Punto de vista de la adorable elfa Sheila.
Paramos un momento para que la tortuga cornuda pueda alimentarse. Ella se tomará todo su tiempo en elegir cada bocado que dará, jamás comerá de un yuyo sin olerlo por al menos un minuto, está criatura es muy selectiva con sus alimentos.
Ese niño parece muy entusiasmado con su entrenamiento, jamás vi a un joven tan dedicado, incluso práctica mientras hace otras tareas como lavar la ropa con magia de agua o calentar la sopa con magia de fuego.
Ha aprendido a cambiar los estados del agua en menos de una hora y ahora está practicando cómo cambiar la temperatura del fuego.
"Muchacho tienes una gran habilidad con los elementos, tu maestro debe estar muy orgulloso".
–Quiero aprender lo más básico antes de ingresar a la escuela.–
Yrila que estaba acostada en el suelo dándonos la espada nos interrumpe.
–Desperdicias tu tiempo, esa no es la manera de aprender.–
"No lo fastidies, su entrenamiento no tiene nada de malo".
–¿Por qué dices que desperdicio mí tiempo?.–
Apenas mirando de reojo le contesta.
–La mejor manera de aprender es de la misma experiencia. Nosotras hemos entrenamos desde pequeñas con batallas reales para formar nuestro carácter.–
"No puedes compararnos Yrila, nosotras fuimos elegidas para ser guerreras mientras él es solo un campesino".
–Creo que entiendo tu punto, yo no soy un guerrero, solo soy un campesino que conoce algunos trucos.–
Su cara tierna parecía algo triste cuando le dije eso, parece un chico muy sensible.
"No pienses así, te he visto cómo manejas tu espada y debo decirte que eres muy bueno".
–Pero Sheila ¿eso servirá cuando mí vida esté en verdadero peligro?–
–El niño no parece ningún tonto, debe saber que no todas las criaturas pueden ser derrotadas con una espada, en este mundo existen seres que te paralizan con su sola presencia, atacan tu mente, te llevan a la locura y desesperación.–
"No asustes al muchacho, él aún es muy joven".
–No, tiene razón. Si quiero convertirme en un mago poderoso necesitaré experiencia real.–
Su rostro se ve muy pensativo, como si estuviera dudando de algo.
"¿En qué estás pensando?".
–Aún falta un tiempo para que empiecen las clases, salí con dos meses de anticipación para poder conocer la ciudad y acostumbrarme al cambio, pero creo que aprovecharé el tiempo de otra forma.–
"Definitivamente no, nuestras órdenes son llevarte sano y salvo a la ciudad de A'fanore"
–No incumpliremos esa regla, solo me gustaría aprovechar la oportunidad para adquirir algo de experiencia.–
Yrila se levanta rápidamente con un rostro sonriente.
–Conozco el lugar perfecto para eso.–
"¡Yrila! Nuestra misión es…"
–No te preocupes, solo haremos una pequeña excursión para probar las habilidades del niño en un combate real.–
"No me gusta nada tu rostro, ¿Que planeas?"
–Hay una mazmorra de bajo nivel para principiantes que podemos visitar.–
–Una mazmorra, eso sería fantástico.–
"¡Estás loca, como se te ocurre querer llevarlo a un lugar tan peligroso!".
–Con dos guerreras elfo a su lado, no habrá problema. Además es una buena oportunidad para hacer algo de dinero.–
"De ninguna mane… espera, ¿dijiste dinero?".
–Si conseguimos algunos cristales de maná podremos volver a casa con algunas monedas de plata.–
Nuestro sueldo está retrasado varios meses, no nos vendría mal hacernos de algunas monedas por el camino. Además el muchacho se ve entusiasmado, será una gran experiencia para el.
–Está decidido entonces, vayamos a esa mazmorra.–
"No te apresures demasiado muchacho, entrar a una no es un trabajo tan sencillo".
–Asi es niño, las entradas están custodiadas, se necesita un permiso especial para poder hacer una incursión.–
–Si, lo se. Mí padre hace misiones de aventurero dentro de las mazmorras.–
"Si no demuestras tener un determinado nivel, no te dejarán entrar. Además, en tu primeras misiones solo puedes entrar como escudero".
–Eso es un problema, necesito de un líder que quiera contratarme.
–Hace tiempo que no hacemos incursiones, pero calculo que nuestras credenciales aún son válidas.–
–Esperen, ¿ustedes son aventureras?.
"Por supuesto, no existe un guerrero elfo que no haya entrado en una mazmorra para probar sus habilidades".
–A unos kilómetros de aquí está Pueblo Blanco, una pequeña urbe construida sobre una antigua mina de cal. En ella podemos conseguir las credenciales que necesitas y además podremos unirnos a un grupo.–
–¿Es necesario unirse a un grupo?–