Mónica
—Mónica, debes elegir una carrera así podrás irte de este rascuacho pueblo — se queja mi padre.
—Me gusta el pueblo.
—Tienes 17 años, hace unos meses acabaste la preparatoria, no tienes amigos, te la pasas viendo novelas enterrada en la tienda o en tu cuarto, quieres estar en la tienda, temo por mi árbol genealógico.
Mi padre tiene cierta obsesión con que yo me vaya del pueblo, desde que mamá falleció solo fuimos él y yo, desde entonces está empecinado en que me vaya del pueblo y busque algo mejor, solo si el viene conmigo me iré.
—No tengo amigos o siquiera novio, porque aquí en el pueblo son muy mamones — me pongo acomodar las latas de chile.
—Es por eso que digo que te vayas a la ciudad.
—Papá no, quiero estar aquí, si alguien me ama estará conmigo y si no pues tendré que quedarme sola aquí en el pueblo.
Mentiría si dijera que no quiero novio, en algún momento todos necesitamos amor, en si nunca he tenido novio, solamente un patán que me ilusiono y al final resulto que yo era la amante, desde ahí preferí las novelas.
—Estudiare, quiero ser enfermera, así podre saber algunos de tus males — padre me observa con una sonrisa.
—Cuando presentaras el examen.
—Ya lo presente y fui aceptada, en un mes entrare a la escuela.
Parece que la noticia lo ha puesto feliz, ha salido como rayo de la tiendo, en cierta forma lo entiendo, este pueblo es pequeño, no ofrece muchas cosas, pero este pueblo me recuerda a mamá, no quiero olvidar sus recuerdos, su partida aun duele, me voy a la silla y pongo mi novela, prefiero sufrir porque los protagonistas no están juntos, que sufrir porque un imbécil me mintió.
El campo es un lugar tranquilo a comparación de la ciudad, aunque he escuchado que es donde más abundan los narcos, sinceramente aquí nunca pasa nada de eso, tan solo que sea porque se mataron por terrenos, una vez mi padre me conto que hace unos años en la hacienda que está abandonada en el pueblo vivía una familia de narcos, muy reconocida y respetada, esta familia tuvo un hijo quien iba a heredar el negocio algún día.
El único error que cometió fue enamorarse de la hija heredera de otros narcos, el decidió robárselo cuando ambos cumplieron 15 años, se desato tal guerra que este pueblo se convirtió en una carnicería, al final al chica murió por un mal tiro que lanzo su padre, también mataron a los padres, el hijo heredero quedo solo y con mucho resentimiento, acabo con todo, todos le tuvieron miedo, nadie se atrevía meterse con él, desde ahí nunca se volvió a casar, tengo entendido que ahora es mucho más rico que antes y mucho más despiadado, a veces mi padre agradece que él se haya ido lejos del lugar que le recordaba a su amada.
Siempre he creído que el amor no puede hacer, creo que los vuelve imbéciles, pero no a tal grado de matar por ella, supongo que ese es otro tipo de amor, un amor posesivo, el único amor que conozco es el de los infieles, sin mentir aquí en mi pueblo todas y todos han andado unos con los otros, eso para mí es algo asqueroso, tener que compartir.
Mejor en vez de seguir hablando sobre amor, me pongo a estudiar, no quiero que la escuela se me haga pesada, sería demasiado estúpido de mi parte pensar que alguien llegaría amarme como para sacrificar su vida por la mía, debería dejar de ver esas películas tontas.
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Editado: 06.12.2024