IV

Asa

Ian y yo salimos de la academia, seguimos a los chicos a escondidas. Cuando llegamos al estacionamiento, logramos ver a Ena muy enfadada. Ivy y Noa estaban en el suelo. Quería salir para ver que sucede pero, Ian me detuvo.

Asa-Ian, debemos ayudarlos!-Susurré.

Ian-Espere...mire.-Señaló, miramos a Ivy arrodillada. Uno de los guardias sujetaban el cabello de Ivy. Levantaron su parche que tenía puesto en su ojo derecho.-La van a castigar...-Sebastián se acercó con ellos y su mano brillo. Empezamos a escuchar gritos de dolor. Me acerqué a Ian, coloqué mi rostro en su pecho. No quería ver la escena. Ian me cubrió para no ver.-Se lo están tomando muy serio. Empezamos escuchar golpes, estaban golpeando a Noa también.

-No entiendo por que me he vuelto tan sensible desde que empezó todo este caos-Pensé.

Ian-Debemos volver, Ena dijo que nos quería ver limpiando los escombros.-Dijo, asentí. Tomé la mano de Ian y nos regresamos a la academia.

Isla

Escuché gritos, abrí mis ojos lentamente. Veía todo borroso, estaba recuperando poco a poco mi vista. Estaba en el suelo boca abajo, veía a Ivy arrodillada sangrando de un ojo y a Noa todo golpeado. Miré la mano de Ena que estaba manchado de sangre, luego miré a Ivy tenía su mano colocado en su ojo derecho. Sangraba demasiado.

Ena-Sabías claramente que la ley de las lunas no se puede traicionar entre si mismos.-Dijo.-Recuerda que la luna mayor puede castigar a sus hermanos si han traicionado.-Añadió. El guardia empujó a Ivy contra el suelo. Con una mano se sostenía y con la otra lo tenía puesto en su ojo derecho.-Llévense a la traidora. Noa y Ivy, están oficialmente expulsados de la Academia y del equipo de misión. Están prohibidos en volver o en acercarse a sus compañeros.

Sentí que me levantaron del suelo, miré de reojo a Ivy a Noa. Ambos se veían heridos. Miré a Kanaye muy desanimado, Sebastián ya no era el mismo tipo que antes, Kinsley tenía un brillo que a todos le alegraba ver pero, desapareció de la nada. Nash y Ena se ven demasiado diferentes, no sé como describirlos. Me subieron al auto, me han puesto cadenas. Veía desde afuera que Ena les lanzó sus armas y se subió al auto.

-El plan esta en marcha.-Aparece aquella voz de nuevo.-Recuerda...mientras te alimentas, más fuerzas tendrás.-Ignoré mi voz.

-Estamos a un paso adelante que ellos, pronto sabrán quien es.-Pensé.

Noa

Abrí mis ojos, todos se habían ido excepto Ivy y yo. Me moví lentamente hacía a Ivy sin importar lo herido que estaba.

Noa-Ivy...-No podía hablar. Ivy no me respondió, solo cubría más su ojo derecho.-Ivy...

Ivy-Lo..lamento-Susurró. Me sorprende que Ivy se disculpara.

Noa-Lamentar que?-Le pregunté.

Ivy-Debiste regresar, saliste lastimado por mi culpa mía.-Dijo. No le respondí, me levanté del suelo y me arrodillé enfrente de Ivy.-Maldita sea! Duele!-Susurró. Guardé silencio por unos momentos, de repente escuché alguien llorar. Miré a Ivy, estaba llorando. Por primera ves, veo a Ivy llorar.-Por que siempre me pasa esto? Por que merezco ser castigada de esta manera? Estoy maldecida? Por qué siempre hago las cosas mal?!

Noa-Ivy...-Dije, Ivy levantó su mirada. Su cabello cubría su ojos, su mano estaba manchado de sangre al igual su uniforme.-Tu no hiciste nada malo. No te culpes...-Dije.

Ivy-Y tu que sabes por lo que he pasado! Dime como sabrás como me siento ahora!-Me corrigió.-Perdí todo lo que tenía, lo hice Ena me hizo recordar el pasado. Tu no sabes que ma ha pasado en el pasado.

Noa-No es necesario que tu me lo digas por que, ya lo sabía desde hace tiempo.-Dije.-Si lo sé, por esa misma razón te respeto y te admiro. Eres fuerte en los momentos mas difíciles. Fuiste valiente en aver salvado la vida de Isla. Hiciste el bien. Isla te protegió de aquel disparo y tu se lo devolviste. Tu demostraste ante mi que eres una Luna. Si me permite decirte que...aun que tu hayas perdido a tu familia, nosotros somos tu familia.-Dije, Ivy me veía con sus ojos llorosos. Bajó su mirada.

Ivy-No soy una criatura como ustedes, no tengo poderes o colmillos para luchar contra el mal-Dijo.

Noa-Pero si tienes armas, tienes un don que tu madre te ha heredado.-Añadí, le entregué su revólver.-Esto lo que ves aquí, es lo que eres y lo que eres capaz de hacer. Tu eres Ivy hija de la Novena Luna. Tu misma te propusiste en convertirte en la Novena Luna gracias a tu hermana. Lo que tu hermana hizo en el pasado, tu lo hiciste como si fueras tu hermana.-Tomé el parche.-Esta guerra aun no acaba, apenas está comenzando y Isla te necesita.-Estreché mi brazo hacía a ella.-Ivy, Isla necesita tu ayuda. Si tu creíste en ella, entonces hazlo por las Lunas, por Isla y por tu hermana.

Ivy me observaba en silencio, solo podía ver sus lagrimas bajar. No tomó su parche, por un buen momento hasta que lo tomó. Se levantó del suelo y se sacudió su uniforme.

Ivy-Gracias Noa, pensé que eras un simple chico que no tenía cerebro.-Sonrió levemente.

Noa-Esa es la Ivy que conozco.-Sonreí. Tomé su revólver, se puso el parche.-Bien y ahora qué?

Ivy-Buscaremos a los enmascarados...