Mi marido está en cuestiones
diferentes a las mias,
puja el trajín con sus
espiraladas voces,
presidiendo a mi
infortunada voluntad
La sensación de haber
vivido mil años a su lado,
de creer que todo está perdido,
que el tiempo se ha ido
de mis manos como agua
que se escabulle entre los dedos,
pues la juventud paso
tan de prisa como una rosa precoz
cuya vida tan velozmente
se marchita.
Como un cálido manto
abracé a los que tanto amo.
Fui pulpo con miles
de tentáculos acunando
en mis pupilas a cada
ángel de mi vientre.
Fui una torre fuerte
ante misterios
soldados de barro.
Y te elegí guardián
de mis puertas de marfil,
de mis puentes de oro,
de mis océanos de plata,
de mis montañas y lumbreras
de diamantes.
Por dar mas de lo que
poseía vacía me quedé,
pero aquellos más exigen
y hasta la vida les entregué.
En vano se lucha contra
el potro indomable
de encendido volcanes.
Libero mis impulsos
oscuros apuñalando tu cuerpo
con un cuchillo de papel.
Me aferre a la piedra
fundamental llamada
valor, amor y deseo.
En aquel pasado construi
un futuro para los dos,
aunque hoy me ahogo
en tu desamor y
¿qué hay del presente?
El presente es aquí. Ahora.
Ya. Entonces hoy soy yo.
Vivo hoy.
Suelto los prejuicios
sin esperar amor de otros
Y amándome como
nunca antes.
Ya no nos engañemos
poniendo excusas.
Tampoco digamos más que
es por nuestros hijos...
te liberó ¡vete!
¡ Haz lo que te venga en gana!
no llegues tarde a una nueva vida.
¡Basta ya! no te detengas,
no sientas lástima por mí
estaré bien, más duele tu hipocresía.
Hoy decido Elevar las velas
al viento de mi barca y navegar
por mares cósmicos
fluir en mi ser natural y
sorprenderme con el lenguaje
del universo hasta encontrarme
con mi singular alma.