— ¡Oye! — exclamó molesto Taehyun cuando su hermana se tiró sobre su espalda.
Ailyn había olido el aroma suave de chocolate que su hermanito desprendía y de aquélla manera lograr encontrarlo. Se río alegre alejándose y tiró de la mejilla contraria cuando escuchó una queja por su parte.
— Ni que pesara tanto para ti. — dijo entre carcajadas. Cruzó sus brazo y ladeó leve su cabeza, incluso si no podía verlo Ailyn buscaba su mirada; sonrió con burla para seguir.— Desde que despertaste como alfa alardeas de lo fuerte e invencible que eres pero no puedes soportar el peso de tu debilucha hermana omega.
— ¡Venga, no dije eso! — se quejó él castaño inflando sus mejillas rojizas, su ceño se frunció mientras entraban en su hogar. — Además, solo lo digo fuera de casa o frente nuestros conocidos no cercanos, ambos sabemos que tú eres más fuerte que yo en las luchitas.
Ailyn mordió su labio inferior aguantando la risa, su hermano había sonado todo avergonzado e incluso si no podía verle juraba que se veía como un tomatillo.
— Ya crecerás y serás híper fuerte. — lo alentó, apoyó su brazo izquierdo en el hombro contrario mientras sonreía.— Aún que sabemos que eso en realidad no importa. Solo encárgate de hacer tu corazón fuerte.
— ¿Es lo importante, verdad?
— Es lo importante.
Dicho aquello se sonrieron mientras buscaban a sus padres en la casa. Ailyn se le hizo extraño no oler sus peculiares aromas y Taehyun no logró encontrarlos en ningún lado.
La mayor de ellos suspiró sentándose en él sofá del living seguida por su hermano.
— ¿Papá?
— ¡Ailyn! ¿Dónde éstas? — preguntó Taehyung al contestar el llamado.
— En casa. — respondió la pelinegro como si fuera lo más normal. Escuchó un resoplido agotado por parte de su padre y frunció el entre cejó. — ¿Dónde están ustedes? Con Tae nos preocupamos al no encontrarlos.
— Perdón, cerecita. — se disculpó. — Creo que confundí los días y pasamos a buscarlos.
Ailyn y Taehyun se carcajearon al escuchar a su padre, es que era cierto; él nunca recordaban exactamente que días salían temprano y cuando no, solía confundirlo casi todo el año.
— Te haré un recordatorio, papá TaeTae. — dijo él menor entre risas y su padre bufo molesto.
— Volvemos en seguida. — terminó por decir y ambos colgaron.
Los hermanos Jeon volvieron a reírse recordando todas las veces que su padre cometía el mismo error, aunque todos sabían que era así porque Taehyung aún confundía las cosas con como se manejaban en el extranjero. Aunque ya pasaron años.
Esperaron por sus padres unos minutos mientras se entretenían escuchando la serie inglesa que tanto le gustaba al más chico, Ailyn ni siquiera sabía el nombre pero aún así le gustaba pasar tiempo con él.
El ruido de la puerta principal cerrarse los trajo de vuelta y ambos sonrieron al sentir las presencia de sus padres. El más joven de ellos corrió a recibirlos con un cálido abrazo mientras que la mayor sólo se acercó en cortos pasos e hizo un ademán de saludo.
— En serio, discúlpame cariño por siempre confundirlo.— se disculpó en un tono de lamento Taehyung acercándose a su hija para fundirse en un fuerte abrazo. El castaño refregó su mejilla en el cabello de su hija oliendo su dulce aroma a rosas.— Soy un terrible padre por hacerlo.
— ¡Claro que no! Papá TaeTae, no fue nada del otro mundo. Ni siquiera sabía que irías.— le resto importancia mientras sonreía apegándose al cuerpo de su padre y es que Ailyn podía sentirse en paz su alrededor.
— Era sorpresa.— habló Jungkook entre risas.— Tampoco se me paso el avisarles para confirmar el horario.
— Íbamos a ir al cine. — soltó de repente Taehyung y un grito desesperado salió del más pequeño lo que provocó que toda a las miradas estén en él.
— ¡ERA UNA OPORTUNIDAD ÚNICA!
Ailyn y sus padres no lograron aguantarse la risa ante el comentario de Taehyun junto a su rostro que expresaba decepción y sufrimiento; ¿realmente tenía dieciséis años?
Bueno, en realidad no importa.
Eran alrededor de las 21:30 cuando la familia Jeon se dispuso a preparar la cena, la cual eran nada más ni nada menos que la pizza del lugar favorito de ambos niños, tres cajas eran suficientes para ellos.
💕
— Es que, díganme sin me equivoco, ¿no era más sencillo que dijera que no estudió a perder el tiempo con una hoja en blanco? — preguntó Taehyun moviendo su mano para expresar su molestia, tenía el ceño fruncido.
— A veces las personas quieren intentarlo incluso en esas situaciones.— respondió Ailyn encogiéndose de hombros como si le restará importancia, es que en su cabeza el tema no tenía sentido. — Más allá de ver como el beta que te gusta fracasaba en su exámen..
— ¡No me gusta! — exclamó el menor con sus mejillas ardiendo.
— Si, sí.. — Ailyn hizo un movimiento de manos como si no le creyera. — entones, digo, ¿no hiciste nada más interesante?
— ¿Cuenta haber observado a Yanan todo el día? — preguntó agachando la cabeza cuando sintió su rostro arder.
— No hiciste nada interesante. — sentenció su hermana haciendo una mueca de cansancio.
El pequeño Taehyun iba a reprocharle pero fue cayado por uno de sus padres;— ¿Tú hiciste algo interesante? — cuestión Jungkook en dirección a su hija, sonrió cálidamente cuando vi un brillo sincero en sus ojitos y se recargo en el sofá para escuchar la historia.
— Pude tocar el piano. — confesó jugando con sus manos.
— ¿C-como? .. — preguntó anonado Taehyung.
— El profesor Chia me ayudo. Él dijo que para la música solo es necesario sentirla, al principio me salió mal como tres veces pero seguí y logré tocar Anima.
— ¿Anima? — preguntó esta vez Jungkook desconcertado mirando a su pequeña quien en ningún momento borró la sonrisa. — ¿Cómo la recuerdas?