Adela.

Veinte: Siendo honestos.

El mundo tiene una manera muy graciosa de actuar.

¿En qué momento se le ocurrió poner en mi camino al primo de mi mejor amigo del que por cierto estaba enamorada?

Además de que tuve que saberlo justo en el momento en que las cosas iban muy bien entre nosotros. ¿No pude saberlo un poco antes?

No le había comentado nada a Darien, primero quería hablar con Oliver para saber qué pasaría con nosotros y una vez establecido eso, iría a contarle a Darien que el chico del que siempre hablo es nada más su primo, primo que no es tanto de su agrado. Por todo esto le había pedido a Oliver reunirnos para hablar, me había tomado todo el día para analizar esta situación y se lo pedí, él había aceptado y ahora estaba en una cafetería esperándolo.

Había llegado un poco antes para poder calmar mis nervios, claro que el plan falló cuando lo vi entrar al establecimiento y de hecho estos aumentaron más cuando tomó asiento delante de mí. Las cosas nunca habían sido incómodas entre nosotros y es algo que me había encantado desde que lo conocí, pero justo ahora ninguno de los dos sabe cómo iniciar esta conversación.

—No sé qué decir—tomé la iniciativa, no dije gran cosa pero algo es algo.

— ¿Cómo es que no pude haber sabido de alguna manera que eres la novia falsa de mi primo?

— ¿Cómo es que no pude haber sabido de alguna manera que estás emparentado con el chico con el que vivo?

Ambos reímos por lo incómoda que era esta situación.

—Supongo que no había manera de saberlo—comenzó a hablar—. Yo no sabía que Darien vivía en la ciudad, sí, sabía que había estudiado aquí pero no que se había mudado, así que nunca pensé encontrármelo. Y también sabía que mi tía no vivía tan lejos pero nunca se me ocurrió informarle, fue una sorpresa encontrármela en el mercado.

—Pero, ¿cómo es que no sabía de tu existencia? Digo, Darien solo había mencionado que tenía un primo llamado Oliver pero no me imaginé que entre tantos que hay en el mundo fueras a ser tú.

Obviamente no le mencioné la parte en que lo llama idiota, en mi defensa antes no sabía de quién hablaba.

—Darien y yo no tenemos la mejor relación. De ser así de seguro e igual hubiera sabido de tu existencia.

—Algo me pareció escuchar.

Realmente no sé porque Darien parece no tolerarlo, no me ha mencionado mucho y la verdad siempre creo que exagera cuando se expresa así de él.

Nos quedamos callados algunos minutos más. Odiaba este tipo de tensión, hubiera querido regresar al otro tipo de tensión que ya había creado con Oliver.

—Si hubiera sabido que el Darien de quien finges ser novia era mi primo...—comenzó a decir pero lo interrumpí.

—No te hubieras fijado en mí, ya lo sé.

—No es lo que iba a decir, Ade. Hubiera andado con más cuidado, ¿qué hubiera pasado si te hubiera encontrado antes y Amanda nos hubiera visto actuando de modo diferente? ¿Cómo hubiéramos explicado eso?

—Tienes razón.

Al menos debo de darle un punto bueno al destino ya que pudo haber hecho la situación peor para nosotros, fue una suerte que hubiéramos reaccionado rápido y no dijimos algo más.

— ¿Qué haremos ahora?—preguntó.

—Bueno, entendería si no quisieras seguir con lo que sea que tengamos.

Era la primera vez en mucho tiempo que estaba consiguiendo algo con el chico que me gusta, odiaría tener que renunciar a eso.

—Honestamente en este punto no creo que sea tan fácil que te deshagas de mí—tomó una de mis manos sobre la mesa—. No me quiero rendir tan fácil con esto, me gustas y te gusto, o al menos eso creo. Quiero seguir descubriendo que es esto, claro, si tú lo quieres también.

Por supuesto que me gusta Oliver, y creo que me gusta mucho.

—Eso me gustaría—apreté su mano.

Está bien, no somos novios, que es lo que quería que fuéramos antes de descubrir todo esto, pero al menos ya sé que el sentimiento es recíproco. Además no puedo ponerme a exigirle que seamos una pareja cuando yo ya tengo una relación falsa, y menos ahora que sabemos que es con su primo.

—Solo que creo que es algo que debería saber Darien—dijo aún sin soltarme.

—Lo sé, tengo que hablar con él pero a veces puede llegar a ser muy testarudo.

No puedo ni imaginar su reacción cuando descubra todo esto, sobre todo porque Darien es la persona más imprescindible que conozco.

—Créeme que lo sé.

—Tal vez si tú estuvieras ahí...

—Definitivamente no—me cortó.

Creí que la rivalidad era solo por parte de Darien pero empiezo a notar que no es así.

—Oh vamos, ¿no quieres tener un agradable reencuentro con tu primo?

—Será de todo menos un encuentro agradable.

Tengo muchas ganas de preguntar el por qué se tratan así, pero primero lo convenceré de que me ayude a afrontar esto.

— ¿Eso es un sí?



#4600 en Novela romántica
#1325 en Chick lit
#1734 en Otros
#472 en Humor

En el texto hay: humor, comediaromantica,

Editado: 24.01.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.