Dramática.

Sin ánimos de nada es la frase que más me describe en estos momentos.

Mi teléfono estaba sonando, era una llamada. Contesté sin ver quien era.

- ¿Sí!!!? -Hablé de la manera más enojada posible, no quería atender a nadie.

-Al parecer te hablé en mal momento. -Responde Tony.

- ¡Tony! Lo siento, no he tenido un buen día, perdón por haberte hablado así.

-No te preocupes, ¿estás bien?

-Si, ¿Por qué la pregunta?

-Es que no te oyes tan bien, ¿estás enferma?

-Estoy bien de salud Tony, gracias por preguntarlo.

-Me habías preocupado, quería saber como está mi cita de esta noche y si no me vas a dejar plantado.

¡Demonios! Hoy es la cita.

-Ohh… me encuentro bien, tranquilo que estaré. - Digo mientras elimino la cita que tendría mañana con Adrián.

-No tienes idea cuanto me gusta oír eso. He esperado este día todas las semanas.

-Ay si, también yo. -Digo con sarcasmo el cuál él no comprendió.

- ¿es enserio? Wow, ya somos dos.

-Te veo luego, Adiós.

-Skyler, ¿quieres que sea yo quien te vaya a traer?

-Yo puedo sola, gracias.

-Okey…

Colgué la llamada por sentir demasiada presión en mis pensamientos.

Veía más como amigo a Tony que como algo más. Si el me iba a ayudar a olvidar a Adrián fácilmente prefería que no fuera de la manera en dónde acabaría sintiendo algo por él.

Me devoré un libro que me habían puesto como tarea leer. Contaba con la gran ventaja que todas las tareas las hacía de una vez para que después ya no tuviera que posponer planes por dejarlas de último. Quería tener mi mente lo más ocupada posible. Me arreglé y mientras me estaba maquillando mi abuela me llamó.

-Hola mi amor, ¿qué haces?

-Hola abue, aquí estoy arreglándome, tendré una cita con aquel chavo que te conté.

-Skyler, ¿andas bien? -Admiro la capacidad que tienen las personas más cercanas a mí para intuir perfectamente cuando no ando bien.

-Si.

-No mientas cariño, no te oyes así.

-Adrián, ¿te acuerdas de él?

-Si, perfectamente.

-Ya tiene novia, y esa no soy yo. Tanto que lo quería.

-Amor, llora todo lo que quieras, si crees que es necesario derramar 500 lágrimas por todo esto que te pasó, hazlo, desahógate conmigo que para eso estoy. -Ya perdí la cuenta de el número de razón por las que no le guardo ningún secreto a mi abuela y porqué siempre acudo primero a ella. No hay nada más lindo que una persona no te juzgue porque estar llorando, o por contarle tus cosas personales.

-Abue, yo lo quería. Había hecho tantas cosas por él, pero no fueron suficientes.

- ¿Cómo cuáles? -Sentí que se preocupó por la manera en que la oí preguntarlo.

-Darle mi tiempo, ser mejor de lo que sería con otra persona, cambiar mi forma de ser.

-Amor, no fuerces las cosas. Siempre te he dicho que si fuerzas mucho las cosas pararán rompiéndose.

-Pero nunca lo obligué a amarme. No creo que haya forzado nada.

-Pero cambiaste tu forma de ser por él, amor, si vas a cambiar todo de ti pues estás perdiendo tu tiempo. Si hubieras conseguido que él se fijara en ti entonces se hubiera enamorado de quien tú fingiste ser, no de tu verdadera personalidad. No tienes que cambiar tu forma de ser si eres totalmente bella. Con eso estás forzando muchas cosas.

- Abue, mi personalidad era la menos adecuada para enamorarlo, prefirió irse con la más bonita.

- ¡Skyler Smith!

-No, me llames así. -Ya se enojó. Se dirige hacia mi con mi nombre y mi apellido cuando está por explotar.

-Tú no eres fea, eres una niña preciosa y quien no mire eso es un tonto.

-Lo dices porque eres mi abuela.

-Si, pero no miento.

-La única razón por la que lo pienses tú y los demás tal vez sea porque adelgacé.

-No, podrías tener malos hábitos, pero aun así nunca fuiste fea. Tu figura o tu ropa no te define por completo, lo que te define es tu personalidad, tu forma de tratar a los demás sin tener que ver el que quieras agradar a todo mundo.

-Eso no lo piensan los demás.

-Tú transmites tu alegría con tu sonrisa, dime quien no se va a quedar tan imbécil cuando tiene a una chava totalmente divertida y agradable como tú. Y tu negocio está enfocado a que las personas vean más allá del físico. No me decepciones si después de los quinientos y algo de clientes que has tenido no te has puesto a pensar eso. Quien no te quiera más que por tu físico se jode, pero te beneficia a no estar con alguien que te puede cambiar al ver otro maniquí.

-Gracias abue.

- ¿Irás con el chico a la cita de hoy?

-No quiero ir, estoy pensando en cancelarle la cit…

-No hagas eso, sal y diviértete. Pasa el momento con alguien que te ayude a distraerte. Por lo que me contaste el chico es agradable.

-Pero es que a mí no me gusta para algo más.

-Entonces sal con él como amiga.

-Tienes razón. Saldré con él como amiga y trataré de animarme un poco más.

-No dejes que nadie te haga tu autoestima mierda.

-Extrañaba tu mal vocabulario. Me ayuda a pensar que con quien estoy hablando no me hace sentir tan desconfiada.

-Ay no, no quería decir ninguna, ya estaba en que no las volvería a decir.

-Jaja gracias abuela, te amo.

-Yo también te amo Sky, ahora levanta ese trasero y ve a brillar por ti misma.

-Jaja esta bien. Adiós.

-Adiós amor diviértete y siempre ten cuidado.

-Okey.

-Oye, oye, antes de colgarme, no te suplico que, si te topas con Rick, te alejes de él.

-Ayy abuela, ya olvídalo. Él ya no provoca ningún tipo de emociones por mí.

-Es que no se me olvida ese muchacho, jamás me agradó y no está de más acordarte que si te lo digo es porque me dijiste que Tony era al parecer muy amigo de él.

-Okey, te haré caso. Te hablo después.

Fin de la llamada.