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Estoy muy satisfecho con la cena, realmente esta muchachita es muy buena en lo que hace debo reconocerlo, pero eso nunca lo escuchará de mis labios. Sé que la vida puede ser injusta y darnos golpes muy duros  y yo más que nadie lo sé.

A pesar de todo, durante estos años intenté, juro que lo intenté quererla pero no, verla hace que mi odio crezca cada día, ella es la culpable de que ahora sea un ser infeliz, saber que ella me arrebato la felicidad es insoportable, así que el único medio que encontré para sobrellevar este rencor es haciéndole la vida muy poco llevadera, sé que ella es inocente. Sin embargo, el saber que venía a este mundo me convirtió en un monstruo que jamás tendrá perdón, pero no podía permitir que ella se vaya de mi lado, no hubiera podido vivir sin ella que es mi mundo y por ella lo aceptaría todo.

Vuelvo a escuchar a uno de mis socios que hace rato que me viene hablando pero me  perdi en mis pensamientos, todo valga por conseguir a Ferreti como socio y poder lograr ser el número uno en el mundo de los negocios pues yo esperaba a un hombre mayor ya que las referencias que me dieron de Ferreti eran asombrosas. Sin embargo, me doy cuenta que solo es un muchachito inexperto, quizás sea hábil pero más sabe el diablo por viejo que por diablo.

Ya solo que dan algunos amigos así que decidó hablar de una vez con Ferreti.

-Señor Ferreti no se si pudiera brindarme algo de tiempo.

-Claro, señor Soliz. digame en que puedo ayudarle

-Primeramente saber si la cena fue de su agrado.

- Por supuesto, hagale llegar  mis  felicitaciones a la señorita Soliz.

-Así lo haré, creame que fue su iniciativa ayudarme.

-Fue una decisión acertada, me imagino que es su mano derecha.

- Reconozco el potencial pero ella es muy terca e insiste en crearse una trayectoria sola y no en la empresa familiar.

-Es una lástima que desaproveche ese talento y lo done a la competencia, aunque se debe resaltar el hecho de que como padre respeta sus decisiones.

-Es dificil no se lo voy a negar pero es la luz de mis ojos y de su madre. No se que sería de mi si le pasase algo.

- Bueno volviendo al punto deseaba decirme algo de suma importancia.

-En efecto, quisiera propornerle una asociación, es decir una fusión de nuestras empresas para convertirnos en una de las empresas más prestigiosas.

-Creo que esta de más decir que no necesito fusionar nada para que mi empresa sea reconocida en cualquier parte del mundo.

-Creo que no me estoy dejando entender. Existe un proyecto con empresarios rusos y mi empresa no es tan fuerte como para llevar a cabo tal proyecto pero con la suya podriamos generar millones de dólares. Y así poder pagar algunas deudas que tengo con personas que siendo sinceros no serán amables al momento de cobrar.

- Entiendo ese punto pero que ganó yo, al parecer el único necesitado es usted, a mí no me interesa su empresa ni su rubro.

- Pero pude ver que le intereso mi hija, la miró durante toda la velada.

- Soy un hombre que sabe reconocer la belleza de una mujer y su hija es incomparable. Pero menos entiendo ahora que ponga en un tema de negocios a su hija, ¿por qué no es franco?

- Esta bien, creo que no es necesario seguir con esta máscara, es usted un hombre inteligente a pesar de su edad.

-No me subestime señor Soliz.

-No lo hago, como le dije en estos años realicé algunas inversiones que salieron mal y perdí mucho dinero además de mantener gastos médicos de mi mujer, y otros gustitos de una que otra mujer bueno reducieron mi patrimonio. Entre en una situación de crisis económica y para ello me presté dinero de una mafia y ahora están exigiendo su pago a pesar de ya darle los intereses.

-y ¿cuál es mi papel en esta historia?

- Verá si fusionó mi empresa con usted no podrán quitarme la empresa porque los socios no lo permitirían, en este caso usted.

- ¿y? ¿cómo pagaría esa deuda? porque si hacemos negocios yo no tengo el alma caritativa para regalarle mi dinero.

-No lo haría, solo me donaría la primera ganancia.

-¿esta loco? me toma por estúpido

- no, yo retribuiría su donación

¿con qué? si no tiene dinero

-con mi hija

-¿perdón?

- Vi cómo la miraba, así que le ofrezco a mi hija en matrimonio a cambio de que me ayude.

- ¿usted analizó esta propuesta? 

- Claro, además que no perdería todas las ganancias, usted al casarse con mi hija  también podría tomar posesión de la herencia que mi madre le dejó que es una gran suma.

Comencé a reirme como un loco, este hombre no tenía escrúpulos. En principio me efrece asociarme, en segundo me ofrece a su hija, quien no puedo quitar de la mente, esa mujer tiene algo que llego a hechizarme; pero es la hija del hombre que mató a mis padres.

-Señor Ferreti, le pido reconsidere mi propuesta.

- Algo aquí no me cuadra, ¿su hija se prestará a este juego?

-Claro, ella me adora y además uno de sus sueños es ser la mujer de un hombre poderoso y disfrutar de una vida llena de lujos.

-No me dio esa impresión.

-Es como todas las mujeres, trata de encandilar a hombres como usted. 

- Entonces yo lo ayudó y a cambio tengo una esposa que seguro me complacerá en todo.

-Oh claro que sí, mi hija sin ofender pero tiene mucha experiencia en las artes amatorias.

- La verdad las apariencias engañan. Lo pensaré y luego le hago llegar mi respuesta.

-Eso espero, recuerde que usted es la primera opción de mi hija y la mía sino tendremos que buscar otras opciones.

Entiendo, buenas noches.

Subí a mi auto y la cabeza me iba a reventar, de verdad que esta gente es de lo peor. Yo creyendo que su hija era inocente, una dama a la que cualquier hombre le gustaría tener como pareja cuando resulta que solo es una oportunista más. Es una arpía cómo su padre como dicen de  tal palo tal astilla. Y pensar que me sentí embrujado con esa mirada.