Nuestro momento

Capítulo 4

Después del abrazo le pedí si me podría llevar a mi casa ya que si veía a Alexa le iba a reclamar y tal vez me hubiera desquito de una manera muy violenta, tome mis cosas lo bueno que no había desempacado.  Ya estando en la planta baja vi que ya no quedaba nadie, el “consejo” estaban sentados en el pasto del patio, Cristian y yo nos fuimos sin hacer ningún ruido porque la verdad no quería hablar con ellos.

Después de unos 20 minutos Cristian y yo llegamos a mi casa.

Bueno ya estamos aquí-dijo mirando hacia mi casa con nostalgia- te acuerdas la primera vez que vine a tu casa.

Si como olvidarla, estabas tan nervioso que temblabas de miedo por conocer a los hombres de mi familia-dije riendo-

Pues si como quieres que estuviera si son un chingo-dijo riendo- y tú todavía te fuiste a la cocina con tu mamá y me dejaste solo con ellos en la sala.

Mi mama y yo nos pusimos a hablar de cuánto tiempo te dejaríamos con ellos pero en cuanto escuche tu risa nerviosa entendí que no ibas a salir vivo de ahí.

Y por poco no salgo-dijo riendo-pero mira salí sin ningún rasguño.

Gracias a mí, ya que si yo no les hubiera dicho a mis hermanos y a mi papá que te gustaban los deportes y a los equipos que les vas nunca hubieran hecho tema de conversación.

Si, la verdad me salvaste-dijo riendo- también recuerdas nuestra primera cita.

Si, recuerdo que llegaste muy perfumado y guapo en tu esmoquin ya que me habías invitado a la boda de tu primo-dije mirándolo a los ojos-

Tu también estabas muy guapa en tu vestido rosa  con su corsead de rosa de brillitos y la falda que te llegaba a las rodillas también rosa con brillitos y esos tacones platas con brillos que hacía que estuvieras de mi misma estatura.

Todavía recuerdas todo eso- dije agachando la mirada-

Y como olvidarlo te veías más hermosa de lo normal-dijo mientras ponía su mano en mi mentor y subía mi rostro- ese día me sentí el chavo más galán de la fiesta y no fue por mi sino porque llevaba a la novia más hermosa del mundo.

Hay Cristian-dije suspirando-¿Qué nos pasó? Si éramos tan felices estando juntos.

Nos paso que confiamos en personas equivocadas y al creer lo que nos decían esas personas decidimos vengarnos y no hablar del tema ni darnos explicación-dijo triste- y yo tuve la mayor parte de la culpa ya que si yo no hubiera racionad impulsivamente al salir con otras chicas mientras andaba contigo y el haberte dejado de hablarte en vez de afrontar mis problemas y explicarte lo que realmente había  sucedido esas tantas veces que actué de esa manera tu estarías junto a mí y seriamos felices porque todavía habría confianza en nosotros.

Si Cristian, pero también mi culpa por no haberme acercado a ti y pedirte una explicación-dije mirándolo a los ojos-

Ambos tu vimos la culpa-dijo tomando mis manos- pero Hermione si tú y yo regresáramos ¿todavía confías en mí?

La verdad, es que no –dije mientras caía una lágrima de mis ojos- hace tiempo confié perdidamente en ti pero esa confianza se fue.

Créeme yo tampoco confiaría en mi si fueras tu- dijo volteando hacia el parabrisas- pero me gustaría que me dieras una segunda oportunidad no como novios si no como amigos y ya desde ahí partir.

Cristian hazme un favor-dije mirándolo-

Si el que quieras.

Olvida el día que nos conocimos-dije mirando hacia el parabrisas-

¿Qué?-dijo desconcertado-

Olvida el primer momento en que me hablaste. Olvida mis celos y mi orgullo. Olvidad que una vez forme parte de tu vida. Olvídame.

¿Por qué me pides esto?

Si te pido es porque sé que no te costara hacerlo. Olvídalo tú, porque yo no, sinceramente, no puedo-dije abriendo la puerta del auto-

En cuanto baje del auto me dirigí a mi casa ya eran la 2 a.m. así que me metí en silencio para no despertar a nadie.

 

 




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