¡Cielos! No sabía que esto iba a pasar. De haberlo sabido, te hubiera bloqueado. Al principio siempre me comentabas para llamar mi atención y que te respondiera en el chat. Iba a bloquearte porque no me gusta que me molesten mucho, sin embargo me sentía sola y deseé hablar con alguien y por casualidad, ahí estabas tú. Pensé en eliminarte, de verdad que sí, pero por eso no lo hice.
Fue divertido, fue hermoso, cuando te confesé que me gustabas, y mucho mejor, cuando dijiste que, si las cosas hubieran sido diferentes, hubieses estado conmigo, pero ella había llegado primero. Solo pensé: "Gracias a Dios. Si tienes que decidir entre otra y yo, por favor, no me elijas a mi". Aunque con el paso de los meses, que no lo hicieras, empezó a doler.