Capitulo: 7 Camino al C.C.

El grupo bajo de la azotea de lo que al parecer era un restauran de comida rápida. Al tocar el suelo se dirigieron corriendo a la masa de autos detenidos y aglomerados en la Av. Las delicias. Tomaron la decisión de ir agachas entre los autos en dirección al sur, al centro comercial. Aunque la camineria que se abría entre las dos vías, estaba más despejada también estaba llena de cuerpos destrozados y cadáveres que empezaban el proceso de descomposición, y aunque estaba más despejado de heridos era más fácil de que estos los vieran y los atacaran ya que muchos estaban sobre los autos viendo al sol todavía. Mientras se abrían paso entre los autos, zigzagueando entre los espacios abiertos entre cada coche, camión y bus como fugitivos se encontraban con más sobrevivientes que también utilizaban los coches como escondite para moverse sin ser vistos por los heridos. No cruzaron palabras con los sobrevivientes pues cada quien estaba enfocado en solo moverse y salir de ese sitio, no había tiempo de saludos ni formalismos.

En el interior de los autos se podían ver algunas personas malheridas y otras muertas u otros, atropelladas o devoradas. Familias enteras que quedaron atrapadas en el caos y que ahora yacían sus cuerpos encerrados en sus autos como en sepulcros comunes. Algunas que estaban heridas o atrapadas entre los choques pedían ayuda al ver pasar a los superviviente; pero estos solo se detenían para solo echar un vistazo rápidamente y seguir mientras otros solo aprovechaban el momento para revisar los moribundos y arrebatarle algunas cosas que le pudiera ser de utilidad. Al ver esto Nathalia recordó un video que le envió su amiga Carla de un choque de un camión de comida que abastecía a los mercales (Mercado de Alimentos es uno de los programas sociales incentivados por el gobierno Venezolano) donde se podía ver el cuerpo mutilado del chofer y en la cabina el ayudante aun vivo pero atrapado en lo fierros y donde se podía ver a una multitud que en vez de socorrerle se enfocaba en solo saquear los alimentos y algunos movían el cadáver para abrirse paso con los bultos de comida. Mientras veía esto se pregunto ¿Qué nos trajo a esto? ¿Hemos perdido nuestra humanidad? Y se respondió a si misma ¡es cuando despojas a las personas de su dignidad! Solo queda sus instintos básicos.

En algunas partes sobre el asfalto se podía ver pequeños charcos de lo que al parecer era vomito. Un vomito de sangre y pedazos de carne que fueron regurgitadas por los heridos. Kevin al ver esto recordó que al entrar a la habitación de la abuela pudo ver que en el suelo había vomito que vino de el estomago de la abuela de Kervis. - ¿están vomitando lo que han comido? – se pregunto Kevin mientras pasaba por encima de un charco de vomito donde se veían pedazos de carne negra a medio comer, carne humana.

- ¿Por qué crees que están vomitando lo que han comido hasta ahora? – le pregunto Kevin a Michelle. La pregunta solo fue respondida con un encogimiento de hombros.

- puede que estén regurgitando, porque están enfermos. – exclamo Kervis. – puede que el cuerpo está tratando de sacar lo que les cae mal. O estén muriendo.

- los buitres regurgita la comida para aligerar su peso. – dijo Nathalia mientras cruzaba de un auto a otro. – puede que se preparen para cuando caiga el sol.       

Al irse acercando a un pequeño puente que pasaba por encima del “rio” o el cauce que ellos hace algunas horas seguían antes de que la oleada de heríos les cambiaran el plan, Michelle se detuvo para ver por la ventana de una camioneta estrellada contra la parte trasera de una góndola que remarcaba un gran cilindro de metal que en sus costados tenía una franja roja donde se leía “PDVSA AHORA ES DEL PUEBLO” y en otra “INFLAMABLE”, sus ojos se cerraron tranquilamente mientras hacia una mueca de resignación con la boca y siguió caminando. Al Nathalia llegar a la misma camioneta la curiosidad la obligo a asomarse por la ventana; al hacerlo la desesperación se apodero de ella, empezó a gritar.

– ¡AYUDENME! ¡VAMOS AYUDENME! - y de inmediato empezó a forzar la puerta del pasajero, aferro su dos manos a la manilla y empezó halar de ella con el peso del cuerpo al ver que esta no se abría golpeo el vidrio para tratar de partirlo, tomo su ametralladora y la sujeto firmemente por la culata y se disponía a golpear el vidrio cuando Kevin se abalanzo sobre ella sujetándola por la espalda y alejándola de de la ventana. Cayeron de espaldas y Nathalia rompió en llanto, se movió con violencia por unos segundo pataleando y tratando de zafarse pero al momento su cuerpo se relajo y trato de ahogar su llanto tapándose la boca mientras se arqueaba hacia un lado.

Kervis se agacho casi rosando el piso con su quijada, mientras se acercaba a la ventana y al asomarse pudo ver dos cuerpos, uno de ellos; el conductor, tenía la cabeza enterrada en él parabrisas y en su rostro se marcaba una horrible mueca; de la parte del volante salía un pedazo de fierro que se abría paso por el estomago desparramado sus intestinos sobre sus muslos y en el suelo. y en el lado del pasajero se encontraba una mujer de alrededor de 45 años la cual estaba atrapada en el metal doblado, su rostro estaba destrozado y el hueso de su hombro se asomaba por la rasgada ropa pero aun se movía, temblaba y de su garganta soltaba un sonido como de burbujeo, como si se ahogara. Kervis al ver los temblores se asusto y se hecho para atrás de un salto. Al instante pensó que ¡estaba viva! Pero este pensamiento se esfumo al ver el gran mordisco en su cuello, fue mordida por un herido y esta se movía, fue infectada. Nathalia pensó que estaba viva y pedía entre llantos y sollozos que la ayuden.