—¿Seguirás ese camino? —dijo Massimo sin siquiera darme oportunidad de explicar aquel escenario, mientras daba la espalda y caminaba hacia otra parte de la casa
—No tengo otra opción lo dejare en cuanto mi ser se sienta satisfecho y luego seguiré otro sendero—dije sin emoción alguna mientras dejaba el arma en la mesa mirando hacia el suelo
— ¿Y si para ese entonces ya es demasiado tarde Leonardo?- Una vez das el primer paso no hay otro camino, solo podrás crear uno falso, intentando olvidar lo que has hecho—Dijo el volteando hacia mí y mirándome triste como siempre
No quise responder, yo ya savia mi destino, solo quiero que el viva lo mejor posible, sin tantos desprecios ni problemas.
Desde que nuestros padres fueron asesinados, nadie en toda Matera nos trata bien.
Mudarnos a otra parte no es opción, todavía no hemos pagado la deuda que nos heredaron mamá y papá, cada día aumenta mas los intereses y solo nos perseguirían para matarnos los Caruso
Aquella familia que se avía vuelto muy poderosa tan rápido que tan solo parecieron unos instantes, nadie está contento con eso por que son unos tiranos que extorsionan a la gente, roban y violan el código de todo mafioso italiano "no tocar ni a las mujeres ni a los niños".
Pero nadie puede hacer nada tienen demasiadas armas y hombres a su disposición, ni siquiera la policía quiere intentar algo, es triste e insoportable algo que nadie puede cambiar, y yo estoy dispuesto a cambiarlo todo, las razones sobran, por mis padres, por mi pueblo, por mi hermano, por Sabina, por ponerle fin a su reinado repleto de miedo y sin paz alguna.
— No te incumbe lo que hago o are - dije aun concentrado en mis pensamientos mientras me levantaba y guardaba el arma en mi mochila
— ¡Soy tu hermano y lo único que te queda no recuerdas a Leonardo¡- dijo con la voz cortada gritando y apunto de llorar
— Yo no elegí esto Massimo, la culpa fue de ellos por no tomar buenas decisiones con la familia- dije distante mientras lo miraba y sacaba un cigarrillo
— No hables así de ellos, estoy seguro que hicieron hasta lo imposible nosotros estuviéramos bien, y sacrificaron sus vidas porque así sucediera- Dijo arrebatándome el cigarrillo y rompiéndolo, me miro soltó una lagrima dio media vuelta y salió corriendo por las escaleras hacia su habitación
— Espera- dije sin recibir respuesta
— No tengo tiempo para esto- me dije a mi mismo, sacando otro cigarrillo mientras tomaba mis cosas y caminaba a la salida.
Massimo fue el mas afectado tras la muerte de nuestros padres, yo no tuve tiempo de llorarles tuve que empezar a trabajar e intentar sacarnos adelante, también me dolió pero en estas situaciones no es adecuado lamentarse soy el ultimo pilar en pie.
Luego de mirar la foto familiar en uno de los estantes de la casa encendí aquel tabaco, tome las llaves de la casa y me dirigí hacia la casa de Sabina.
Ella me daría nueva información para el siguiente objetivo, Sabina era mi espía entre los Caruso se avía convertida en amante de aquel hombre que yo odiaba tanto y tenia la costumbre de siempre contarle su siguiente paso a Sabina.
En cuanto llegué me abrió y me recibió con uno de sus besos, esos besos de los cuales me volví adicto, desde el primero en aquel balcón en Venecia, compartimos los mismos objetivos aunque por diferentes motivos.
Ella fue violada y usada para prostitución, yo la salve y se unió a mi volviéndose mi espía para exterminar poco a poco a todos los Caruso.
— Buongiorno vita mía- dije alegre al verla entrando a la casa.
— buenos días mi amor- dijo al abrir con esa voz seductora que nadie podría hacer igual que ella, mirándome y caminando frente a mí.
— Como ha estado- dije sentándome en el sofá.
— Como siempre, nada cambia- dijo sin ánimos yendo hacia el comedor
— Y tu como estas- dijo mirándome, dejando lo que hacia
— Siento que voy a perder el interés en esto, eso me asusta y me frustra ya que no quiero esta vida para nadie, ni para ti ni para mi hermano ni para toda esta gente que ha depositado su confianza en mí... en nosotros - dije inclinándome hacia enfrente recargando mis codos en mis rodillas y agarrando mi cabeza con desesperación
Ella se acercó a mi, levanto mi cabeza y mirándome a los ojos, me dio un beso y mi llanto broto, me levante y la abrase. Con ella es con la única que puedo demostrar lo que siento, es única e irremplazable, recargar mi cabeza en su hombro blanco y frio, su cabello olía a lavanda, como siempre de un color rojizo como el amanecer, ella siempre sabe como tranquilizarme,
—Gracias por estar para mi siempre aunque este tonto se aleje sin alguna razón- le dije mientras ella secaba mis lagrimas
— No agradezcas sabes que siempre estaré para ti, así como tu para mi, aunque no tantas veces como yo, se que es por tus razones respeto eso, no siempre la vida es buena solo quiero que sepas que cuentas con migo- dijo dándome la mano para que la siguiera a la mesa
— Tengo que hacerlo, eres mi escapatoria para este mundo enfermo, oscuro e inmerso entre sombras- le dije tomando su mano y levantándome para seguirla
Luego de eso nos sentamos a comer, una copa de vino, pan y queso.
Cualquiera diría que no es para tanto pero en compañía de ella cualquier comida es la mejor de todas, luego nos sentamos en el sofá para que me diera la información
— Su próxima reunión será en la casa del chef Guido, estarán Adriano, Fabrizio, Alessandro y el anfitrión antes mencionado, tendrán el dinero recaudado de las tiendas en todo el pueblo, no habrá mucha seguridad, pensarán ser discretos estarán ahí a las 8:00 pm
— Perfecto me dar tiempo de comprar algo para no llegar manos con las vacías y vestirme para la ocasión -Dije sarcásticamente Luego de eso me despedí y salí de la casa un poco triste y pensativo por lo sucedido pero alegre, ya que se que personas están a mi lado y no me fallaran