Nick hace que me siente en la cama y llama a Charles gritando fuertemente. Éste llegó rápido y al ver la situación, se acerca a mí y toma mis fuertes brazos. Nicholas me dice que me tranquilice y que aguante lo más posible, luego le pide a Charles que me lleve al refugio rápido mientras él saca las cosas que necesita para traer esta bebé al mundo.
Charles llama a William a gritos y entre los dos me toman y me llevan rápidamente hasta el refugio, seguidos por Jack, quién se ve asustado y Lucy que al parecer es la más tranquila de todos en ese minuto. La radio anuncia que los soldados se están acercando a la zona del bosque y William corre a la casa en busca de Nick, quién sigue dentro sacando las cosas necesarias, pero no tardan en llegar.
El dolor se intensifica cada vez que vuelve y se está poniendo casi insoportable, pero lo suficiente como para que pueda mantener la calma por ahora. Me recuesto en la tierra completamente mojada y apoyo mi cabeza en el regazo de Jack, quién cariñosamente me acaricia el cabello para que me tranquilice un poco. Nick toma mi mano y me dice que esté tranquila, que todo estará bien.
La radio nos informa que los soldados entraron a la zona del bosque. Eso significa que ya deben estar muy cerca. Las contracciones son cada vez más fuertes e intento respirar cada vez que una llegue, pero me veo obligada a llevar mi mano a la boca para no gritar con el punzante y abrasante dolor de la contracción que nuevamente está comenzando. Esto va a ser difícil si es que los soldados tardan en irse. La contracción se detiene el dolor disminuye, pero no desaparece por completo. Escucho a lo lejos los soldados llegar en el auto de manera estrepitosa como siempre y la radio confirma que llegaron a la casa. De una manera muy ruidosa se bajan de su vehículo y un par entra a la casa mientras otro par revisa la entrada y el jardín de la casa cuidadosamente.
Otra contracción comienza a aparecer de una manera tan intensa que me hace gemir fuertemente por el dolor y retorcerme en el lugar. Jack comienza a llorar desesperado y es necesario alejarlo un poco del lugar para que se calme.
Tenía que entrar en trabajo de parto justo hoy, no podía ser ayer o mañana, tiene que ser justamente hoy, la única fecha del mes que tenemos que guardar excesivo cuidado.
Cada vez que el dolor reaparece, lo hace de manera intensa y dolorosa, dudo haber sentido este dolor alguna vez en mi completa vida. Un pequeño grito involuntario sale de mi boca cuando la contracción aparece, haciendo que tome tierra con mis manos, clavando mis dedos en el suelo con tanta fuerza que rompo mis uñas. Uno de los soldados mira en nuestra dirección y los chicos toman sus armas y las cargan mientras el soldado camina en nuestra dirección.
Charles, Lucy y William se ponen de pie y se dividen para proteger el área así que Lucy se queda en frente de nosotros mientras que Charles y William avanzan para evitar que los soldados lleguen hasta acá. Nick por mientas revisa entre mis piernas y me dice que puje una y otra vez, cosa que hago con un dolor inimaginable, desgarrador e intentando no emitir gritos, pero me es casi imposible.
En la radio se escucha a los soldados informar unos ruidos extraños en el bosque y la patrulla se dirige hasta acá, haciendo que la tensión aumente.
- Tranquila, mi amor -. Me tranquiliza Nick sin sacar su vista de entre mis piernas. - Ya casi está, solo una vez más -. Dice y pujo una vez más con todas mis fuerzas.
Jack limpia el sudor de mi rostro con una toalla y el dolor disminuye, dejándose escuchar el llanto de un bebé.
- Ya está, Emma -. Dice Jack mientras le extiende las tijeras y toallas a Nick.
- Es un niño, Emma -. Dice Nick y pone al bebé en mis brazos. – Primero de Noviembre. Hemos tenido un varón.
Lo observo detenidamente y sonrío al verlo tranquilo entre mis brazos.
Mi tranquilidad se ve interrumpida por múltiples disparos que se oyen desde el jardín y hacen eco entre los árboles del bosque. Nick toma su arma y se la extiende a Jack, diciéndole que solo en caso de necesitarla la use mientras él iba en socorro de los chicos. Se pone de pie y besa la frente del bebé y luego la mía para luego cargar la escopeta y correr hacia el jardín y dejarnos solos y en pánico.
Más disparos se escuchan aún más cerca y Jack se pone de pie con el arma en sus manos. Pasos se escuchan acercarse y Jack levanta el arma apuntando hacia dónde viene el ruido, pero entonces, de entres los arbustos, llega William arrastrando el cuerpo de Charles, quién jadea con la mano en su pecho. Al enfocar la vista veo que tiene la mano cubierta de sangre y bajo ella, un disparo. William lo deja a mi lado y vuelve a correr hacia donde se escuchan los disparos.
Me acerco dolorosamente a Charles y con el alma partida en dos, sujeto su mano con fuerza mientras le digo que todo va a estar bien y que tiene que mantener los ojos bien abiertos, pero él lentamente comienza a cerrarlos. Entro en pánico y lo sacudo suavemente, mientras lloro fuertemente, logrando que abra los ojos nuevamente y con dificultad. Con el corazón en la boca e intentando mantener la calma, tomo la cabeza de Charles y la dejo reposar sobre mi regazo mientras que su cuerpo, desfallecido, hace que su mano de deslice desde su pecho y caída al suelo. Con Charles aún consciente sobre mí, pongo mi mano libre sobre su herida, presionándola con fuerza para hacer una especie tapón en esta. Echo mi cabeza hacia atrás y mirando al cielo, sollozo con fuerza pidiendo ayuda a Dios, a mis padres o a cualquiera que se encuentre en el más allá. Rogándole piedad.
De pronto los disparos cesan. Miro a Charles que me observa igual de preocupado. Esto solo puede significar que los soldados mataron a los chicos o los chicos a los soldados. Nuevamente se escuchan pasos acercándose rápidamente y Jack levanta sus brazos temblantes con un arma y apunta hacia el lugar de donde vienen los pasos, pero afortunadamente, son los chicos que vienen algo salpicados de sangre. Lucy corre hasta Charles dejando espacio para que Nick lo revise. El castaño llega corriendo y se acerca a Charles, se agacha para estar a su altura, toma mi mano que cubre la herida y la hace a un lado. Una expresión de preocupación se expresa en su rostro. Esto es grave y está muy mal. Nicholas lleva ambas manos a la herida de Charles y hace presión en ésta para que no siga perdiendo sangre, pero su esfuerzo es en vano y Charles pierde la conciencia completamente sobre mi regazo.