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Crow está mentalizado a confesar sus sentimientos y hacer la gran pregunta, luego de salir de casa de Azira el día anterior no hubo mensajes ni ningún tipo de comunicación, solo su mente recordando la suavidad de sus labios.

Ahora tiene claro que no quiere que Azira sea únicamente un amigo al cual besó, quiere que sean mucho más que eso, y espera que el rubio acepte su propuesta.

Las horas de clase parecen infinitas, mueve la pierna imparablemente, se siente más que ansioso, esperando que termine la última clase del día para ir a buscarlo, hablar con él.

Al sonar la campana es el primero en tomar sus cosas y salir velozmente, camina por el pasillo mirando a cada rincón.

— ¿Dónde estás angelito? —

Luego de caminar durante varios minutos decide llamarlo, pero no responde.

'Hola niño, no te encuentro por ningún lado.'

'No fui a la escuela, aún siento mucho dolor... ¿Me estuviste buscando no es así?'

Su increíble capacidad de hacer sentir nervioso a Crow incluso por mensaje, logra su cometido.

'Quiero verte, ¿Puedo ir a buscarte a tu casa?'

'¿Qué opinas si nos vemos por la tarde? En el parque St. Jane, donde siempre.'

'De acuerdo ángel. Nos vemos.'

Crow estuvo cerca de escribir un '... ya quiero verte...' pero eso hubiera sido extraño, eso piensa, en realidad a Azira le hubiera gustado leer esas palabras.

En su habitación, el rubio está nervioso, sonríe pensando en que Crow estuvo buscándolo y se lo imagina, mirando a todos lados, se lo imagina caminando apresurado por los pasillos. No puede dejar de pensar en el beso, tener a Crow así de cerca y poder sentir el calor de su rostro en el suyo, sus mejillas rosadas emitiendo una sensación cálida que se quedó con él y que extraña de pronto. Sus labios jugando a saber lo que hacían cuando no tenían idea de lo que hacían en realidad, y aun así sentir que amó ese primer beso, igual que todos los que ocurrieron después.

Horas después el pelirrojo camina hacia el parque, repasando sus palabras, pero al no poder hacerlo mentalmente las practica en voz alta.

— 'Nos conocemos hace un tiempo'... no eso no queda bien... 'Tú y yo somos buenos amigos y...', ¿Debería mencionar el beso? ¡Rayos! ¿Cómo se pregunta esto?... 'Azira, tengo que decirte algo... y es que me gustaría que fuéramos ¿Un grupo de dos?' ¿Quién dice grupo de dos? ¿Qué me pasa? ¿Por qué me pones tan nervioso? — sigue caminando mientras encuentra las palabras adecuadas, se detiene para cruzar el semáforo y adentrarse en el parque— 'Nos conocemos y me gustas y...' No, no, eso suena muy torpe ¡Demonios! —

Se sienta en la banca donde siempre, mira al cielo, se quita las gafas y las cuelga en el cuello de su camiseta, frota sus manos impacientemente.

✱✸ ✱

— ¿Por qué estás tan nervioso, muchacho? — el hombre pelirrojo se pregunta mientras está sentado en una banca lejana fingiendo leer el periódico cuando lo que realmente hacía era fingir dormir. Al percatarse de que aquel humano tan peculiar, también pelirrojo, se sienta en la banca a varios metros de distancia, viéndose increíblemente intranquilo, no puede dejar de mirarlo detenidamente, le genera muchas emociones estar así de cerca de una persona que él creó.

Ve al otro joven acercarse de pronto y sentarse a su lado. Es la primera vez que el hombre ve al joven rubio, siente su corazón estremecerse, todas sus emociones se transforman en sensaciones nostálgicas, la melancolía lo invade. Se sienta firme y observa detenidamente, todos sus rasgos físicos, los ojos, parece tener una pequeña venda y marcas, pero el cabello, la forma de vestir, simplemente le recuerda tanto a él.

— Ahora entiendo por qué estás tan nervioso, si fuera tú también lo estaría... —

✱✸ ✱

— Hola Crow, lamento mucho la demora... —

— No, no, está bien, ya estás aquí... — Crow levanta la vista y se encuentra con el rostro del dueño de su primer beso, que tiene aún marcas de los golpes de Brandon y una pequeña venda adhesiva en la herida de su ceja, pero eso no hace que le parezca menos hermoso.

— Bueno, creo que tenemos que hablar... —

— Sí, y creo que debería hablar yo primero, por favor... —

— Bueno yo... quiero decirte algo importante... —

— Azira, no encontraba el momento para decir lo que quería decir, así que lo diré ahora, nos conocemos hace un corto tiempo, hemos pasado algo de tiempo juntos, quiero decir, tú y yo. Sé que puedo confiar en ti y tú sabes que puedes confiar en mí, somos un equipo, un grupo, quiero decir, un grupo de nosotros dos, y todo este tiempo estuvimos pretendiendo que no ocurría nada, me refiero, después de lo de ayer, realmente no, y me gustaría... hmmm.—

Los nervios le ganan a Crow, quien mira a Azira y trata de encontrar fuerza en su mirada para continuar, mira a otro lado y cierra los ojos con fuerza y suelta un suspiro.

Azira nunca se había sentido tan conmovido como en ese instante, cada palabra de Crow es exactamente lo que él quiere decir, lo que él piensa decirle en realidad, y no puede evitar sonreír.

— Ayer nos besamos... — continúa hablando el pelirrojo —... Y no fue solo una vez, me gustaría que fuéramos tú y yo, no aparentar que nada ocurre, ser algo real, algo importante, ser nosotros, tú y yo ¿Qué dices? —