Semana 16. Lunes.
Todos habían dormido regular, ya que sabían que hoy daban las notas. Y a pesar de que todos lo habían hecho bastante bien, los nervios hicieron acto de presencia. Así que David, algo cansado y alterado, se levantó a la hora de siempre y cómo de costumbre, fue a subir la persiana y a abrir la ventana. Sorprendiéndose al instante al ver cómo la luz del sol hacia descubrir que había un montón de cartas encima de la mesa, cuatro ni más ni menos.
– ¿Qué demonios? – David las cogió todas y empezó a leer los destinatarios.
Había una carta del director, probablemente sobre las notas, otra carta de Luna acerca del Club de los secretos y dos cartas más provenientes del ministerio y que iban dirigidas hacia David y Nicole.
– Mmm… Qué extraño – susurró él volviendo a dejarlas todas en la mesa menos la del director, que la abrió y la empezó a leer en su cabeza.
“Buenos días alumnos y alumnas.
Cómo ya sabréis, hoy se procederá a entregaros las notas en vuestras correspondientes clases.
Este año, cómo hemos agilizado el proceso, a las 10:00 se entregaran las notas a los alumnos de tercero. A las 11:00 a los alumnos de segundo. Y a las 12:00 a los alumnos del primer curso.
Por favor, sed puntuales.
El director de la escuela, Robinson.”
No había nada nuevo en aquella carta, así que la dejó de nuevo en la mesa y cogió ahora la de Luna, que claramente la había escrito ella por esa caligrafía tan particular.
“Hoy a las 9:00 de la mañana se procederá a realizarse la última reunión del año del club y a la que se verá obligado la asistencia a todos los miembros.
Cualquiera que no aparezca, será expulsado.
Luna.”
– Genial, siempre tan particular – refunfuñó él viendo cómo la carta se empezaba a desintegrarse entre sus manos.
Y por último y no menos interesante, cogió la extraña carta del ministerio que iba dirigido a él y la empezó a leer.
“Estimado David,
Ha sido convocado cómo testigo para el consejo de emergencia que se declaró anoche, día 20 de diciembre de 2020, para el día 21 de diciembre de 2020 a las 14:00 en los juzgados mágicos.
Se ruega al testigo que por favor acuda con tiempo al lugar en cuestión para evitar retrasos o problemas.
Cualquier duda que tenga el testigo, podrá ser respondido por vuestra tutora legal.
Firmado por el ministerio.”
– ¿Tutora legal? – Se sorprendió David al no entender aquello.
– ¿Ocurre algo, David? Llevas cómo cinco minutos ahí parado – comentó Nicole con la voz ronca.
– ¡Ah! Nicole, tú también tienes una carta – agarró la de ella y se la enseñó.
– ¿Qué? – Nicole se levantó corriendo y se dirigió hacia él.
– Te va a encantar – añadió David dejando la suya en la mesa.
– ¿De qué es? – Quiso saber ella quitándosela de las manos.
– Tú léela – contestó él girándose y dirigiéndose hacia la puerta –. Será mejor que me vaya preparando para este largo día… – Agregó marchándose de la habitación en dirección de los baños compartidos.
Minutos después, en el comedor…
David y Luna eran las únicas personas que estaban en el comedor desayunando por motivos obvios.
– Podías haber hecho la reunión otro día… – Le comentó David dando un sorbo al café.
– ¿¡Y yo qué sabía que teníais el consejo!? – Masculló ella.
– Además, ¿crees qué vendrán todos? – Dudo él –. El día de las notas suele ser el día que más tarde se levantan.
– Pues eso espero, ya que sabes perfectamente que es lo que ocurrirá si no vienen – contestó ella seriamente.
– ¿No crees qué eso sería demasiado cruel? – Preguntó él –. Además, ¿por qué es tan importante ésta última reunión?
– Ya lo verás… – Murmuró ella.
– Eso es algo…
– ¡David! – Jennifer entró corriendo en el comedor.
– ¿Profesora? – Se sorprendió Luna.
– Esto me da mala espina… – Susurró David bebiéndose de golpe lo que le quedaba de café.
– Te he estado buscando por todas partes – Jennifer llegó a ellos, agarró de la mano a David y tiró de él –. Vamos, tenemos que hablar todos.
David no estaba en condiciones de quejarse, así que se dejó llevar y fue guiado por los diferentes pasillos hasta que entraron en una sala al lado del despacho del director.
– ¿Se puede saber que… – David se quedó a medias en cuanto vio a Lucas, Kate, Nicole y Emily. Mirando a ésta última con muy mala cara.
– Ya estáis todos – Jennifer soltó a David y cerró la puerta tras ella –. Seré breve – se puso delante de ellos –. Cómo ya sabréis, habéis sido convocados cómo testigos para el consejo de emergencia. Y mucho de vosotros no tenéis ni idea de que es, así que yo os explicaré todo.
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Editado: 30.03.2022