Siempre Te Encontraré

Soñandote

Y ahí estaba ella otra vez. Sus hermosos ojos verdes, lo hipnotizaron una vez más. Extendiendo las manos tocó su pequeña cintura, deslizandolas hacia abajo para agarrar su trasero y estrujarlo.

Poniéndose sobre ella, chupo un pezón mordiendo ligeramente haciéndola soltar un jadeo entrecortado, besándola salvajemente recorrió con la lengua su labio inferior antes de morderlo.

Bajando un poco lamió el lugar exacto en su cuello en el que iría su marca, estrujando un pecho con la mano bajo hasta sus bragas, metiendo la mano dentro de ella no pudo evitar gruñir al sentir lo mojada que estaba.

Mordió ligeramente su cuello y su cuerpo se tenso al sentir que la chica exponía su cuello aún más. 

-Márcame, soy tuya, hazlo por favor - susurro la chica suavemente, mientras se abría de piernas debajo de él.

Al sentir la entrepierna caliente de la chica, saco su miembro y puso la punta en la entrada húmeda de ella, al sentirlo la chica puso sus manos en el trasero duro de él, para atraerlo. Sin poder contenerse entro en ella haciéndola gemir. Entro lentamente, ella desesperada levanto las caderas intentando que se apresurara.

-Muévete rápido - ordenó la chica mirándolo a los ojos.

-Y si no quiero - susurro en su oído.

Cuando estuvo totalmente dentro de ella, sintió como apretaba las paredes de su vagina clavándole las uñas en la espalda.

-Por favor... - susurro una vez más la chica.

-No...

-Por favor, mi alfa - dijo en su oído enloqueciendolo.

Saliendo de ella, entro bruscamente haciendo que gritara, puso su boca sobre su cuello para marcarla, entreabrio los labios a punto de marcarla, cerró la boca y...,

 

Abrió los ojos, mientras seguía escuchando la maldita alarma que lo había levantado de su mayor fantasía sexual.

Extendiendo el brazo golpeó fuertemente la alarma haciendole una raya en el pequeño pedazo de vidrio del rejol de metal al lado de su cama.

-Maldita alarma. -gruño levantandose de la cama, sentía su erección que estaba siendo apretada por el boxer. Quitandoselo se metio en la ducha, pegando la frente de las baldosas.

"Maldita alarma" siguió lamentándose en su mente.

 

Nota:

Acepto críticas, pero porfavor no sean muy duros conmigo es el primer libro que público. Y estoy muy nerviosa, espero les guste.

Adiks




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