El Anuncio Y El Nacimiento de Un Héroe

En el sueño de Olimpia de Epiro tuvo un sueño, el del cual Olimpia de Epiro, futura madre del mismísimo Alejandro Magno, había visto en su sueño a un león que iba hacia a la misma Olimpia de Epiro, y al despertar, había sentido un rayo en todo su cuerpo, al pasar el tiempo y al darse cuenta de que no llegaba el periodo, era obvio, y para la fortuna del rey Filipo II de Macedonia una de sus mujeres estaba embarazada, y para cuando había dado a luz a un varón, el rey Filipo II de Macedonia había llamado al niño Alejandro III de Macedonia, y en cuanto a la parte del apellido de Alejandro, ósea Magno, se lo habían puesto los romanos, ya mucho tiempo después de la muerte del mismísimo Alejandro Magno, y sin contar además que cuando Alejandro Magno había nacido, los dioses habían bendecido el nacimiento con una tormenta, y esta tormenta había ocurrido mientras Alejandro Magno estaba naciendo y había acabado cuando Alejandro ya había nacido, ya que este nacimiento estaba siendo bendecido por los dioses del olimpo.