Capítulo 11 - ¿Qué podría salir mal?

Los días se pasaron más rápido que otros, no supe más de Daniel, ni de Mike, estaba más tranquila dibujando en mi departamento, era artista cuando pasaba la noche, igual que creadora de pensamientos positivos, como el amor propio.

Con el pasar de los días, lucho por ganar cada batalla que cruza por mi cabeza, como lo son los pensamientos negativos.

El pasado que ciega mi vista, el pensar que quiero estar con alguien solo porque me siento sola, y es que no, no quiero más esas cosas, por algo distraigo mis mentes con libros, con mis escrituras de noche, con películas que puedan hacerme llorar.

Llorar, porque sé muy bien que tengo que soltar y no deprimir mis sentimientos solo porque llega el pensamiento de que..., eso solo te hace ser débil, cuando no es así, si lloras, si sientes dolor, es porque eres humano, y porque también eres real, no todo tiene que ser perfecto, cuando buscas positivismo en todas las cosas que te han pasado en la vida, sabrás lo que vales y que no eres perfecta. Sino un ser humano lleno de vida, con lindas imperfecciones y eso es lo que te hace real.

Eran como las 3:20am y caí rendida en mi sillón, había terminado mi obra maestra, le prometí a Laurie que llevaría mi mejor obra, igual que el llevaría una a la biblioteca, él quería poner un poco de pintura en la biblioteca, darle más vida de lo que ya tenía, no me parecía mala idea, Laurie era ese chico que te hacia reír con tan solo tropezarse, o hablarte, te contagiaba de su energía, era fascinante, nos llevamos tan bien, pero a veces me estresaba de tal manera, que buscaba la forma de tirarle un ladrillo encima, seguía siendo cortes conmigo de igual forma. Leslie y Tris quedaron mudas, cuando lo conocieron por primera vez en la biblioteca.

- Es tan guapo. -

- Es elegante, y su pelo. – Dice Tris, no paraba de mirarlo, por mientras que yo arreglaba unos libros.

- ¿Y tú qué?, ¿no te atrae ni un poquito? – Pregunta Leslie

- Es elegante, no lo puedo negar, pero no tengo mente para eso chicas. – Digo, por mientras que camino a otro estante, lo cual ellas me siguen.

- Creo que tienes fiebre, el no para de mirarte Marry, ¿enserio estás segura de que no quieres tener a ese hombre a tu lado? – Pregunta Tris y la miro.

- ¡Enserio chicas paren! –

- Llevas meses estando sola Marry, superaste a Daniel y a Mike. – Dice Leslie

- Chicas, lucho por sentirme bien y estable, superar a una persona no quiere decir que puedes darte vuelo a algo con alguien más, y menos si te has comenzado a amar a ti misma, además no me veo con alguien. – Digo

- Espero que un libro caiga en tu cabeza y te abra el cerebro, enserio te pasas de tonta. – Dice Tris

- No lo soy, ¿Lo soy? –

- No lo eres, no le hagas caso a Tris, solo te diré que no pierdas de vista a ese chico, porque llegara el momento en que te sentirás lista y puedas volar nuevamente, pero con él, te mereces a alguien que sepa valorarte, y eso lo sabes muy bien. – Dice Leslie, dándome un dulce abrazo y se une Tris también.

Se estaba acabando Junio y tengo que confesar que tuve altas y bajas, desde la muerte de Nona, me sentía débil, tenía meses sin comer bien, desde diciembre, pero casi nadie lo notaba ni yo misma, también me entro depresión, caí en lo más profundo de mis pensamientos, extrañaba mucho a Mike, lloraba con su chaqueta casi todas las noches, era imposible, me estaba rindiendo, o enserio necesitaba sacarlo de mi sistema, era algo incomprensible y doloroso.

Extrañaba a Nona también, pero casi nadie notaba mis faltas, mi hermana me insistió a hacerme exámenes generales, espere por una semana mis resultados, sabía que saldría mal, me sentía agotada, así que la negatividad llego a hundirme en esos momentos y extrañar a Mike no era algo bueno para mí, la última noche que llore por él y por todo lo que me hundía fue donde me seque mis lágrimas, y me dije a mi misma que no lloraría más, que mejoraría.

Quería seguir hacia delante, sin tener esos sentimientos que solo me hacían sentir mal.

- Marry, podrías bajar, te llegaron los exámenes. – Dice mi hermana.

Sentía muchos nervios, seguía con el pensamiento de que enserio saldría mal. Bajo los escalones y veo a mi hermana con mi papa en la sala.

- Hija, llegaron los exámenes. –

- Pueden abrirlos por favor. –

- Claro...- Dice mi hermana, veo que abre los exámenes y los piensa a revisar, estaba tan concentrada que ya me daba miedo estar aquí. – Al parecer todo está muy bien, de igual manera mañana iremos al doctor para que los revise. –

- Está bien. –

No podía creer que enserio estaba bien, al día siguiente mi hermana me llevo al doctor, reviso los exámenes y dijo que todo estaba bien, solo que tenía una infección en la orina, y que comenzara a tomar las pastillas que me había recetado. Me sentí más tranquila, y calmé mis miedos "De que algo malo tenía mi cuerpo."

Los días pasaron y me sentía mucho mejor, comencé a escribir, a compartir más momentos con mi familia, guarde la chaqueta de Mike lo cual no volvería a sacar más nunca, ni pensarlo.

Laurie y yo nos comenzamos a llevar mejor, aunque me molestaba demasiado en el trabajo, con sus veintiún años, seguía comportándose como un niño, no le importaba tanto los comentarios de las personas. Me contagiaba de su forma de ser, me hacía reír en el trabajo.

Claris volvió y mi hermana sin pensarlos dos veces la echo, tenía un mes sin haber venido.

Leslie y Tris, estaban muy juntas de lo normal, ¿pero era normal no?

- ¿Puedo saber de qué están hablando? –

- Pues... teníamos pensado irnos de fiesta, pero Laurie propuso algo mucho mejor que ello. –

- ¿Qué cosa? – Pregunto algo intrigada hasta que lo escucho.

- Propuse que hoy nos iríamos a un lugar maravilloso, este fin de semana, además también habrá una fiesta. –

- Tris y yo tenemos que trabajar. – Digo