Primera Advertencia

Al terminar aquella visita hacia los padres adoptivos de Nathaniel, esté muy amablemente me llevó a casa donde antes de irse plantó uno de sus castos e inesperados besos en mis labios ruborizándome, ya que estábamos a la vista de Saray, pero sin dudarlo tanto siempre le era correspondido.

Al entrar en la casa cerré bien la puerta para subir a mi habitación, despojándome de aquella ropa para ponerme algo con mayor comodidad, escuchando el timbre de la casa pensando en que era Kennta, pero al abrir la puerta solo me encontré con una pequeña caja que sobresalía en la parte superior una carta que era dirigida para mí.

Me extrañe demasiado al no ver a nadie cerca, por lo que solo la tome aquel paquete y cerré la puerta caminando rápidamente a mi sala de estar colocando la caja en la mesita para tomar el sobre con la carta y abrirlo con ayuda del llavero porque estaba sellado.

// Carta //

Lilly, Lilly, Lilly.

Al parecer no sabes que te enamoras de alguien que es ajeno ¿No? Últimamente, he notado que le echas ojitos a mi hermoso novio, que aunque no te lo diga Nathaniel tiene una hermosa novia, delgada y extremadamente buena en la cama que soy yo.

No te diré quién soy porque poco a poco te darás cuenta, al igual no le digas a tu príncipe de ensueño porque te lo negara... Él me ama a mí solo nos separamos porque me mude, pero he regresado por lo mío y tú eres un simple estorbo.

Aquí en la caja te dejo unas cuantas fotos de Nathaniel junto a mí, inclusive haciendo cosas sucias... Ja Ja Ja, que divertido seria verte la cara, lástima que no tengamos el placer de conocernos sino por estos medios.

Quiero que te alejes de mi hombre estúpida, o te haré la vida imposible, conozco tu pasado y puedo hacerte trizas... Tú me quieres robar lo mío, yo te robaría tu vida, tú verás que escoges gorda.

Atte. Que te importa.

// Fin de la carta //

Mis ojos se cristalizaron rápidamente, que ni decidí abrir la caja, aunque fuera pasado de Nathaniel o algo por el estilo me dolería ver que estuviera con otras chicas destapando en mí una nueva inseguridad, sentía que me estaba ahogando con la ansiedad, pero en esos momentos la puerta sonó a lo que limpiando las pocas lágrimas que habían brotado de mis ojos abrí viendo a Kennta quien sin dudarlo la abrace algo fuerte sin intención de que me soltara.

—. Cariño ¿Qué te pasa porque estás llorando?

—. Nathaniel me está mintiendo Ken, él no quiere nada conmigo yo lo sé…

—. Hey de donde sacas esas tonterías Lilly, como que ahora estás dudando cuando me dijiste que ya te sentías segura con ese hombre a tu lado, ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión?

—. Solo mira esto...

Le enseñé la carta de hace unos minutos a lo que esta se puso algo seria mientras la leía,  quería gritar y llorar el resto del día porque me sentí de una u otra forma traicionada, estaba ya empezando a dudar de mí y mucho más de Nathaniel quien hacía que en mi cabeza retumbará de que tenía novia con la que no termino según lo que dice la carta.

—. Vamos Lilly no creo que esto sea verdad, Nathaniel no tendría una novia y se metería contigo, él no se ve de esa clase de chicos.

—. ¿Y sí…? ¿Si lo es? ¿Y solo se oculta tras la pinta de ovejita? No sé qué pensar, quiero llamarlo, pero seguro me negará todo, ya no sé si creerle y yo…

—. ¡Lilly! Por dios como estas dudando de él, ese hombre yo sé que te ama, esta de seguro es una ex que simplemente no los quiere ver felices o puede ser Trevor, confía un poco y sé feliz tú.

—. Pero no me regañes... Solo te digo lo que pienso, como quieres que confié si eso me ha llegado y me ha hecho sentir mal...

—. Te diré algo y tenlo en claro por qué no me gusta verte así, si Nathaniel quisiera jugar con tus sentimientos no me hubiera buscado para saber que te gustaba y que no, no me habría pedido ayuda con tristeza de saber quién te dio aquella encomienda la otra vez en la cancha, no me hablaría para saber más de ti, cuando un chico quiere jugar con una mujer no busca lo que más le gusta a esa persona sino lo que le puede gustar al montón.

—. ¿Hablabas con Nathaniel y yo ni enterada?

—. Ese no es el tema de la conversación Lilly, pero has entendido lo que te he dicho o aún no te queda claro que ese hombre te ama.

—. Realmente no lo sé. Confió en Nath ahora que lo dices si se muestra como un gran chico, pero tengo miedo de que ahora que soy feliz venga alguien y me lo arrebate metiéndome cucarachas a la cabeza.

—. Eres super bipolar ahora que me doy cuenta amiga, vamos habla con Nathaniel y cuéntale la situación para que le pueda poner un tate quieto a esa persona a lo mejor él le conoce, no te preocupes tanto y solo confía en el amor que te da, es un gran chico te lo digo que le tengo altas expectativas a él.

—. Está bien supongo que lo llamaré enseguida para ver si puede venir... ¿Tú te irías o te quedarías conmigo aquí?

—. Yo me quedaré contigo ¿Sí? Por si pasa algo poderte cuidar, aunque dudo que eso pase, pero si me quieres contigo aquí estaré.

—. Eres la mejor amiga del mundo, ¡Te amo tanto!