Capítulo 2 LO HE AMADO DESDE QUE LO CONOZCO

Al cabo de varios meses, la amistad de los cuatro se fue haciendo más fuerte. Dondequiera que iban, los cuatro siempre estaban juntos. Les decían los 4 mosqueteros por el fuerte lazo que los unía..... claro, un lazo que no todos ellos sentían de la misma forma.

- ¡Animal!, tengo algo que contarte - le dijo un sonrojado Manuel.

- Soy todo oídos, esperpento humano - le dijo Agustín, fiel a su "amoroso" trato entre amigos.

- Estoy enamorado - . Aunque Agustín ya lo suponía por la forma en que Manu reaccionaba ante Rossi, no quiso quitar el factor sorpresa a la memorable noticia su amigo guardaba desde hacía ya buen tiempo.

- Y ¿quién es la afortunada que ha cautivado el corazón de mi amigo? - Había que disimular, claro estaba.

- Es Rossi -. Apenas el nombre salió de sus labios, un calor subió por el rostro de Manu, quien no pudo evitar esconderlo entre las palmas de sus manos, muerto de vergüenza.

- ¡En hora buena! mis felicitaciones. Estoy muy contento por ti, camarada. Es una chica maravillosa. Ustedes son mis mejores amigos y saber que tú y Ross pueden amarse me causa mucha alegría. A propósito, ¿te corresponde? -. Había que preguntar, no quería ilusionar a su amigo si la cosa no era mutua.

- No lo sé, Agus. Nunca se lo he dicho. Ella ni siquiera sospecha que yo la amo. Hace más de un año que mi corazón le pertenece y no me he atrevido a confesarle nada. Y es que no quiero que las cosas cambien entre nosotros si ella no siente lo mismo por mí. Es una de mis mejores amigas y no quisiera que esa amistad se estropeara. No quiero perderla, lo entiendes, ¿no? -.

- Pero Manu, si no te arriesgas nunca lo vas a saber. ¿Y si ella te corresponde? Anímate, yo te apoyo. Ella sin duda será tu compañera de vida -. Agus parecía estar muy seguro de aquello. Como si tuviera una visión del futuro que solo él percibía. Confiaba en que la confesión de Manu llegaría a buen puerto. Su amigo era un chico confiable, amable, sincero, excelente amigo y para rematar, de buena apariencia, al menos mucho más que él. Esto último lo tenía claro, porque las chicas generalmente se le acercaban para conseguir información de su amigo, o para que éste las emparejara con ellas. Era un chico alto, de cabello pelirrojo y ojos azules, con pecas en sus mejillas y nariz. Su espalda era ancha, propio de los nadadores (Manu pertenecía al equipo de natación de la escuela) y sus piernas eran musculosas y contorneadas. Su torso era perfecto….. un six pack con todas las de la ley. Y Algo que lo hacía sumamente apetecible por las féminas, era su seriedad con las mujeres. A pesar de ser un adonis según la mayoría de las chicas, no era mujeriego. De hecho, desde que se enamoró de Rocío, decidió serle fiel aunque ella ni siquiera supiera de sus sentimientos. Agustín realmente deseaba que su amigo fuera correspondido y lograra conquistar el corazón de su querida amiga Rossi.

Lejos de aquella conversación, Rocío y Daniela también estaban teniendo su propia charla de confesión.

- A ti algo te pasa y no me digas que nada porque eso ni tú te lo crees. Somos amigas desde siempre y te conozco mejor que tus padres así que no te lo calles más y dime. ¿Pasa algo con Agustín? Hace meses que noto que cambiaste con él, ya no lo odias y eso está súper, pero este último tiempo te has puesto más retraída y lo evitas aunque él no se percate de ello. ¿Hay algo que deba saber? -. Daniela intuía el dilema de Rossi, pero esperaba que fuera ella la que se lo confiara.

- Lo sé Dani. Sé que las cosas cambiaron. En un principio lo odiaba sin razón tal como dijiste y no quería que eso cambiara, pero cada día que pasaba, él hacía cosas para acortar la distancia entre nosotros. Yo sentía que quería desesperadamente acercarse a mí y tener mi amistad. Cierto día que ustedes no vinieron me sentía tan sola y triste y él lo notó y no dudó en hacerme compañía y alegrarme el día. Todo el frío que sentía en el alma y en el cuerpo, lo transformó en calidez. Mi corazón solo se rindió……. Creo que me enamoré de él -. Daniela no sabía cómo interpretar sus palabras. No tenía idea si eso a Rossi le hacía feliz o la descorazonaba.

- Y ¿él? ¿Te ha dicho algo? -. Necesitaba saber más detalles para saber cómo aconsejar a su amiga.

- No me ha dicho nada, pero yo creo que no le paso desapercibida, de lo contrario no hubiera hecho todo lo que hizo solo por ganar mi afecto. Yo creo que él también me quiere y está esperando el momento preciso para decírmelo -. El rostro de Rossi se encendió y los ojos se le iluminaron de anticipación.

- ¡Ay, amiga! Me alegra que al fin alguien te haga suspirar, aunque debo confesarte que pensé que tu corazón latiría por “otro”, pero como sea, estoy segura de que harán una linda pareja porque hay algo que hará su relación extremadamente fuerte y es que antes que nada han sido amigos y la amistad es la base de un fuerte amor. Ya verás cómo serán una pareja para toda la vida -. Rocío quería creen en las palabras de Daniela, solo que no imaginaba los sentimientos que había en el corazón de sus dos amigos. Manuel por un lado estaba completamente enamorado de ella, pero Agustín solo sentía un fuerte lazo de amistad, nada más, algo que ella malinterpretó y que más tarde tendría que entender de una forma muy dolorosa.

El tiempo pasaba lento y amor de Manu y Ross se hacía más fuerte, aunque los objetos de su cariño no eran ellos mismos. A Manuel se le hacía difícil confesar su amor por Rocío y Rocío a su vez por Agustín.