.
—Te acompañaré a casa, es lo mínimo que puedo hacer, te pedí encontrarnos aquí y ahora estás enfadado conmigo, no sé por qué.—
Azira lo piensa, se siente mal por haber hecho sentir mal a Crow, pero también que se siente confundido tratando de entender una fuerza mayor que él pensaba que no era real, que no existía.
—Lo siento Crow, me enfada no poder hacer algo bien.— le dice mientras van caminando, Crow trata de comprender la situación, al menos lo intenta, pero no entiende que Azira se enfade consigo mismo por no poder hacer una cosa que no sabe hacer, no tiene ningún sentido.
—¿Qué?—
—Si es verdad que tengo estas habilidades, quiero poder controlarlas.—
—¿Eso te enfada? ¿No aprenderlo rápidamente? Esto... esto no es sencillo, Azira, me tomó algo de tiempo hacerlo.—
—¿Hace cuando tiempo descubriste que tenías eso?-
—Llevo un año intentando controlarlo.—
—¡Un año!—
—Sep.—
—¿Qué podría pasar si no lo controlo?—
—No tengo idea, pero, entendí que tiene mucho que ver con las emociones.—
—¿Con las emociones?—
—Sí, debes mantener la calma, si un día te sientes muy enfadado podrías hacer cosas que no esperabas, por eso debes controlarlo.—
Azira se preguntaba como Crow sabía eso, quería preguntarle, pero a la vez no quería parecer entrometido.
—Hace unos meses, cuando la banda en la que estaba se separó, me enfadé mucho, cuando todos me dejaron solo en el garage de mi casa, todo comenzó a volar y salir disparado por todos lados mientras yo estaba en el centro intentando tranquilizarme, mis padres llegaron cuando todos los instrumentos estaban en el suelo, obviamente pensaron que lo hice, y técnicamente si lo hice, pero no quise hacerlo.—
—¿Por qué se separó la banda?—
—Mmmm...—
—Si no quieres hablar de eso yo entien...—
—No tranquilo, sucede que éramos cuatro y... tres estaban detrás de la misma chica, eso nunca termina bien.—
—Oh, y tú... emmm ¿Tú eras de esos tres?—
Crow lo mira con una sonrisa traviesa, contento por el atrevimiento de Azira al preguntarle.
—No, yo era el otro, el único que le importaba la banda.—