Capítulo 2

Viernes, 4 de Febrero por la noche.

La alarma de incendio solo resultó ser una falsa alarma, alguien pensó que sería gracioso ver como todo el instituto entraba en pánico, hasta el director Mcgregor salió corriendo de su oficina gritándole a todos los alumnos que salieran rápido y de forma ordenada sin perder la calma, lo cual no era muy ético de su parte cuando el parecía un avestruz asustado corriendo de un lado a otro.En fin, el director anunció que buscarán al responsable para aplicarle un castigo severo.

Al final encontré a Alice afuera del instituto pero cuando iba a acercarme para preguntarle dónde había estado sus padres llegaron a buscarla y se fue.  Así que no tuve oportunidad de hablar con ella.

Brooke y yo estamos esperando a West al frente de su camioneta para podernos ir a casa. Ella sigue hablando de la alarma de incendio y de lo horrible que fue esa situación, pero soy incapaz de seguir escuchandola, me es imposible dejar de pensar en esa llamada y de lo raro que fue.

¿Qué quería decir con eso de que es el comienzo? Y ¿Por que  guardaría un teléfono prepago en mi casillero? 

Todo esto se me hace muy raro, en primer lugar porque primero fue la alarma, después Alice no aparece y por último esa llamada. Trato de encontrar una respuesta lógica pero no le encuentro sentido, lo más probable es que haya sido una broma también, pero había algo en las palabras de ese sujeto que no me deja tranquila, me preocupa.

Me sobresalto al sentir que alguien coloca una mano sobre mi pierna, y hasta ahora soy consciente de que estaba moviendola con nerviosismo.

—Hey.—levanto la vista y me encuentro con la mirada preocupada de West—¿Estás bien?

Me conoce lo suficiente, no le puedo mentir.

—No, no lo estoy—digo con sinceridad.

Se acerca y me envuelve entre sus brazos, paso mis brazos por detrás de su espalda y me aferro a él, cierro los ojos y no se cuánto tiempo pasa cuando los abro y veo a Ethan pasar en su moto, sus ojos azules encuentran los míos por un instante y desaparece de mi vista. Me alejo de West y me subo a su camioneta del lado del copiloto, Brooke me imita sentándose en el asiento de atrás.

Cuando ya estamos todos adentro, West enciende el motor y nos ponemos en marcha. Una vez fuera del estacionamiento del instituto Brooke rompe el silencio.

—¿Ahora sí nos vas a contar qué es lo que te pasa?— alzo la mirada al retrovisor y veo como encarna una ceja cuando nota que la estoy viendo, suelto un suspiro y comienzo a contarles todo con lujo de detalle.

Les cuento desde entre a buscar a Alice y no estaba por ningún lado, al igual de esa extraña llamada y todo lo que dijo ese hombre.

Cuando termino de hablar espero impaciente sus respuestas pero no llegan de inmediato, imagino que están procesando todo lo que les acabo de decir.

—Esto parece sacado de uno de esos thriller antiguos que ves.— habla finalmente Brooke, alzo la vista y veo que tiene el ceño fruncido.

—Sí, es extraño —añade West sin apartar la vista de la carretera.

—Y no he podido dejar de pensar en eso desde que sucedió. — apoyo la cabeza en el asiento y suelto un suspiro —¿ a qué se refería con eso del "comienzo"?

—Tal vez al comienzo de las bromas — acota  la castaña.

No había pensado en esa posibilidad, ya me había creado muchas teorías conspirativas en mi cabeza al mejor estilo de Invetigation Discovery, pero creo que esa es la respuesta más lógica ya que justamente eso paso después de la falsa alarma de incendio.

— Creo que tienes razón. — admito , ya tranquila de saber que no mataran a alguien o algo.

—La tiene — West se voltea a verme cuando paramos en un semáforo en rojo. — No le des más vueltas al asunto Mack, alguien quería jugarte una mala broma para asustarte, no les des el gusto. — me guiña un ojo y vuelve la vista al frente para conducir. — No creo que vayan a matar a nadie —bromea, y me es imposible no soltar una risita.

Y después de eso dejo de darle vueltas al asunto.

Después de que West me dejara en mi casa me dedique en hacer mi tarea toda la tarde ya que no tuve entrenamiento, así que ahora miro con detenimiento el lienzo que tengo delante de mi, buscando algún indicio de qué podría pintar. Después de unos minutos comienzo a lanzar pinceladas sobre el y sin darme cuenta pasan dos horas, guardo las pinturas y limpio los pinceles antes de tomar una ducha para después alistarme.

Una vez lista me acerco al espejo para aplicarme brillo labial cuando alguien toca la puerta, digo un adelante y mi hermana aparece en mi campo de visión.

—Uhhh, vas muy bien arreglaga — musita Em mientras se sienta en la cama.

Ya se por donde va esto.

Mi hermana siempre ha pensado que West esta enamorado de mí y que posiblemente yo también lo este de el, y no ha habido forma de hacerla entrar en razón, yo veo a West como un miembro más de mi familia, es como mi hermano. Y a pesar de que el ha traído a sus novias a las reuniones familiares mi hermana sigue pensando lo mismo.

" Es una cortina", dice.

—Em... — le digo en modo de advertencia para que no siga, levanta sus manos inocente y no dice más nada al respecto.

— solo vine a traerte esto — me volteo a verla directamente y no por el espejo como lo estaba haciendo, frunzo el ceño.

—¿Gas pimienta? — esto tiene que ser una broma. — fue idea de papá, ¿cierto? — pregunto, aunque claramente ya me se a respuesta.

—No, fue mía — admite.

—Me tienes que estar jodiendo Emily —espeto con molestia.

—Mack, tengo una extraña sensación en el pecho y me sentiría más tranquila si te llevas esto. —me tiende el pequeño aerosol, lo miro por unos segundos dudosa pero al final lo termino tomando— Gracias.

Algo que he aprendido es a tener que aguantar las supersticiones de Emily, mi hermana siempre ha sido de esas personas que creen en las supersticiones, la alineación de las estrellas y los chakras, se la pasa haciendo yoga y meditando, sin mencionar que su habitación siempre huela a incienso , tiene ese aire de...¿hippie?