Eso dolió

Habías llegado muy cansado del trabajo, como siempre. Te fuiste a la cama, me dijiste que querías dormir. Me quedé pensando en la posibilidad de sorprenderte cuando despertaras.

Quería darle una sorpresa a mi amor.

Quería que cuando te levantaras, vieras que tanto te amaba.

Te mencioné en un comentario, diciéndote lo mucho que te adoraba,  lo ansiosa que estaba por tenerte conmigo aquí, apesar de la distancia.

Pero...

La sorprendida fui yo.

Estaba dispuesta a dormir un rato  también, pues pensaba que tardarías unas horas antes de responderme, pues estabas dormido.

No habían pasado ni diez segundos, cuando me mandaste un mensaje al whatsapp:

"Amor, ¿puedo pedirte algo? Por favor aun no me etiquetes en nada de facebook".

Mi reacción fue:

"Ok, entiendo. No hay problema"

Y la excusa que diste:

"Es que....

Es que...

Es que...

Mí mamá.

Sí,  mí  mamá. Ella es muy sobre protectora. Seguro se metería contigo, y te hablaría para insultarte. Ella es así... No aprobaría una relación a distancia. Solo dame tiempo para hablarles de ti, a ella y a mi familia".

Me disculpé, te dije que volvieras a dormir,  que me perdonaras por haberte despertado.

"No te disculpes,  no estoy molesto"

¿No estabas molesto? ¿En serio? ¿Acaso era una broma?  ¿No estabas molesto?  Ya veo,  ¡pero yo si! ¡Idiota!

¿Sabes lo que me costó escribir eso?  ¡Me temblaban las manos de los nervios! Y,  solo lo rechazas,  así  de simple.

Dejé pasar esa. Aunque revisé tu perfil más de veinte veces y me lastimó ver  cientos de chicas, supuestas amigas,  como te publicaban, lo permitías y a mí,  no me dejabas.