Nicolás Miller
–Lucia –digo, pero no veo a nadie así que solo me dirijo a mi oficina a seguir con mis asuntos, entre papeles y más papeles me llega la noche, llego a la mesa y están todos sentados Amaia me mira y luego desvía la mirada sonríe malévolamente así que decido sentarme a su lado y dejar mi puesto de siempre ella me mira sorprendida intenta decir algo, pero cuando Pablo toma mi lugar sus manitos y pies se mueven nerviosamente y rio internamente, sé que algo tramo y al juzgar por su nerviosismo alguien más caerá en su broma.
Empezamos a comer silenciosamente cuando llego el turno del postre nos colocan los platillos con una especie de flan al parecer de coco.
–Oh Nicolás creo que este es tuyo –dice Pablo al sentarnos en otro lugar le dieron mi acostumbrado pastel de chocolate el cual es mi delirio.
–Tranquilo intercambiemos hoy deseo esto –dije probando mi plato observo a Pablo probar el suyo y antes de poder decir algo escupe en su servilleta y un gusanito vivo se mueve entre su servilleta Amely toma el plato y aplasta el pastel notando que este tiene unos cuando insectos, yo me rio comiendo mi flan de coco todos ríen, pero nadie dice una palabra la pobre humana me mira molesta y sus ojos están aguados.
–Papi lo siento eso no era para ti era para el amargado –dice mi pequeña mate mirándome con molestia.
–Pues deberías mejorar tú técnicas –murmuro molesto solté una carcajada y salí directo a mi habitación.
…
Hoy teníamos fiesta en la manada, ya que los pequeños de Leah y Estefany al fin cumplirían un año Leah dio a luz un varoncito llamado Leandro y dos días después nació la pequeña Estefanía ellas decidieron que ellos eran suficientes era curioso cómo ha avanzado la ciencia de una manera que ellas pudieron mezclar su ADN con el de su donante para que los bebes tuvieran el ADN de ambas curioso, pero si funciona es lo importante, Estefanía es idéntica a Leah y Leandro a Estefany los cuatro forman una hermosa familia y son muy felices.
Mi pequeño tormento tiene ya nueve años aún sigue con sus bromas hacia mí, pero ya son menos frecuentes en general son cuando llego de un viaje dice mi madre que es su forma de decirme que me extraña cuando me voy, pero eso es algo que pongo en duda.
–Vamos a comer pastel –me dice Maxi el cual sonríe mirando todos los niños jugar ya están todos grandes y aparte de Leandro y Estefanía no hay bebes en la manada o al menos de nuestras familias directas.
Camino a su lado y tomo un trozo de pastel regreso a mi mesa, observo a todos los niños jugar en los juegos inflables otros corren por el lugar mientras yo disfruto mi pastel, siento un olor a excitación cerca de mi volteo y frente a mí hay una loba con una diminuta falda que me permite disfrutar de sus torneadas piernas subo la mirada y me encuentro con un percing en su ombligo descubierto, sigo deleitándome con la vista y llego a sus dos jugosos y blanquecinos melones mi entre pierna da un salto al ver a sus hermosos ojos azules y brillantes.
{Ten cuidado no me agrada su olor es de interés} dice mi lobo, no le hago caso nunca había sentido deseo con ver una chica lo mío siempre era elegir mirando la mercancía y disfrutar, pero ella me hizo recordar que hace más de tres meses que no libero mi cuerpo de forma natural y lo necesito, necesito un cuerpo caliente bajo el mío, pero no cumplir mis reglas es algo que no está en mis planes.
–Un placer alfa soy Jessy soy prima de Estefany he venido a pasar una temporada en su manada –dijo la hermosa loba.
–El placer es todo mío y nada de formalismos dime Nicolás –dije sin darme cuenta.
–Oh gracias Nicolás, ¿puedo? –dijo señalando la silla, asentí poniéndome de pie y ayudándola a tomar asiento como todo un caballero.
–Cuéntame de ti –dije curioso mirando los gruesos labios rojos que se mordisqueaba mirándome con una miraba muy lobuna.
–Yo tengo 22 años termines mis estudios en administración de empresas hace unos días vine a conocer los bebes ya luego me iré en unas semanas a tratar de encontrar empleo aunque en mi país es sumamente difícil –dijo sonriendo.
–Yo tengo algunos negocios por haya veré si puedo ayudarte –dije sinceramente.
–Muchas gracias, pero cero trabajo me encantaría saber más de este bello país, ya que este es mi primer viaje fuera de Venezuela –dijo mirando a su alrededor con una gran sonrisa.
–Por supuesto seré tu guía –dije acariciando su hombro, ella sonrió coqueta se puso de pie y yo con ella se aceró y me beso la comisura de los labios.
–Hasta pronto alfa –dijo rosado sus exuberantes pechos con mis hombros.
–Amigo ten cuidado –dijo Eduardo lo miré y él veía a una enmarañada Amaia que mataba con la mirada a Jessy reí por lo bajo antes de sentarme.
….
–Hijo te buscan en la sala –dijo mi madre con un gesto incómodo en el rostro asentí y salí tras ella escuche risas en el lugar y vi a Estefanía, Leah y Jessy con los niños sentados en el lugar.
–Tío, Jessy nos dijo que tú le prometiste llevarla a conocer y vinimos saber que día, ya que ella estaba impaciente –dijo mi sobrina yo asentí sonriendo mirando la lobita la cual hoy tenía un pantalón muy ajustado que le hacía un maravilloso culo.
–Así es si me esperan en 30 minutos estaré listo podemos ir al Mall en la ciudad –dije mirando a Jessy asentir con una gran sonrisa.
–Hijo ten cuidado yo sé que tienes tus necesidades, pero prefiero eso de esos clubes raros a saberte en una relación, no solo dañaras la chica sino también a tu mate y lo que piense de ti la manada recuerda que serás su líder –dijo mi padre cuando me gire no me dejo responder cuando salió del lugar yo me fui a tomar una ducha pensando que siempre me cuide de eso ahora tengo casi 219 años y vengo a comportarme como un crío, pero a la vez ella se nota que no es virgen y si ella me busca quien soy yo para rechazarla.
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Editado: 27.12.2020