¿Cómo olvidar aquellos atardeceres que Juntos momento inolvidables, que sería imposible tratar de retratar?
Tal vez fué el primer beso que recibí de tus labios, lo que me hizo sentir así.
Aún añoro aquel árbol en la que solíamos jugar en nuestra sencilla niñez, cuándo me solías decir "te quiero" con toda sinceridad, el calor de tu corazón, me daría una esperanza que nunca había sentido ni conocía.
La esperanza de un amor duradero como en los cuentos del príncipe azul.
En la que rescata a su doncella para jamás dejarla ir, atrapandola entre sus cálidos brazos, fuertes pero tiernos.
De esos que te hacen jamás querer salir de ahí, deseando que el instante durará para siempre.
( Crónica poética)