¿Comienzo? No, mucho antes.

25 de Julio del 2012

-Profesor, ¿Porque no podemos salir? Hace 15 minutos terminó la clase-Pregunte impaciente.

-Hay un estudiante en la azotea, los bomberos y la policía están haciendo un trato con el para que bajé. Así que por lo tanto hasta que ese estudiante no baje no podremos irnos-Respondió mientras seguía copiando en la pizarra.

Los demás alumnos se quejaron e hicieron comentarios estúpidos sobre el chico. 

-No se quejen, yo estoy desde antes que ustedes-Dijo el Profesor con una expresión seria.

-¿Puedo ir al baño?-Dije.

No espere a que respondiera el Profesor y salí en camino a la azotea.

Al llegar vi que un policía estaba convenciendo al chico para que bajara, pero este se negaba a hacerlo. Así que ignore al policía, busque una silla para poder subirme a la orilla y sentarme junto a el. 

-Hey pedazo de imbécil, por tu culpa no puedo irme a casa, correción nadie puede irse.

-Ah hola, estoy bien gracias por preguntar-Respondio el con una sonrisa falsa.

Yo solo volteé los ojos.

-¿Porque estás aquí? ¿Te quieres suicidar? ¿Acaso tu novia te dejo?

-Solo estoy tomando aire fresco, y para que sepas no tengo novia-Dijo para luego inhalar y exhalar.

-Por el amor a Dios bajate de una vez, me quiero ir imbécil-Respondí al borde mi paciencia.

Juro que si no se baja lo empujare.

-Me gusta el fútbol, pero gracias a un accidente se jodió mi sueño-Dijo el chico con un tono de tristeza.

-¿Que ocurrió?-Pregunte-Y el solo se limito a mirarme.

-¿Que? Soy chismosa, si vas a contar algo dilo completo-Dije al mismo tiempo que encogí mis hombros.

-Accidente de auto, y me fracture la rodilla así que no puedo correr mucho, aunque más rápido que una persona de tercera edad si.

En ese momento ambos nos miramos y reímos, entonces nos levantamos del suelo. 

-Ya me siento mejor, supongo que gracias por escucharme.

Sisi a la chingada, me quiero ir.

Entonces me asome, mire hacia abajo e hice algo un poco loco.

Asi es amigos, lo empujé, empujé al chico que por su culpa no pude irme temprano a casa. Veía todo en cámara lenta, como el chico caía hacia el colchón de rescate.

Y así fue como luego el policía me colocó las esposas y bajamos hacia donde se encontraba el chico. Afortunadamente el chico estaba bien o eso parecía.

-Por favor dile que me suelte, no quería matarte sabía que caerías en el colchón-Dije en dirección al chico.

-Mmm lo consideraré solo si aceptas ser mi novia.

Que, ¿Está loco? Creo que la caída le afecto un poco. 

-¿Te sientes bien? ¿No te golpeaste la cabeza?-Dije y tocaba su frente para ver si tenía fiebre.

-Estoy bien, y estaba bromeando. Señor oficial por favor sueltenla-Dijo el chico al oficial.

Entonces el oficial me quitó las esposas, caminé en busca de mi mochila para irme a mi casa. Estaba apunto de irme cuando el chico dijo:

-Oye, no me dijiste tu nombre.

-Soy Emma Jones ¿Y tú?

- John Williams.

-Supongo que un gusto en conocerte, adiós.

Y así fue el comienzo no, mucho antes de eso. Antes de lo que sería el infierno.

Nota:

Esta será una historia corta.