5 Problemas

2.Morgan

*Imagen de Morgan*

Me encontraba plácidamente en mi etapa de conciliación de sueño, cuando me despierto de un salto. Mierda mi alarma no sonó. Bueno, en realidad si sonó, solo que yo no la escuché. Tomo mi celular que está en mi mesa de noche y lo enciendo.

-Carajo, son las 7:48 – murmuro con voz ronca.

Me destapo y corro al baño. Mientras me quito la ropa, espero que se regule el agua y me integro.

Han pasado unos minutos desde que entré a bañarme y ahora me estoy colocando acondicionador, pero el agua se convierte a fría de un momento a otro, lo que me hace pegar un saltito y correrme a una esquina de la ducha.

Emily.

La última que se baña es Emily, tuvo que ser ella la que acabo el gas. No tengo tiempo para llamar a una de las chicas, así que tendré que recordar mis tiempos de pobreza, cuando no había dinero y solo era agua helada.

Me preparo mentalmente y me pongo bajo el chorro de agua nuevamente, se me hace la piel de gallina al sentir el contacto del líquido frío esparcirse por mi cuerpo. Muevo mis manos lo más rápido que puedo, intentando quitar el acondicionador mientras emito quejidos.

Al terminar, salgo envolviendo una toalla en mi cuerpo y otra en mi blanco cabello. Siento la voz de Lauren desde abajo.

- ¿Morgan podrías apurarte? – por su tono de voz sé que está enojada, así que me invento una excusa para tranquilizarla.

- Ya voy, solo me pongo los zapatos y bajo – digo mientras corro a mi habitación.

Ella siempre cae con esa, aunque se la he dicho miles de veces, siempre confía en que le estoy diciendo la verdad, es una mentira piadosa.

Me voy directamente al closet a escoger mi ropa, la verdad me da igual que ponerme, así que veo unos shorts negros, los tomo, pero el ruido de la puerta me hace tirarlos al suelo.

- ¡Pero que rayos! ¿No te enseñaron a toc... – Lauren me interrumpe mientras sigue parada en la puerta.

- ¿Te das cuenta la hora que es? – su rostro es completamente serio, aunque demuestra confusión en sus ojos.

- ¿Las 07:30? – murmuro. Se que es mucho más tarde, pero decírselo solo empeorará las cosas.

- ¡Son las 08:05! – su grito me hace sobresaltar, pero no respondo. – Morgan, creo que se te olvida que sucede si llegamos tarde.

No, no se me ha olvidado, de tantas veces que nos hemos retrasado, ya tengo grabadas todas las tardes aseando la escuela.

- Lo siento, pero Emily acabó el gas y me tuve que bañar con agua fría. – respondo levantando la vista que había mantenido en mi alfombra, la mirada de Lauren es un poco bastante intimidadora cuando está molesta.

- Vístete rápido, te esperamos en el auto. – se va pegando un portazo y dejándome con las palabras en la boca-

- ¡Maldita perra! – grito enojada. Se que ella no me responderá, pero aún así debía sacar mi enojo.

Recojo el bendito short, saco un crop negro y unos tenis blancos; hoy es un día soleado y aunque el negro no sea un gran amigo del sol, es mi color favorito y me gusta andar cómoda, sin importar el clima.

Me visto y bajo las escaleras. No veo a las chicas así que supongo que deben estar esperando afuera, abro la puerta y me dirijo al auto. Jade me está apuntando con el celular, creo que me está grabando.

- ¿Puedes parar esa maldita cosa? – escupo enojada y me subo en el asiento del copiloto.

*
*
*

Al llegar a la escuela, siempre me quedo afuero unos minutos. Saco mi cajetilla de cigarros de la mochila y el encendedor, prendo uno y me siento en una banca a terminármelo; necesito siempre fumar al menos 3 veces al día, ya sea marihuana o un cigarro.

Al entrar me cuelgo la mochila en un hombro y me voy a la oficina, ya que sé que el maestro me enviará con la directora por el atraso, así que prefiero ahorrarme sus aburridos discursitos.

Me siento en silencio, y entra Lauren. Nos mantenemos en así hasta que Alison rompe el hielo.

- ¿Qué haremos en la noche? – dice intentando calmar la tensión.

- Deberíamos ver una maratón de Dragon Ball Z – dice Emily emocionada mientras da pequeños saltitos sobre su asiento. Cuando todas volteamos a mirarla ella se cohíbe, no le gusta llamar la atención, en ningún sentido.

(...)

Luego de un rato, salimos de la oficina. Nos quedamos unos segundos en el medio del pasillo intentando decir algo, pero ninguna habla.

- Bueno, creo que nuestros planes para la noche se cancelan –digo fingiendo una sonrisa inocente mientras me alejo retrocediendo.

Lauren voltea los ojos y se va a clases; me encanta hacer enojar a Lauren, es uno de mis pasatiempos favoritos.

Después de cinco minutos que malgasté conversando con una amiga, me voy a la sala, por fin; toco la puerta y sale la Sra. Wilson; puede ser un amor y lo que quieran, pero eso no le quita que es profesora y lo mucho que le encanta hablar.

Le concedo el papel y ella se hace a un lado para dejarme entrar, le doy una sonrisa amable y paso. Me detengo en seco cuando oigo su voz detrás de mí.

-Señorita Robinson, ¿porque anda llevando cigarrillos en su mochila?

 




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