TAYLOR
Adam estaba cansándome con sus celos, Esteban solo era el chico que Megan había contratado y a quien le habían dado un hogar, estaba feliz de ver el gran cambio que había tenido en el poco tiempo que tenía con nosotros, le habíamos ofrecido dos opciones trabajar para nosotros o tomar un poco de dinero que le dábamos, dijo que quería trabajar y luego de que Peter se ofreciera a cubrir turnos con él para cuidarlo, fue contratado, resulto que era un buen repostero y después de que Ashley y Megan le dieran un cambio de look, el chico se veía bastante bien, tanto que cuando llego a la cafetería después de haber pasado por las manos de Ash y Meg ni siquiera lo reconocí, tenía unos ojos verdes, el cabello liso y oscuro, de cierta forma me recordaba a Jack, pero tenía cara de conquistador, era listo, agradable y divertido, era algo así como el proyecto de caridad de Megan, pero parecía no agradarle a Adam, me preguntaba ¿Qué pasaría si supiera que Megan y Esteban se lanzaban miraditas cuando estaban juntos?, nadie podía decir que Esteban estaba aprovechándose de ella, porque él se había comprometido a pagar alquiler por la habitación que estaba usando, llame a Isabel para contarle todo lo que me pasaba con Adam y me conto todo lo que había pasado con Jack en cuanto a celos y esas cosas y que esperaba no verlo agarrar a Tom, el exnovio de Isabel, a golpes, porque Tom era solo un tonto que quería molestarlos a los dos
- Por cierto, casi lo olvido, la próxima semana la familia de mi madre hará un campamento y me preguntaba – hizo una pausa – ¿quieres ir?
- ¿De qué trata? – suspiro
- Es algo loco, hacen un campamento cada año y cada año cambian las actividades, nos separan por edad y hacemos actividades diferentes ¿Qué dices? – parecía emocionada
- Suena bien para mí ¿ira Jack o solo tú y yo?
- Solo nosotras, piensa en el campamento como un momento para descansar de todo el drama de Adam – empezó a reírse y me reí con ella porque me pareció gracioso que se riera de la nada
- ¿Qué pasa? – dije riendo
- Se supone que nosotras somos las chicas, nosotras deberíamos ser las dramáticas, no ellos – siguió riendo y reí con ella – pasare por ti el viernes después de la escuela ¿te parece?
- Claro, me parece genial, te veo el viernes – colgamos el teléfono
Me puse a buscar mi cámara, las baterías de reserva y las tarjetas de memoria, el resto de la semana se me fue muy rápido o quizá era porque estaba emocionada por ir de campamento, salte de alegría cuando escuche un auto estacionarse frente a mi casa y mi teléfono sonó haciendo parpadear una foto de Isabel y Jack haciendo muecas, Isabel me había enviado esa foto y me había contado que Jack la hizo tomarse una foto en cada lugar al que visitaban, yo le envié algunas que tenia de Jack, le dio tanto gusto cuando lo hice que juro que me regalaría una cámara, pero le pedí que no lo hiciera
- Saldré en un momento – tomé mis cosas y salí de la casa, un auto negro me esperaba afuera, Isabel bajo del auto y colgué el teléfono
- ¿lista para divertirte? – usaba una falda y tacones de plataforma
- Claro que sí – me ayudo a subir mis cosas - ¿siempre usas tacones? – se miró los pies, como si hubiera olvidado que estaba usándolos
- Supongo que sí, no lo sé, es como que olvido la ropa que uso ¿quieres ver algo sorprendente? – asentí para ella, en menos de unos minutos tenía un short hasta las rodillas y tenis – me lo enseñaron hace poco – guiño un ojo y sonrió – bueno, vámonos
Entramos al auto y puso música, cantamos todas las canciones que nos sabíamos y en algún momento de la carretera me quedé dormida, desperté cuando ya estábamos por llegar al campamento, pasamos unas cuantas cabañas y nos niños corrieron cerca del auto de Isabel, sonriendo y gritando su nombre
- Oh ya despertaste – bajo el vidrio y empezó a saludar a todos mientras buscaba donde estacionarse – vas a amarlos a todos, los pequeños son un caos, pero te encantaran – le sonreí
- No sé qué hacer, no tengo más primos además de ti – me sonrió con amabilidad
- No te preocupes, ahora los tienes, solo déjate llevar, diviértete y disfruta del momento, mi familia es tu familia ¿de acuerdo? – le sonreí y bajé del auto
- Isy – corrió hacia ella una pequeña niña de cabello rubio, rizado y con un lindo mameluco de mezclilla beige - ¿Quién es ella? – Isabel la levanto y le beso sonoramente la mejilla