~•~•~Jano~•~•~
No sé qué esperar, él era a veces algo, tan repentino y más en ocasiones como está. Que me recordaba nuestra primera tocada cuando solo éramos Vic, él y yo, donde al inicio no quería ni ir, tanto así que ese día trato de evitarnos. Cosa que no logro, pero el problema vino cuando le tratamos de convencer para ir.
-Vega, ya tenemos todo para esto, aunque me gustaría no podemos echarnos para atrás- le dije cuando llegamos a la puerta de su cuarto. Que por cierto estaba cerrada y pues para llamarle la atención Vic y yo, me acuerdo que estábamos tan enojados, que estábamos a nada de tirarla, entre por los golpes que le dábamos, mi insistencia por abrirla de una forma más normal, usando el picaporte y planeando juntos como tumbarla. Pero aunque no lo logramos, esa puerta tiene varias marcas del lado exterior de los intentos de nosotros por abrirla y del interno, de sangre y rayones. Así que esa puerta creo que si le ha tocado tanto, que me sorprende como sigue ahí, dando batalla sin irse.
-No, no puedo- nos gritó llorando, después de estar ahí, entre gritando, calmándonos a los 3 y golpeando la puerta unos como 10 minutos, porque ya a ambos nos dolían un buen las manos y la garganta.
-Calmate, vamos, me prometiste que irías- dije rendido, apoyando mi cabeza en la puerta.
-No puedo, es tan fácil decir eso de ir y cantar, cuando estoy solo o con ustedes, pero con más gente, no podre- Dijo y me di cuenta que estaba apoyado en la puerta, cosa que era más que común en él.
-Tu dijiste que sí, no te puedes echar para atrás- dije sin poder decir más, porque para ser honesto. Ese día necesitaba ese dinero para algo que tenía planeado desde hace un buen con mis hermanos.
-No puedo…- tu padre me ha contado varias veces que tu madre era artista, una muy buena, que tienes un don para, para eso como ella. Por eso te insistí, por eso y porque le prometí a tu padre que te ayudaría a salir de donde estás. Abre, tenemos una idea, puede que te guste, puede que no, pero eso sí, servirá- Dije porque era verdad conociendo a Omar, Vic y yo, compramos maquillaje y unos lentes de contacto, junto con otras cosas.
-Omar abre, por favor- insistí y en eso oí como él se paraba y empezaba a abrir esa puerta.
-Aquí estoy- dijo cuando abrió la puerta, mostrado que estaba a obscuras, con lágrimas, pero gracias al cielo sin sangre.
-Ok, teníamos previsto esto desde hace un buen, te conocemos y sabíamos que ibas a hacernos esto hoy. Así que ambos decidimos pensar en cómo solucionar esto, llegando a la conclusión de que necesitamos dejarte en anonimato, por el bien de todos- le dije mientras Vic le daba una mochila con las cosas.
-Debemos apurarnos- dije y con eso ambos le íbamos enseñando todo, lentes, maquillaje, accesorios y eso.
-Falta ¿no?- pregunto cuando terminamos.
-Sí, lo demás lo tienes tú. La ropa sabemos que tienes mucha de la que necesitamos- dije y después buscamos entre sus cosas, pero yo me limite a buscar cierto guante que le vi en algún lado.
-¿Qué buscas?- preguntaron ambos viendo cómo estaba poniendo el cuarto para arriba.
-El guante de cómo cuero negro que te vi el otro día, el que nos llevó a una plática- dije más que ocupado buscando. Dije pensando en el guante negro con cadenas metálicas y otros detalles metálicos en plateado que lo mostraban rockero, punk, extravagante y que me gustó desde que se lo vi.
-¿Para?- me preguntó Vic, mientras oía como Omar se movía.
Y así nos quedamos, Vic sin entender la situación, mientras yo buscaba y Omar buscaba algo también.
-¿Hablas de este?- me dijo poniéndomelo en la cara y yo solo sonreí.
-Exacto, ven tenemos que crear a Alpha- le dije mientras ellos solo sonreían.
Y así nos pasamos esa tarde entera, viendo como seria Alpha.
-Esperen, yo mejor me encargo de esto- me dijo cuando estábamos en el punto maquillaje.
-Ok- aceptamos y empezamos nosotros a prepararnos, olvidando a Omar, que era casi la misma jugada de ropa y eso, solo que lo nuestro era más tranquilo, nosotros no necesitábamos ocultarnos.
-Listo- dijo él dándose vuelta y cuando lo vi, les juro que a mí me impactó un buen. El maquillaje si le quedo muy bien y junto con el resto de ropa, la situación hasta me hizo pensar por un instante de que era otra persona. Pero solo duró segundos, porque yo sabía que era Omar, pero sentía que le faltaba algo y sabía que era.
-¿Ahora a dónde?- dijo Omar sonriendo mientras buscaba cierto pastillero con sus aros.
-Ponte… este- le dije sacando uno plateado algo delgado para la nariz.
-Debería cambiar de lugar todo- dijo divertido tomando el aro y poniéndoselo.
-Perfecto, solo falta, arruinar un poco tu cara- le dije tomando una brocha y empecé a arruinar su maquillaje. Y después ir con el nuestro, para que quedaran parecidos y cuando terminamos, nos gustó el resultado y en media euforia, logramos llevarnos a Omar al Renacimiento.
Así que como tal no sé cómo logramos que nos acompañara muy bien, pero aunque ya teníamos el puto de la parte física lista, aún nos faltaba algo muy importante, la actitud. Porque como iban las cosas ese día, ese era un detalle algo problemático.
Aunque tenía que admitir que conforme ibas conociendo a Omar y te ibas ganando su confianza, también conocías a un Omar que era alguien muy ordinario que te caía bien rápidamente. Aunque aún conservaba parte de él chico asustadizo y suicida, pero que era una buena persona, cosa que aunque me hizo ver a Omar cómo un buen candidato para que formará parte de Moonlight. No era fácil convencerle a veces, cosa que aún pasa y por eso, cuando sé que si lo presionó lo pierdo y no tengo mucho que perder, lo dejo solo con el pendiente, cosa que si me funciona muy bien.