Hanna
-Horas después-
Ya estábamos saliendo de la universidad, Emma
Y yo caminábamos fuera de la universidad, ella
hablaba sobre las clases que habíamos tomado pero yo
no le hacía caso omiso, me parecía un poco aburrido
pensar en las clases que habíamos tomado las dos,
además que, también había otro tema sobre el cual
tenía mucho interés y es que en realidad me la había
pasado en todas las clases pensando sobre mi sueño de
hoy día.
Emma: Y bueno ¿qué te parece, Hanna?
Hanna: ¿Eh?
Emma: ¿Enserio no escuchaste lo que dije, Hanna?
Hanna: Am…... creo que no.
Emma: Hanna, enserio tienes que prestar más atención a lo que te digo, estoy que te hablo y tú no me prestas atención.
Hanna: De acuerdo prestare más atención, solo necesito pensar un poco más sobre el tema de mi sueño.
Emma: Entonces, ¿estabas pensando en tu sueño en vez de escuchar lo que digo?
Hanna: Pues sí, Emma.
Después de decirle eso a Emma me di cuenta de que en realidad ya habíamos caminado lo suficiente como para darme cuenta que estábamos las dos en medio de la calle, casi cerca de la cafetería en donde tomamos café siempre antes de ir a la universidad.
Emma: Bueno como estamos cerca de la cafetería que te parece ¿si vamos a tomar un café antes de irnos a nuestras casas?
Hanna: Me parece bien.
Emma: Bueno entonces, allá vamos.
-Minutos después-
Después de caminar unos minutos, ya habíamos
llegado a la cafetería, pero había algo raro, una
sensación extraña, de pronto sentí la necesidad de
mirar hacia atrás, así que cuando volteo me sorprendo
al observar lo que estaba viendo:
Era un hombre alto, de piel blanca y pelo azul oscuro,
usaba un abrigo muy elegante de un color marrón muy
oscuro, tenia debajo una camisa de color negro oscuro
y usaba unos pantalones oscuros, caminaba entre toda
la gente por eso no podía distinguirlo muy bien, no
sabia porque nos estaba siguiendo, parecía interesarle
a donde íbamos nosotras dos.
Emma: Hanna ¿estás bien?
Después de lo que dijo Emma me voltee rápidamente,
un poco agitada como si estuviera asustad no sé por
qué pero sentía que me faltaba el aire.
Voltee nuevamente hacia atrás pero el hombre que
estaba entre toda la multitud de gente había
desaparecido como si se esfumara.
Hannna: si... Estoy bien.
Dije volviendo a voltear la cabeza hacia delante y
volví a caminar junto a Emma pero en mi pecho sentía
una sensación rara como si tuviera miedo y no sabía
porque pero sentía que algo iba pasar.