Desde hace tiempo se ha dicho que estamos destinados a encontrar a nuestra alma gemela, aquella que nos complementa y entiende a la perfección. A veces nos toca alguien con la misma personalidad y los mismos gustos, otras veces resulta ser una persona totalmente opuesta a nosotros.
Amaris y Duncan son almas perdidas en la sociedad actual con deseos y pensamientos que pocos entienden. Nunca se sintieron cómodos o aceptados en los espacios que los rodeaban, no les gustaba socializar y mucho menos ir a fiestas o salir con amigos, prefieren el estilo de vida más tranquilo y solitario.
A pesar de no haber cruzado palabra jamás ni haber expresado sus gustos y pensamientos con el otro, ambos chicos tenían algo en común, creían que habían nacido en la generación equivocada.
Este es "el destino de las almas viejas" que pronto unirán sus caminos.