Simplemente

Capítulo 4

25/06/2022
 

–Kiki, ya me voy- le sonrío mientras la observo viendo sus películas y luego miro a Stella quien es la niñera de mi hermana (Por hoy).

–Tranquila, esta en buenas manos.

Niego tranquila tomando mi bolso y viendo la hora 6:30 pm

–No es eso, solo es que es la primera vez que se queda un sábado en casa es todo.

Mayormente Keira se queda con la que era mejor amiga de mi mamá que ahora queremos como tía pero tuvo una emergencia y no fue posible que Kiki se quedara allá.

–Bueno ya me voy, ¡Adiós!- salgo de la casa y tomo un taxi para llegar más rápido al bar dándole las indicaciones al conductor el cual llega más rápido de lo que esperé.

–Son 5 dolares señorita- dice y saco de mi billetera el dinero entregándoselo y le agradezco.

Me detengo frente al bar mirando las luces Neón de la entrada y ese característico anuncio " Bienvenidos a Bora". Tomo aire y me adentro pasando rápidamente entre las mesas sin dejar que los ebrios me vean más de dos veces.

–Ad llegas 5 minutos tarde- dice Eliza una compañera de trabajo que siempre anda de broma en broma. Su cabello rojo lo lleva amarrado en una coleta y su piel blanca se ve tan clara como si fuera una muñeca de porcelana.

Me mira alzando una ceja y se que esta apunto de reírse, me cruzo de brazos y la miro entrecerrados los ojos.

–¿5 minutos? ¿Es enserió?- niego y suelto una pequeña risa y esta explotación a carcajadas. La verdad no me dio risa lo que dijo aunque su risa da más risa que el chiste. Todos tenemos ese amigo que su risa es más chistosa que lo que contó.

–Lo siento pero tenias que ver tu cara, ¡estabas así!, mira - hace una mueca rara con su cara y yo me río hasta que siento pequeñas lagrimas en los ojos.

–No se como Jonas puede aguantarte- Me limpio el rostro

–Me ama- Alza los hombros y yo niego rodando los ojos caminando hacia los casilleros donde guardo todas mis cosas ya que el uniforme lo tenia puesto, salgo y empiezo a atender como de costumbre topandome con unos que otro conocido.

–¡Hey Ad!, según el jefe hoy abra un evento, creo que es una despedida o algo así, no lo sé- Susurra la rojiza y yo la miro interesada ya que pocas personas vienen a hacer sus eventos aquí.

"Bora" no es el mejor bar de por acá, que hay más con mucho más espacio y mucho más bonito. Además cualquier persona entra aquí lo bueno es que Brunno siempre esta en la entrada para revisarlos a todos y que no pase un accidente.

–¿Una despedida? De soltera ¿No?

–No lo se, solo dijo que hay que prepararnos- alzo los hombros y se va dejándome con dudas.

Luego de un largo rato de atender mesas por fin tomó un respiro ingresando dentro de la barra de cócteles para sentarme unos minuto.

Mi mente se pierde unos instantes y se posa en aquel chico de ojos ámbar que toda la semana me ha acompañado a mi casa y que antes de irse recita versos de cualquier libro conforme este acorde con el momento. Una pequeña sonrisa escapa de mis labios y siento un cosquilleo en el centro de mi pecho que no reconozco hasta que por arte de magia escucho su voz pensando por un momento si era real o no. Levante mi mirada y ahí estaba

–¿Pensando en mi Hada?- sonríe mostrando sus dientes blancos y me levanto de la silla acercándome pero la barra nos dividía.

–Pirce, ¿Que haces aquí?- Pregunto aun sin poder creer que el este en un bar como este.

–Bueno... Da la casualidad de que mi prima se va de viaje y mi familia quiso hacerle una "Despedida". Justo me comentaron en el camino que iríamos a un bar llamado "Bora" que otra casualidad el dueño es amigo de mi tía y nos reservo una Zona Vip- se rasca la nuca y ve hacia los lados para volver su mirada a mi.

–Es muy raro, pensé por un momento que me habías acosado- lo miro y alzo una ceja cuando el mira hacia otra parte evitando mi mirada.

–Me acosas ¿Verdad?- pregunte obvia

El niega repetidas veces y luego suspira intentando hablar.

–No, bueno si pero no. Solo pregunte a unos cuantos compañeros de la escuela como eras, eso es todo. No es que sepa tu tipo de sangre o tu cuenta bancaria.

Se rie nervioso tratando de salvarse y al parecer a quien le hubiera rezado contesto por que justo cuando yo iba a hablar Eliza aparece sonriendo como siempre.

–¡Ad! ¡A que no adivinas a quien me encontré!- chilla llegando junto a mi y luego calla al ver a Aaron. Lo analiza y se acerca recostandose de la barra.

-Hola guapo ¿Que te trae por aquí?

Aaron se avergüenza y me mira buscando auxilio. Yo mientras aguanto la risa mirando como la rojiza le manda un beso.

–Yo soy amigo de Adhara- sonríe de lado y la chica se gira mirándome con ese rostro de "Me lo tienes que contar todo" yo niego y la empujo un poco para acercarme hacia Aaron de nuevo.

–Entonces Pirce, al parecer te atenderé lo que queda de noche- alzo una ceja y el sonríe pero esta sonrisa no es burlona, esta sonrisa trasmite algo más, algo que me pone los pelos de punta.

-Es un gusto recibir tu atención esta noche Hada.

-¿Por que tan esperanzado?- pregunto mirándolo de lado.

-"Tengo esperanza o podría no vivir" - Sonrío y el hace lo mismo.

Con esas simples palabras escritas por "H.G Wells" me dio a entender tantas cosas aunque no fueran confirmadas. Ese verso significa mucho y nada a la vez.

–Me alegro de que hayas leído una novela tan famosa como lo es "La isla del doctor Moreau", cada vez me caes un poco mejor Pirce- me cruzo de brazos y este apoya los suyos en la barra mirándome fijamente para luego lamerse los labios.

–Es un buen verso además no pensé que leyeras algo así- Alza su ceja dudoso

–Lo leí hace mucho tiempo, es todo lo que diré- alzo los hombros y de reojo veo como Eliza nos mira ¿Como pude olvidar que estaba allí?. Me regaño mentalmente y carraspeo la garganta.

–Bueno Pirce iré a tu mesa en unos instantes con los tragos y lo demás- anuncio y saco la lista de tragos que dejo mi jefe exclusivamente para ellos.




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