Mirada Azul

Capítulo 4

{~Marcus~}

-Una semana antes-

Mi trabajo es algo de lo que no me quejo ya que muchas veces tengo la adrenalina que necesito, pero tambien tengo mis momentos en los que me aburro de hacer lo mismo. Hace unas horas recibí la llamada de Joe uno de los superiores para los que trabajo y me dio a dirección, fecha y hora del lugar al que me debía digerir para mi nuevo trabajo.

Desde pequeño me gusto las artes marciales, boxeo y utilizar armas todo por que admiraba el trabajo de mi padre. Hasta que el gusto paso a pasión por ello y por eso me gusta mi trabajo, aunque ya casi no tenga tanta adrenalina, me conformo con los entrenamientos para mejorar las debilidades que aún tengo, a pesar de los 4 años que llevo en esta organización y que se me ha permitido entrenar, practicar y poner en acción todos mis conocimientos.

Hace unos 3 años fue la misión más importante, pues debíamos recatar a la nieta o hija del jefe, la cual nunca pude conocer, aunque fui yo quien la saque de aquel mugroso y horrible lugar en el que la tenían secuestrada, mientras mis compañeros hacían lo suyo con los enemigos y me dejaban el camino libre.

La pequeña adolescente que llevaba en mis brazos ese día tenía el rostro cubierto por una máscara blanca, el vestido blanco roto y sucio, por cómo no reaccionaba supuse que estaba desmayada y decidí no perder tiempo. La lleve afuera rápido de lo que seguramente fue su infierno y la entregue a Joe, mientras regresaba para ayudar a mis compañeros por órdenes de Joe.

Y aunque allá pasado tanto tiempo nunca me saque de la cabeza aquella niña indefensa, de pequeñas curvas y cabello castaño. Nunca pudimos conocer la identidad de ella pues por órdenes de los Jefes su identidad solo sería conocida por quienes consideraran de confianza.

Me prepare como de costumbre con botas de combate, camisa básica negra y un pantalón estilo militar, además de todo lo necesario que necesitaba para ir al cuartel donde teníamos todo lo necesario para entrenar, investigar, crear estrategias, reunirnos, beber o comer; incluso había dormitorios y baños para quienes debían pasar la noche trabajando.

Me subí en mi motocicleta negra modelo Kawasaki Ninja 400 2018 una verdadera joya, de camino al cuartel pase por John mi mejor amigo y mi compañero en la nueva misión que se me asigno, de la cual sabría mañana. Llegamos y deje a John en la entrada, mientras iba a estacionar.

Entre a las instalaciones y salude a todos los de la primera planta, mi destino era la sala de entrenamientos y después la oficina de Joe o al menos eso suponía.

-Buenos días, Marcus, el señor Joe y el señor Evan lo esperan con urgencia en la oficina. – Me intercepta Alexa la asistente o secretaria de los jefes.

-Dime que aún no la he cagado y no me van a castigar de nuevo -le ruego

Hace unos meses me equivoque en una misión de importancia, por la cual me castigaron con la prohibición de ir a ciertas misiones especiales.

-Por tu bien aún no, pero solo sé que el señor Joe y Evan lo esperan para tratar un tema serio.

-¿Quién es Evan? -le pregunto pues solo algunas veces escuche su nombre y por lo que había escuchado tenía un gran puesto.

-Es uno de los Jefes que se incorporaron hace casi 2 años – Dice como si fuera lo más obvio para todos menos para mí.

-¿Cómo es?

-Como una persona normal con brazos, piernas y cabeza imbécil. -dice con sarcasmo John al llegar – Pero vamos hombre deja de ser tan preguntón y camina que en esta creo que si te castigan por llegar tarde.

-Deja de ser un puto grano el culo y déjame saciar mi curiosidad. -digo, pero es tarde pues ya me lleva empujado hacia la oficina.

-No imagino lo preguntón que eras cuando ibas a perder la virginidad, seguro hasta le preguntabas a la chica por cual agujero meterla solo por curiosidad -dice y rueda los ojos.

-No pegunte nada pedazo de mierda porque ya sabía. – le digo con orgullo

-En serio que solo a veces dudo de tus capacidades ya que eres uno de los mejores hombres de esta puta organización, pero que a veces pareces un idiota que no usa inteligencia alguna.

-Que no soy así -digo ofendido.

Pues mi único defecto es que suelo ser muy curioso, pero en lo demás soy muy bueno. Soy uno de los mejores porque me lo he propuesto y así lo he querido, mis Jefes han visto el esfuerzo y empeño que pongo en ello. Llegamos a la oficina y Evan toca dos veces antes que se escuche un pase.

-Buenos día Alexa nos informó que debíamos presentarnos aquí antes de entrenar. -Soy el primero en hablar cuando entramos.

-Así es chicos, pero no creo que les tome tiempo para entrenar porque vamos a hablar de su nueva misión -Dice el que supongo que es Evan. -Tomen asiento y les daré todos los detalles.

Así pasamos 3 horas hablando, dándonos información y conociendo de que se trataba la misión que se nos encomendaba. Nos enseñaron fotos de las amigas de la chica que me tocaba cuidar, pero nunca de ella y solo me dieron la información principal del caso. Tambien se nos informó que asistiríamos a una universidad en la que estudiaban las chicas y la facultad que se me asigno.

-Sabemos que con las águilas hay que tener cuidado, el objetivo es protegerlas para que no ocurra lo mismo que paso con la hija del Jefe Daniel, puesto que las águilas están detrás de Anne y no creo que sus intenciones sean buenas – termina Joe

-¿Por qué es importante proteger a estas chicas? – pregunto y John me quiere asesinar con la mirada.

-Por cuestiones de seguridad no se les puede brindar esa información, pero la Jefa y presidenta de este pronto pediría que tomemos cartas en el asunto y las ordenes de la Jefa se cumplen al pie de la letra, porque al que no cumple se le castiga y ella no tendrá compasión en imponer el castigo ella misma.