Ya ha comenzado

Calibius acarició la piel de Aldana, tantas veces que había soñado con acariciar aquella piel mientras la hacía suya que aún no se la creía. Mientras ella solo sentía aquellas caricias pero no le hacían sentir nada

—Ahora estaremos juntos —le hizo saber Calibius —, nada podrá separarnos

Ella se levanto acariciando el pecho de Calibius

—Deberías reclamar tu reino —apoyo su cabeza en aquel pecho —, por derecho te pertenece el reino demoníaco

—Ahora es Baltasar el rey —la abrazo —, no necesitamos eso para ser felices

—Piénsalo mi amor —hizo que lo mirara directamente a los ojos —, tu serías un mejor rey y conmigo a tu lado siendo tu reina seria perfecto

Tras esas palabras volvió a besarlo mientras lo atraía hacia ella para volverse a entregar a la pasión

Los años fueron pasado mientras Morgana hacía entrenar a Reluminium en las artes de la magia y el combate, Aldana reunía el ejército que necesitaba aquellos humanos débiles llenos de odio y avaricia concediendo sus deseos a cambio de su voluntad. Orcos había estado vigilando la pensando que ella no se había dado cuenta solo esperaba que su propio padre no la traicionará, pero para él solo le importa saldar aquella deuda que no le dejaba estar en pasa. Cuando el plazo de 7 años había pasado Reluminium ya se había convertido en un hombre, sabiendo que sería pronto el próximo rey aún que no se imaginaba a que precio

Ajusto sus carcaj* en su espalda antes de colocar su capa estaba apunto de partir a las tierras del clan vampiro para formar una alianza. En eso su madre apareció en la habitación

—¿Estas listo? —el asintió para luego colocar las manos sobre el rostro de su hijo —, te quiero. Tu padre y yo te amamos mucho

—Lo se madre —tomo sus manos para besar las —, ¿Pasa algo?

Pregunto al observar el semblante serio pero triste de su madre, pero ella solo sonrió forzadamente mientras negaba

—Solo estoy observando lo mucho que has crecido —lo abrazo —, sigue creciendo y no olvides jamás quien eres   no importa lo que posee

Se separó mirándolo a los ojos con sosteniendo sus brazos

—No importa lo que pase —le recalco —, jamás olvides lo que te hemos enseñado

—Lo se madre —le dio un beso en la frente —, ahora si me voy o llegaré tarde

Ella asintió sintiendo un nudo en la garganta, una vez que él desaprensivo las lágrimas salieron sin parara era la última vez que vería a su hijo. Miro aquella habitación atesorando aquellos recuerdos cuando sintió los brazos de su esposo

—Hay que ser fuertes mi reina —ella asintió con los ojos cerrados apretando sus labios en una fina línea —. Es tiempo de afrontar el destino

Los dos salieron al patio observando a toda la guardia preparándose para la batalla, mientras Baltasar detallaba las estrategias una mariposa voló cerca de Morgana susurrandole al oído. Las mariposas eran la forma más comunes de los hechiceros para comunicarse. Le dio una última mirada a su esposo antes de desaparecer, cuando vio a su tío parado hay alado de aquel manantial sin dudar se acerco

—No pude detenerla, es muy poderosa, tienes que tener cuidado ella no descansará hasta destruirte y apoderarse de tu cuerpo, cuida a Reluminiun, también ira atrás de el, quiere matarlo antes de que tenga todos sus poderes. No confíes en la gente que está a tu alrededor, recuerda que ella pude tener aliados muy cerca de ti

—Ya se quien es su aliado —lo miro —, algo más  que quieras decirme

—He visto a tu madre

Ella desvió la vista hacia el manantial

—Ella siempre hablo de ti —le hizo saber —, nos hablaba de aquel hermano que tenía al cual amaba con toda su alma. Ella jamás hizo que yo te odiara o a mi abuelo, pero aún así acabaste con ella

—Yo también amaba a tu madre era mi hermana, la única que en verdad me quería —derramo aquellas lágrimas, las primeras en su vida —, yo le enseñé todo lo que sabía... yo... amaba enseñarle cada cosa que ella me pedía. Pero mi madre me envenenó el ama contra ella haciendo que la odiar y me alejara de ella. Cuando pasaban los años y ella siempre era mejor que yo no lo soporté así que huí pero ella se dio cuenta sin importarle nada me sigo, cuando fui emboscado por hombres del clan de las hadas. Acabe con ellos pero apareció el príncipe amenazando me con una espada, iba a matarme por asesina a sus hombres pero yo fui más ágil desarmando; cuando estaba apunto de matarlo ella aprecio deteniéndo me. Lo llevé hasta las mazmorras de nuestros reino para ejecutarlo

El solo soltó una pequeña risa antes de negar mientras ella escuchaba atentamente

—Pero ella abogó por él y lo libero, me sentí traicionado la persona que más amaba había liberado a quien intentó asesinar me. Fue hay que resonaron las palabras de mi madre, le pedí a mi padre que la matara pero solo la exilió

—Entonces decidiste enviar unos asesinos para matarla —lo miro a los ojos

—Si —afirmó —, pero no conte con que ella los asesinara. El resto ya lo sabes, conoció a tu padre y te tuvo

—Ella ha hablado conmigo —le dio la espalda —, sabe que no fue tu culpa. Pero yo no lo creo, por que puede que tu madre haya dicho tanto para perjudicar a mi madre pero fue tu mano y tus pensamientos los que actuaron por que en el fondo siempre te sentiste inferior a ella. Y aunque tú madre no hubiera dicho nada, tarde o temprano hubieras hecho de todos modos lo mismo

—¿Jamás me perdonaras? —le pregunto

Pero cuando iba a contestar las aves se alzaron en el cielo cantando al mismo tiempo que el cielo se ponía oscuro, Morgana observo a su tío

—Ya ha comenzado —susurró

En eso Morgana trató de utilizar sus poderes pero él se lo impidió

—Debes de correr y no gastar tu energía

Morgan asintió para luego empezar a correr en dirección al castillo

—Por favor mi amor, resiste —murmuró mientras el miedo la invadió

*carcaj: Es una caja o cilindro de piel, madera y/o tela usada por los arqueros para transportar las flechas,​ permitiéndoles alcanzarlas con facilidad y rapidez.