Dylan
los tres salimos de la sala con nuestros uniformes que eran un pantalón negro y una falda de cuadros morada en el casi de Elara, una camisa blanca de mangas una corbata morada una túnica negra por fuera y morada por la parte de adentro. Enganchada en los hombros.
Este año todos los estudiantes presenciaríamos la selección, normalmente solo lo hacen los de último año, pero por los invitados hoy lo haríamos.
Estábamos concentrado en nuestra que conversación que no nos dimos cuenta de las personas que teníamos enfrente y eran las que menos me quería encontrar.
-Vaya miren quien está aquí, el mundano, una Vampira y un niño lobo que extraña combinación- hablo uno de los chicos que tenía enfrente, era un poco más alto que Lucian tenía el cabello castaño y ojos azules y era de la casa Phoenix.
-Severide acabamos de llegar no seas tan cansón- Lucian se paró a su altura mirándolo desafiante, y de alguna forma la expresión del castaño se suavizo – Pero qué más da si solo eres un simple conjurador que a duras penas y sabe invocar un vendaval –
-Vaya el lobito está sacando sus garras- respondió en tono de burla -Pero qué más da si ni siquiera puedes transformarte en luna llena – hablo en el mismo tono que él.
-Ay por favor Severide mejor busca oficio – hablo la vampira alcanzando a Lucian – Ya vámonos Lucian.
Y yo aquí atrás.
Si no me muevo no ven
- ¿Qué, ahora te defiende tu novia lobito? – su expresión cambio de una de burla a una molesta.
-Jóvenes ¿qué hacen en medio del pasillo? Deberían de estar en el Gran Salón para la selección- Todos nos giramos para ver a la señora Villin la directora – les agradezco que vallan de inmediato al salón y que no hagan que los demás tengan una imagen mala de esta institución – eso ultimo lo dijo viéndome a mí.
Con una última mirada a los Phoenix nos fuimos al salón lo más rápido para no recibir un regaño.
Cuando llegamos casi todos estaban en el salón, nos sentamos en la tercera fila al lado de unos chicos de las otras escuelas.
-Hola ¿Cómo te llamas? – pregunto un chico que estaba sentado a mi lado. Era de piel oscura, ojos avellana y cabello negro rizado.
-Hola Dylan...Dylan Dagger ¿y tú? – mis amigos se estaban peleando por Merlín sabe que y no estaban prestando atención así que gire para poder hablar mejor con el chico.
-Jared Llewellyn- dijo con una sonrisa que me pareció muy bonita.
-Ese apellido es muy raro ¿de dónde eres? – aun no me acostumbro a los apellidos raros de algunos magos.
-Soy Ingles, pero mi familia es de Gales es una de las familias más importantes del país y una de las más poderosas también- hablo orgulloso, en otra oportunidad me hubiera molestado esa arrogancia, pero en cambio estaba perdido en su sonrisa.
Pasamos un rato hablando o mejor dicho el hablando y yo escuchándolo atentamente bien embobado hasta que siento algo pasar por nuestro frente.
Al levantar la mirada vi la silueta translucida de un drago volar por el salón ¿Qué significa? Que a uno de los nuevos lo seleccionaron en Draconis, el chico que estaba junto a la esfera en el centro de salón estaba encapuchado, no se distinguía muy bien su cara lo único que pude ver eran unas pequeñas escamas en las mejillas. Pero eso no importa mucho después de eso seguimos hablando hasta que termino la selección. Nos despedimos en la puerta para irme a mi sala común y el a las habitaciones de los invitados.
-Bueno nos vemos mañana Dylan que pases buenas noches- sus amigos lo llamaron y se tuvo que ir, pero antes les respondí:
-Igualmente Jared- con eso me fui con mis amigos con una sonrisa boba en la cara y un posible sonrojo ¿Por qué? Ni yo se cuando alcance a los chicos como que también lo notaron.
- ¿Y esa cara? – pregunta Elara cuando llegamos a la cascada.
-Nada...- trato de disimular el color de mi rostro, me paro frente la cascada y recito:
-Confringent aquas, quia transibunt reges- y las aguas se habren como cortinas para dejarnos pasas.
La sala tiene forma de domo y el techo hay una especie de cupula de cristal, el suelo es morado, los muebles son de un morado mas ocuros y los estantes son negros y hay pegasos tallados en las paredes.
-Bueno...¿como se llama el chico con el que hablabas?- pregunto Lucian sentandose en uno de los sofas de la sala.
-Jared Llewellyn- me senté a su izquierda y Ela a su derecha.
-Nunca escuche ese apellido- Ela también se unió a la conversación.
-Es que su familia es de Gales – ambos me miraron sorprendidos.
- ¿Qué? –
..........
Ya paso una semana desde que iniciaron las clases y ya me quiero ir de vacaciones otra vez
¿Porque las clases de historia son tan aburridas? La profesora Ophelia Ravenscroft me cea bien pero su materia es muy aburrida.
Pero por una sola vez en la vida me esforcé por prestar atención a la clase, tal vez me sirva de algo.
-...la Academy Luminix lleva existiendo desde hace mas de dos siglos y fue fundada por la penúltima hija de las estrellas registrada en el mundo- nuca había escuchado la historia de la escuela y sabrá Merlín que es un hijo de las estrellas.
-Profesora ¿ya no existen hijos de las estrellas? – pregunto una chica del fondo.
-Los hijos de las estrellas no son muy comunes y nacen cada cierto tiempo la única forma de que haya dos hijos de las estrellas es que uno sea hijo del otro- la voz de la profesora trasmitía mucha paz, debe ser por eso que me da sueño en su clase.
- ¿Dijo que era la penúltima y la última cual fue? - esta vez la que pregunto fue Elara.
-la última, recuerdo que estudio en mi año, pero sus poderes se manifestaron años después de graduarse, no fue hasta que su nombre salió en las noticias que la reconocí- la profesora no debería de pasar de los cincuenta años y se veía muy joven, aunque eso es porque los magos envejecemos más lentos.
Editado: 08.11.2024