||CAPITULO OCHO||

CAPITULO OCHO

KASSIA

A partir de ahí, Jake y yo empezamos a hablarnos muchísimo por teléfono. A diario nos escribiamos durante el transcurso de los días, sobre tonterías o lo que pasará por nuestra mente. Se volvío parte importante de mi rutina, y transcurrió más tiempo. El invierno acabó y eso trajo consigo las clases pesadas otra vez, por lo que no nos podiamos ver tan seguido, y además que queríamos conocernos mejor antes de salir juntos en esa cita.

Ese día, un viernes, estaba aburrida mirando el reloj de la pared del salón, contaba los minutos que quedaba para finalizar esa clase. Supuse que no era la única. El silencio abarcaba todo el salón, sólo se oía la voz monótoma de la profesora Madison leyendo un fragmento del libro de texto de la matería.

Llegó un punto que no soporté más, saqué de mi bolsillo mi teléfono verificando que nadie me estuviese mirando. Al comprobarlo, lo desbloqueé y navegé por las notificaciones que me llenaban la barra, no habia nada interesante.

Acabé metiendome dentro del chat de Jake, ese día sólo nos habíamos saludado y deseado suerte en las clases.

Jake:

"¿Estás?"

Estaba en línea, sonreí y texteé algo deprisa.

"No debería, pero sí"

Envió un emoji de ojitos curiosos.

"Estoy en clases, si el profe me pilla, me castigará y me quitará teléfono"

Jake: “Que rebelde, eh”

“Como sea, ¿Qué ibas a decirme?”

Jake: “Estoy en descanso”

“Así que… quería saber si estabas para hablar contigo”

“Pero, si estás en clase, mejor no te molesto”

“Nooooo, no molestas”

Al contrario, está bien."

Jake:“¿Si?”

Iba acompañado de un emoji alzando la ceja.

Bostecé y comencé a escribirle una respuesta.

“Estoy en clase de Historia y la profesora Madison… lo hace más aburrido…

Es del tipo que nos habla de cualquier tema con palabras tan rebuscadas del diccionario y con el tono de un robot

Me estoy durmiendo”

Respondió enseguida.

Jake:“Ya veo…

Nuestra profesora de Historia es genial, en cambio, nos habla del tema de una manera más divertida.

Nos hace preguntas también sobre que haríamos en el lugar de algún personaje histórico y así."

Casi pude imaginarme esas clases, sonaban más divertidas que la mía.

“Suertudo..

Ojalá fuese más así

Tengo examen pronto de esto y debo prestar atención”

Al enviarlo, miré hacia el pizarrón donde se leía el tema "La revolución Francesa" acompañado de los nombres de los personajes relevantes. Todos con nombres franceses, ugh, estaba complicandose mi vida.

Jake: “Que horrible eh”

“No tienes idea ><”

Jake:“Si me la hago, por eso te compadezco”

“La anterior profesora que tenía, era una anciana… anticuada y intimidante”

“He aprendido más con esta profesora nueva que con ella”

Bien por él, mal por mí.

Escribí lo primero que se me ocurrió, no sabía bien que responderle.

“Qué bueno…”

Jake: “Por eso, te digo que cuentas conmigo por si necesitas ayuda con esa materia”

Oh... la imagen clara de Jake dandome clases se proyecto en mi mente.

Podía hacerme la idea.

Mi corazón se aceleró con la propuesta.

“Me vendría bien”

Y no mentía, me ayudaría bastante con los exámenes cercanos.

Jake:“Y… Kassia”

Fruncí el ceño al leerlo, envié un sticker de una caricatura curiosa.

“¿Sí?

Jake: “Mmm… quiero preguntarte algo”

Justo estaba buscando un gif y le pinché por accidente a uno, acabó enviandose un gif de un mono masticando algo.

Jake:“Que mono tan feo”

"Lo envié por accidente, estaba buscando algo menos gracioso"

Jake: ¿Gracioso?

“Es gracioso, no lindo, aburrido"

Jake:“No me da risa”

“Tu humor está roto entonces.”

Un emoji rodando los ojos apareció en el chat.

“Entonces, ¿cuál es tu pregunta?”

Jake: “¿Estás libre mañana?”

Miré hacia todos lados, mis compañeras seguían concentradas en la clase, la profesora también continuaba hablando sobre que debíamos realizar un ensayo de investigación sobre la revolución francesa. Ugh.

“Puede ser, ¿y tú?”

Jake: “Lo estoy, por eso te pregunto”

“Tengo un rato libre en la tarde, porque parece que después debo hacer un aburrido ensayo”

Jake:“No está nada mal, tampoco tengo mucho tiempo libre mañana”

“¿Crees que sea suficiente para la cita?”

Contuve un grito al leer ese mensaje.

¿Cómo podía soltar cosas así tan casuales?

—Señorita Kassia, ¿quiere compartir algo con la clase? —su pregunta hace que me ponga derecha en el asiento y alejé la vista del teléfono.